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Columna: Fuera de Foco
Indudablemente
los permisionarios han demostrado que sus “ínfulas” y poder no tienen límites.
Pese a que la imagen del gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa se
encuentra realmente a la baja, al final no tuvo empacho en armar todo un
“ardid” para hacer creer a la población, estudiantes, senectos y hasta medios
de comunicación que tenía voluntad de no accionar -como siempre lo hace- en
contra de la economía de los ciudadanos. Al final de todo este cuento, todo,
desde un principio fue tramado, hasta los universitarios comprados con los que
supuestamente “dialogó” en una reunión, donde a los periodistas no se les
permitió ingresar.
De todo ese asunto, la reflexión es casi obligada. Podemos decir que como
siempre, el ejecutivo estatal se burla de la inteligencia de los ciudadanos.
Indudablemente la población ha podido constatar una y otra vez, la falta de
experiencia política de los enquistados –por Fidel Herrera Beltrán- quienes no
elevan el nivel para gobernar; hacen sentir que somos gobernados por unos
chamacos de primaria, que no entienden absolutamente nada de política y
comenten miles de errores. El problema es quien paga “los platos rotos” somos
los veracruzanos.
Estos sujetos –servidores públicos- han encontrado en el poder, una forma
de vida fácil, donde sin esfuerzo alguno pueden vivir cómodamente y desviando
los recursos a manos llenas, bajo la complacencia de la sociedad veracruzana,
quienes viven sometidos, sobajados y en la absoluta apatía.
Se dice que quien
tiene el dominio de la información es quien realmente tiene el poder. Tal vez
ésta hipótesis se podría aplicar a anteriores gobernadores o al mismo Fidel
Herrera Beltrán, quien todos podemos decir que es el ser más corrupto que
en la historia de Veracruz haya existido; pero no se le conocía por ignorante
ni “tonto”. Actualmente somos administrados por la ignorancia e inexperiencia,
y ese aspecto podría hacer llorar amargamente a cualquiera, pues es doloroso
estar gobernado por un ser inferior intelectualmente, y no tan sólo eso, sino
tener que padecer diariamente las inequívocas acciones cometidas de quienes se
encuentran incrustados en el poder.
El problema se ha
pagado hasta con “sangre” y dolor en muchas ocasiones, pues a causa de la
corrupción, el estado se encuentra secuestrado literalmente por el crimen
organizado. Situación que le podemos “agradecer” al “Tío Fide”, pues no tan
sólo concilió la incapacidad de sus “protegidos”, sino que les instaló un
“chip” para que fueran corruptos, nefastos, soberbios, voraces para vivir a
costillas de los gobernados, sin ningún grado de civilidad y muy cínicos.
El problema que causa
realmente una gran molestia su desvergonzada forma de hacer las cosas. Actos
que originan grandes pérdidas en todos los sectores, provocando un estado
atrapado en la sumisión, la pobreza y desmoronándose por la falta de recursos
para obras.
El desagravio a la
sociedad el día de hoy por parte del gobernador del estado, Javier Duarte de
Ochoa en el tema del aumento de la tarifa del pasaje urbano, evidencia su falta
de compromiso social. Los veracruzanos han tenido que “cargar la cruz” de todas
y cada uno de sus arrebatos y corruptelas. Evidentemente la negación de toda
una semana argumentando que no iba a permitir que los permisionarios se
salieran con la suya, es parte del circo que siempre le gusta montar, pero al
final, siempre es lo mismo: “jode al pueblo”.
Jamás tuvo intención
alguna de solucionarlo. Es mentira que existan 380 camiones detenidos, nunca
nadie los vio y ni su dichoso “operativo” de la delegación de Tránsito del
estado, el cual como todo lo que viene de él, sólo se llevó a cabo en su
imaginación. Obviamente las dichosas circulares –aunque Arturo Bermúdez lo
negara- donde advertían sobre el aumento y que fueron pegadas en las chatarras
con llantas fueron expedidas por parte del titular de la SSP. Cómo siempre les
dieron “atole con el dedo” a los universitarios y senectos que conformaron las
mesas de diálogo, pues mientras los tenían entretenidos haciendo propuestas –a
sus espaldas- montaron todo un “show” mediático con un “porro” estudiantil de
la carrera de Ingeniería de la ciudad de Xalapa, mejor conocido como “La pulga”
y de nombre, Gustavo Enrique Guzmán Tomes.
El espectáculo fue
absurdo y obvio. Le piden a este estudiante –quien controla a un pequeño grupo
de universitarios en la ciudad de Xalapa- que se presente en tiempo y forma al
Word Trade Center con su gente para “montar” la escenografía ante los medios de
comunicación. El guión era simple –y tonto- ejecutarían dos actos, en el
primero harían creer a los medios de comunicación de estar llevando una
acalorada reunión y en el segundo acto, saldrían, se tomarían la dizque “foto
oficial” para luego dar fe ante los medios de comunicación que se llegó al
común acuerdo de subirle al pasaje.
Gran proeza. Obviamente
absurda y realmente falta de imaginación. Vaya ni un párvulo les podría creer
tal “charada”. Es simple, le explicaremos al señor gobernador porque pongo en
tela de duda su infructuosa “estrategia”.
Como primer punto
amable lector, jamás –ni por error- Javier Duarte de Ochoa utilizaría su tiempo
en presenciar una reunión con “chamacos universitarios”, por dos razones
contundentes:
Una por vanidad y
soberbia, y la otra, porque es muy “miedoso” y le teme al ridículo. Jamás se
expondría a ser literalmente sentado en el “banquillo” de los acusados. Es por
ello, que los genuinos estudiantes no fueron jamás considerados para llevar a
cabo “la dichosa” negociación y con engaños los han mantenido dizque trabajando
con Mario Ortiz Martínez –líder de los ruleteros- a quien convirtieron en
“delegado” de la División de Política Regional.
Mientras tanto en el
WTC, se montaba una escenografía mediática con el apoyo de Guzmán Tomes. Cómo
lo expresé líneas atrás, su compromiso sería llevarle un grupo de
universitarios, sentarlos en la supuesta reunión, que aplaudieran fuertemente
para que afuera los medios de comunicación escucharan y al final salir, todos
contentos –hasta mostrando una gran alianza con una abrazo “fraternal” entre
Guzmán Tomes y el gobernador- y por último la “fotito” del recuerdo. Un show de
tres pesos, como los que hace Televisa y TVAzteca. Sabemos que dicho montaje no
le habrá salido nada barato, pues los actos porriles se cobran muy caros y
hasta con cargos públicos.
Nada más que para la
próxima ocasión, le damos como “tip” al ejecutivo estatal, que instruya mejor a
su “Pulga” o mínimo le enseñe a contar, pues mientras que él declaraba a los
medios de comunicación que adentro había alrededor de mil estudiantes; su
“flamante” delegado de la División de Política Regional, Mario Ortiz Martínez
dijo que eran 100.
¿A quién le
creemos?
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