5 de abril de 2011

Explosión revela posible red de corrupción en empresa alcoholera

El titular de la CAEV reveló que tras el siniestro se realizaron inspecciones en el interior de la planta y se descubrió la existencia de cuatro tomas conectadas de manera clandestina al acueducto entre Nogales y Córdoba ¦ Fotover
Orizaba, Ver.- La explosión en la destiladora del Valle de Orizaba podría dejar al descubierto una red de corrupción con la que se presume operaba la empresa. Los trabajadores, tras el anonimato, revelan la carencia de prestaciones laborales mínimas. El director de la Comisión de Agua del Estado de Veracruz (CAEV), Pedro Montalvo Gómez, reveló la existencia de cuatro tomas de agua conectadas clandestinamente al acueducto Nogales-Córdoba.

Primero, un grupo de trabajadores desde el anonimato acusaron que los dueños de la empresa no están afiliados a los servicios que ofrece el Instituto Mexicano del Seguro Social, “pero además no tenemos el equipo adecuado para trabajar porque con el que contamos está en pésimas condiciones”.

Eso no es todo, los mismos trabajadores, según señalan, son los que planean acciones en materia de seguridad e incluso de productividad. Esto nos impide trabajar de manera correcta, reclaman los jornaleros, quienes hasta hoy desconocen cuál es su situación laboral debido a que tras el siniestro la empresa no ha reiniciado sus actividades normales.

Así las cosas, los mismos trabajadores piden que la Secretaría del Trabajo, ya sea federal o estatal, según sea el caso, intervenga e inicien inspecciones para que se determinen las condiciones en las que trabajan los obreros y determinar si es que hay acciones ilegales y en todo caso proceder conforme lo marca el derecho laboral del país.

También dieron a conocer que este es el tercer incendio, pero el del fin de semana pasado fue mayúsculo con sus respectivas consecuencias.

El titular de la CAEV, Pedro Montalvo Gómez, reveló que tras el siniestro se realizaron inspecciones en el interior de la planta y se descubrió la existencia de cuatro tomas conectadas de manera clandestina al acueducto entre Nogales y Córdoba “y no hemos encontrado el origen del por qué están hechas”. No obstante reconoció que en el siniestro “sirvieron para poder mitigar el fuego”.

Las tomas clandestinas, cada una de ellas, “descarga 55 litros de agua por segundo que le hacen falta a mucha gente y hasta el momento no existen documentos que demuestren su regularidad”.

Ahora bien, la CAEV actuará conforme a derecho: “Yo se lo dejaré a la autoridad correspondiente, que en este caso es el Ministerio Público quien deslinde las responsabilidades. El delito es haber utilizado tanta agua por tanto tiempo y no haber tenido un contrato que ampare un pago. Ahora vamos a hacer valer la ley y que se sancione lo que se deba sancionar”.

Si es irregular será sancionada. Estas tomas clandestinas eran utilizadas para enfriar calderas, “para eso no fue construido el acueducto Nogales-Córdoba”.

Se conoció, además, que el Ministerio Público ya ubicó a los familiares del único fallecido y sólo se realizan las pruebas finales para que se proceda a entregar el cadáver a su familia; corresponde a un trabajador de la empresa.

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