30 de junio de 2015

UNA NUEVA FALACIA: LA “HORA DUARTE”

La hora Duarte
Rúbrica
Por: Aurelio Contreras Moreno

Con un repentino furor moralino que se enmarca en su andanada de endurecimiento legaloide para restringir libertades y derechos ciudadanos en Veracruz, ahora el gobernador Javier Duarte de Ochoa, como si tuviera autoridad moral para hacerlo, la emprendió contra los comerciantes de bebidas alcohólicas. 

Este lunes anunció que enviará al Congreso del Estado una iniciativa de reformas a la Ley General de Salud y al Código Penal del Estado para restringir los horarios de venta de bebidas alcohólicas y penalizar severamente la venta de las mismas a los menores de edad.

Bajo el demagógico título de “Para una juventud segura y libre de alcohol”, dichas reformas limitarían la venta de bebidas alcohólicas en bares, restaurantes y establecimientos comerciales varios hasta las dos de la mañana. Y contempla penas de entre seis y 12 años de cárcel, así como multas por hasta 42 mil pesos, a quienes vendan licor a menores de edad.

Dicen que quien no conoce la historia, como parece ser el caso, está condenado a repetirla, con todos sus errores. Cualquier tipo de prohibición al consumo de cualquier producto lo único que logra es alentarlo. Para mejor ejemplo, las drogas, que a pesar de todo el aparato puesto en marcha en su contra, su venta y consumo no han disminuido. Todo lo contrario.

Si nos queremos remitir a hechos históricos relacionados exclusivamente con el alcohol, baste recordar lo que sucedió en Estados Unidos en la década de los 30, cuando se prohibió su venta y consumo. Se propició la creación de mafias que son el antecedente de los cárteles de la droga en ese país. Que alguien les muestre la película “Los Intocables”, para que se enteren.

Y para ejemplificar con un caso más local, en Xalapa ya existió lo que se llamó la “Hora Méndez”, de la cual es copia al carbón la iniciativa de Javier Duarte. Cuando fue alcalde de la capital de Veracruz Armando Méndez de la Luz, a principios de la década de los 90 del siglo pasado, estableció exactamente la misma restricción de horarios para la venta de alcohol. Hasta las dos de la mañana.

¿El resultado? Una explosión del mercado negro, donde además se les vendía cualquier porquería a los consumidores. Además de ello, mientras en Xalapa no se vendía licor, en los municipios vecinos sí, con lo que no sólo no se inhibió su consumo, sino que únicamente se trasladó a otro lado, en perjuicio de los comerciantes locales.

Lo que pasará si los dóciles diputados locales aprueban este nuevo despropósito del mandatario veracruzano será, con perdón de la expresión, darle en la madre al sector turístico del estado, pues los visitantes preferirán acudir a cualquier otro sitio donde no los traten como menores de edad queriéndolos mandar a dormir a las dos de la mañana. Y por supuesto, como en la época de la “Hora Méndez”, lo único que incentivarán será la venta clandestina de alcohol de dudosa procedencia. ¿Eso es mantener a la juventud “segura y libre de alcohol”? No lo creemos.

Por lo que hace a la prohibición de la venta de alcohol a menores, estaría muy bien tal disposición… si no fuera porque ésta ya existe en todos los reglamentos municipales de los 212 ayuntamientos del estado.

El problema es que se tienden estas cortinas de humo cuando hay temas de mucha mayor gravedad que atender, como la nueva legislación electoral con la que el PRI intentará acomodarse una ley a la medida para mantenerse en el poder.

Sólo nos resta una pregunta: ¿las francachelas en Casa Veracruz también van a terminarse a las dos de la mañana?

Twitter: @yeyocontreras

No hay comentarios:

Publicar un comentario