26 de junio de 2017

ACORRALADO, EL 'GOBERNADOR DEL CAMBIO' SIGUE BARRIENDO PARA ATRÁS, AUN CUANDO LAS CIFRAS LO EMPINAN

Miguel Ángel Yunes Linares sigue obsesionado con el pasado reciente, y ante la falta de resultados del "el gobierno del cambio", como él mismo lo calificó y que ha resultado ser totalmente fallido en todos los aspectos, no le queda más que barrer para atrás y echarle la culpa de todo a sus odiados rivales, Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa. 
Conocido hace 25 años, cuando llegó a la Secretaría de Gobierno arropado por el potosino -nació en Tamuín, San Luis Potosí, a 91 kilómetros de Pánuco, tierra de sus mayores pero no de él- Patricio Chirinos Calero, como "Kid Yunes" porque decían sus panegiristas que "le entraba a todas las broncas", tal parece que el tiempo le ha mermado esas facultades y ahora solo busca pretextos para justificar por qué no se ha hecho realidad su discurso de "acabar con la inseguridad" en 6 meses, una de sus banderas de campaña que ha arriado, porque de la misma ya solo quedan jirones. 
Así las cosas, luego del sangriento fin de semana con más de 20 ejecuciones, entre las cuales las más impactantes han sido las del comisionado Estatal de la Policía Federal, Juan Camilo Castagné y del inspector de la misma corporación, José Rigoberto Peña y un subalterno, y la masacre de la familia Martínez Pech en Coatzacoalcos, donde 4 pequeños de 3 a 6 años han sido acribillados, el gobernador de 2 años -de los cuales ya ha malgastado 6 meses en promesas sin sustento real- , perseguido y acorralado por esa palabrería a la que es tan proclive para justificar la ineficiencia de su régimen, dice que lo que ahora ocurre en Veracruz "es la resaca, es la herencia de cuando menos 12 años absolutamente corruptos que se vincularon a la delincuencia y que gobernaron como delincuentes, esa es la realidad", le ha dicho este lunes a la periodista Carmen Aristegui Flores. 
Ha recurrido a las versiones no confirmadas, como la de señalar que Herrera Beltrán permitió la entrada de las bandas del crimen organizado durante su sexenio -2004-2010- "según un expediente en una corte de Estados Unidos, en Texas, donde un testigo protegido del Cártel del Golfo señala haberle entregado al exmandatario 12 millones de dólares para que la delincuencia organizada pudiera operar libremente en la entidad", pero las autoridades norteamericanas no lo han confirmado, no porque el nopaltepecano fiel sea su cuate, sino porque no hay pruebas como las ha habido contra el gobernador tamaulipeco Tomás Yarrington Rubalcaba, o más cerca contra el excontratista de Pemex Francisco Antonio Colorado Cessa (a) "Pancho" Colorado, además de que el único que insiste en la versión es el propio Yunes, al que Colorado Cessa le dijo en una entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva que le "pasó la charola" para su campaña a gobernador por medio de Manuel Muñoz Gánem. 
También le ha dicho a Carmen Aristegui que "no es verdad que en los primeros seis meses de su administración el incremento de la violencia se haya duplicado, pues durante el último año de gobierno de Javier Duarte "la delincuencia creció en más de 132 por ciento" y según él, "en el año 2015 y particularmente en el mes de agosto de 2016, fue el de mayor incidencia delictiva en la historia de Veracruz. 
Ahí es donde se da el repunte. Es un repunte que lleva las cifras hacia arriba. Efectivamente los primeros meses de este año la actividad delictiva vinculada con la delincuencia organizada, en particular los homicidios entre bandas de delincuencia organizada, se ha incrementado en Veracruz, al igual que en muchos estados del país, desafortunadamente". 
También, en su cuasi soliloquio ha intentado mezclar la gimnasia con la magnesia, y acusa que Arturo Bermúdez Zurita, extitular de Seguridad Pública durante gran parte del duartismo está preso, pero no ha explicado que está por uso indebido de recursos públicos, y al menos hasta ahora no está acusado de nexos con grupos delincuenciales. 
En fin, quizá sin proponérselo, el gobernante choleño -le molesta el gentilicio; cuando fue Secretario de Gobierno quiso cambiarlo, sin lograrlo, por el de "soledense"- ha demostrado este lunes en esa entrevista con la multipremiada periodista que no sabe qué hacer, en los hechos, ante esta guerra contra el crimen, que cada vez más lo lleva al borde del precipicio, ya que cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional Seguridad Pública revelan que Veracruz paso de 375 homicidio dolosos entre Enero y Mayo del 2016 –último año del Gobernador Javier Duarte de Ochoa-, a 748 en el mismo periodo de este año, lo que significó un aumento de 99 por ciento. Así, en los hechos su discurso ya no convence ni a sus más fieles seguidores, si aún los tiene. Bien dice aquella frase: no es lo mismo los Tres Mosqueteros, que 20 años después., en realidad 25 años...


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