1 de diciembre de 2014

UN PAÍS QUE HOMENAJEA CON MÁS FUERZA AL CREADOR DEL "SE ME CHISPOTEO" QUE A CUALQUIER CIENTÍFICO, ESCRITOR O MÚSICO DE VERDADERO TALENTO.

Miguel Cordero
Estimados, déjenme contarles una historia llamada "El Chavo del Ocho". Todo comenzó cuando el entonces joven escritor Roberto Gómez Bolaños comenzó a proliferar en Televisa.

Su estilo era fresco debido a que perfeccionó el estilo cómico del "sketch". El productor lo bautizó, por su capacidad creativa como un nuevo Shakespeare, pero como era de pequeña estatura lo nominó como un "shakespearito" o Chespirito.

Mientras, el país se sumía en una profunda crisis económica. El peso se devaluaba y el boom petrolero estaba desapareciendo. Fue entonces que a través de la televisión vino una estrategia perfecta: exaltar la pobreza, verla como algo bueno y señalar la riqueza como perjudicial para los valores mexicanos.

De la misma manera un personaje simpático hacía que la grave crisis energética se transformará en un chiste de su programa. ¡Cuántas veces el Chavo se burlaba de los "energúmenos" (energéticos) en su programa! Y vino entonces la creación de cultura de masas, como la llaman los sociólogos.

Desde el popular Chavo del Ocho los mexicanos se reían y empatizaban con el hombre flojo y deudor, los "chavo espectadores" ridiculizaban la educación y se reían del culto y preparado, el ñoño. La "bonita vecindad" era la mejor manera mediante la cual el poder político apaciguó, por décadas, la necesidad de los mexicanos de superarse a sí mismos, al cabo que "es mejor ser pobre y honrado".

No son estas líneas una exageración. Si el poder de influencia del Chavo no hubiese sido tan eficaz, no habría llegado hasta todos los países latinos con crisis similares y donde el poder de Televisa se consolidaba.

Otra prueba: el mensaje de humildad, solidaridad, amistad de la pobreza proclamado en El Chavo solo fue un espejismo. Roberto Gómez Bolaños ejerció abusos sobre sus compañeros del elenco, primero con Carlos Villagran y después con María Antonieta de las Nieves.

Si aquellas divisiones comenzaron por celos profesionales y desacuerdos económicos, estas crecieron a causa de Florida Meza. Yo particularmente la conocí, es una mujer sumamente prepotente. Eso es el Chavo y la herencia cultural tan dañina para América Latina.

Creer que un programa de tal impacto, penetracion y duración es "inofesivo" es pecar de inocente. Ya lo escribí antes, el Tigre Azcárraga se consideraba un soldado del PRI dispuesto a ofrecer los servicios de su Televisora a la Dictadura Perfecta.

A pesar de todo esto, jamás ningún ser humano que se precie de ser recto puede celebrar la muerte de alguien. Ojalá la familia encuentre consuelo tras su pérdida, pero es un grave error de nuestra sociedad occidental tender a idealizar su pasado y a sus personalidades. Jamás evolucionaremos si no criticamos nuestro pasado, nuestra propia cultura de masas, lo que Zunzunegui llama La Tiranía de las Ideas.

Las variables descritas en este post demuestran la nociva influencia de la apología de la pobreza en los programas estelares de Televisa. ¿Cómo homenajear a los personajes y programas que crearon la cultura conformista de estos, nuestros días aciagos?


Los pecados de la pareja presidencial son también nuestros como sociedad; un país que homenajea con más fuerza al creador del "se me chispoteo" que a cualquier científico, escritor o músico de verdadero talento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario