20 de julio de 2014

GOBIERNO DE VERACRUZ INCUMPLE PROMESAS A DEUDOS DE “GOYO”


Javier Duarte y Cindy Jiménez, la hija de Gregorio Jiménez. Promesas incumplidas. Foto: Rubén Espinosa
Javier Duarte y Cindy Jiménez, la hija de Gregorio Jiménez. Promesas incumplidas. Foto: Rubén Espinosa
XALAPA, Ver.- (apro).- De las cinco promesas que hizo el gobierno de Javier Duarte a los deudos del reportero de Liberal del Sur y Notisur, Gregorio Goyo Jiménez de la Cruz, al momento no ha cubierto ninguna, denunció Cindy Jiménez Sánchez, quien hoy vive en una humilde vivienda en las afueras de esta capital.
 
Jiménez reprocha que a cuatro meses del secuestro y posterior ejecución de su padre a manos de una célula delincuencial, no han llegado las becas educativas prometidas para sus hijos ni el trabajo en el gobierno que prometieron las autoridades y tampoco la entrega de una vivienda propia y una pensión.
 
“De parte del gobernador no he tenido una ayuda, sí promesas, pero ninguna se llevó a cabo”, lamenta Cindy Jiménez en entrevista que concedió al corporativo de Editorial Olmeca y que comprende los periódicos Liberal del Sur –donde trabajaba Goyo–, Crónica de Xalapa y Diario del Puerto.
 
Jiménez asegura que hoy vive con “miedo”, pues en las noches no puede dormir al imaginar que escucha a su papá llorar.
 
“Quedé mal psicológicamente, aquí en Xalapa hasta mis hijos perdí, cedí la custodia temporal al marido de mi concuña”, abundó.
 
La hija de Goyo expresa que hoy vive en una pequeña casa, duerme en un catre y no tiene algún tipo de seguridad.
 
Desde mediados de febrero, la hija de Gregorio Jiménez se encuentra viviendo en la capital del estado con una pensión al mes de 3 mil 500 pesos que le manda la Comisión Estatal de Protección a Periodistas (CEAPP).
 
Expone que, como madre soltera, le hace mucha falta el periodista de El Liberal del Sur, pues era su principal apoyo, hasta que el 5 de febrero un comando se lo llevó para ultimarlo en una casa de seguridad en el municipio vecino de Las Choapas.
 
Debido a la situación de inseguridad, la hija del periodista no puede regresar a Villa Allende o Coatzacoalcos, pues teme que desde la cárcel los asesinos de su padre tomen represalias contra ella.
 
PROCESO

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