11 de octubre de 2012

Aumentan tortura y desapariciones forzadas en el país: AI


11 DE OCTUBRE DE 2012 

MÉXICO, D.F. (apro).- A menos de dos meses de que Felipe Calderón entregue la banda presidencial a Enrique Peña Nieto, Amnistía Internacional alerta sobre el incremento de la práctica de la tortura por parte de servidores públicos en México y de la impunidad que la cobija.
En el informe denominado “Culpables conocidos víctimas ignoradas. Tortura y maltrato en México”, la organización con sede en Londres, Inglaterra, advierte que el objetivo del mismo es “ilustrar el hecho evidente de que el gobierno del presidente Felipe Calderón no ha combatido seriamente la tortura y para pone de relieve los retos que deberá hacer frente el nuevo gobierno de Enrique Peña Nieto cuando entre en funciones en diciembre, para poner fin a la tortura y a los malos tratos”.
Tras señalar que el documento será presentado ante el Comité contra la Tortura de la ONU en noviembre próximo, la organización resalta la crisis de inseguridad en la que se vio envuelto México tanto por la guerra entre los cárteles como por el despliegue de tropas en el país.
“Al menos 60 mil personas han sido víctimas de homicidio y más de 160 mil se han visto desplazadas internamente, debido sobre todo a la violencia provocada por disputas territoriales entre cárteles, pero también a operaciones de las fuerzas de seguridad. Es en este contexto en el que se han aumentado de manera alarmante los informes de tortura y malos tratos”, sostiene AI.
En el informe se destaca que durante los últimos tres años AI documentó casos representativos en los 31 estados y el Distrito Federal, y que pudo constatar que las violaciones graves a los derechos humanos como “homicidios ilegítimos, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, uso excesivo de la fuerza y tortura cometidas por funcionarios públicos federales, estatales y municipales”.
Sin embargo, la organización considera que el despliegue de tropas del Ejército y la Marina, unos 50 mil efectivos, “ha contribuido a este acusado aumento de los informes de tortura y otros malos tratos a manos de militares. Amnistía Internacional no tiene conocimiento de que en alguno de los casos que ha documentado se haya dictado sentencia condenatoria por un delito de tortura”.
En el informe se destaca la complejidad para documentar el delito de tortura, toda vez que el delito no está estandarizado en las 32 legislaciones, por lo que no todos los casos son procesados judicialmente, en tanto que la Comisión Nacional de Derecho Humanos (CNDH) sólo tramita los casos atribuidos a servidores públicos federales.
Aun así, tomando como base los informes de la CNDH, se agrega, el incremento del delito es impactante. En 2007, el organismo sólo tramitó cuatro denuncias por tortura, incrementándose la prevalencia año con año, hasta que en 2011, la cifra creció a 42. Se acumularon 110 expedientes por tortura en el organismo, en tanto que por malos tratos, abrió 4 mil 731 expedientes.
“De las 110 denuncias de tortura, 31 han dado lugar a recomendaciones de la CNDH, mientras que 57 siguen siendo objeto de examen. De las 4 mil 731 denuncias de malos tratos, 83 han dado lugar a recomendaciones”, se indica en el documento.
El documento de AI incluye reportes de otras dependencias gubernamentales para ilustrar lo complicado de documentar con certeza la tortura en México. De acuerdo con la PGR, de 2008 a 2011 se abrieron 58 averiguaciones previas por ese delito, de las que sólo cuatro concluyeron en acusaciones formales; en el mismo periodo, la Judicatura Federal registró 12 procesos judiciales de los que se emitieron cinco sentencias condenatorias.
De su lado, el INEGI reportó que en el ámbito federal, de 2006 a 2010, sólo hubo un proceso judicial y ninguna sentencia; en el fuero común, en el mismo periodo, se reportaron 37 procesos y 18 sentencias condenatorias por tortura.
“Resulta sumamente difícil determinar la verdadera magnitud y extensión de la tortura y otros malos tratos en México. Esta dificultad se debe en parte al endeble sistema de denuncia e investigación, que casi nunca hace rendir cuentas a los responsables y deja a las víctimas y testigos expuestos a sufrir represalias, como consecuencia de lo cual se denuncian muchos menos casos de los que realmente se producen”, puntualiza AI.
Sobre denuncias contra militares por tortura, AI señala que, con base en una solicitud de información pública, la Sedena afirmó que inició mil 60 denuncias contra militares que cometieron delitos contra civiles en 2010 y 449 en 2011, lo que dio origen a 118 investigaciones, entre ellas las de 17 soldados implicados en casos de tortura.
“De los militares afectados 98 se enfrentaban a cargos penales, algunos por violencia contra personas causantes de muerte, y al menos nueve enfrentaban cargos de tortura. Durante 2010 y 2011 se condenó a nueve militares por delitos contra civiles. Según la Sedena, durante la administración de Calderón se han condenado ante tribunales militares por abusos contra los derechos humanos a 38 soldados. Sin embargo, 11 de estas sentencias condenatorias corresponden a casos ocurridos antes de la administración de Calderón y al menos 19 de las 27 restantes están en proceso de ser recurridos”, resalta AI en su informe.
El documento, que incluye también temas de violencia contra mujeres, migrantes y desaparecidos resalta que queda en evidencia una vez más que a pesar de que en materia de política externa México se ha destacado por ser uno de los Estados promotores de los derechos humanos, al interior “esta postura es insostenible y contraria a las obligaciones internacionales contraídas por México en materia de derechos humanos, entre las que figura la aplicación plena y genuina de medidas eficaces para impedir y castigar la tortura y otros malos tratos”.

Decepcionante la nueva policia vial/ Piedra en el zapato



Lilia Baizabal
por Lilia Baizabal
La demagogia es la capacidad de vestir las ideas menores con las palabras mayores”: Abraham Lincoln
Por increíble que resulte después de 1 año de estar esperando a los super policías, la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Veracruz, presentó a solo 45 elementos de la nueva “Policia Víal”. Especies de RoboCop, que lo mismo infraccionarán a un conductor que brindarán servicios de seguridad a los ciudadanos.
El Secretario de Seguridad Pública Arturo Bermúdez,  anunció con bombo y platillo, a los nuevos cuerpos de élite de seguridad que operarán dentro de un programa piloto que inicia en Xalapa, la capital del estado de Veracruz. Una de las ciudades más afectadas por los índices de inseguridad, especialmente, asesinatos  y desapariciones de jóvenes  mujeres menores de 20 años.
Más que alegría y regocijo para los ciudadanos, causó decepción e indignación la presentación  de una policía vial que ofrecerá actividades meramente “paliativas”, y no acciones auténticamente contundentes para contrarrestar los graves hechos de inseguridad que continúan afectando a muchos inocentes.
Los veracruzanos esperan de la Secretaría de Seguridad Pública, asuma el control total de la seguridad de los habitantes de esta entidad. Tarde que temprano, la próxima administración federal retirará a  las fuerzas armadas del ejército y la marina de las actividades que realiza desde hace un año  y entonces, quién cumplirá dignamente ese papel.
Y ya lo adelantaron con el anuncio de la creación de una policía especial que dicen, tendrá como principal propósito combatir al narcotráfico.
En la presentación de la nueva policía vial por parte de Arturo Bermúdez Zurita,  se dijo que actuará con armas largas y lo mismo ofrecerán ayuda en un hecho de inseguridad, que darán información y hasta podrán detener a todos los conductores de vehículos que no porten las nuevas placas que se vendieron para los casos que no cumplieron dentro de los tiempos establecidos por finanzas.
Son estos nuevos elementos, según el funcionario que los presentó, algo así como una especie de RoboCop, personaje central de aquella famosa película de ciencia ficción y acción del  año 1987, y protagonizada por el actor Peter Weller. La trama americana, abordó temas de manipulación mediática, corrupción, privatización, capitalismo y naturaleza humana. Cualquier semejanza con lo que vive Veracruz, es mera coincidencia.
Lo malo fue saber que la nueva policía vial trabajará encapuchada. Portarán cascos y se cubrirán los ojos con lentes oscuros. Se preguntará, qué ciudadano puede tener confianza en una persona que no dará la cara. Si muchos de los actuales policías operan con el rostro descubierto, deciden ser parte de la delincuencia, qué se puede esperar de uno que ocultará su identidad.
Cualquiera podría disfrazarse de policía vial. Como muchos lo han hecho imitando a los de seguridad pública, que han sido implicados en el levante de personas especialmente jóvenes varones. Queremos pensar que eran delincuentes disfrazados de policías y no policías prestándose por completo a la labor de las bandas organizadas.
Todo un año para que la Secretaría de Seguridad Pública presentase solo a 45 nuevos super policías y viales. Como que no era lo que todos esperaban. Los veracruzanos necesitan algo así como el personaje que protagoniza Arnold Schwarzenegger en la película de James Cameron, “El Exterminador”.
Necesitan los ciudadanos,  auténticos ciborg indestructibles. Honorables a toda prueba, programados solo para salvaguardar los intereses públicos,  para salvar a los ciudadanos de los delincuentes organizados que han visto en la impunidad e indiferencia de la clase política, su oportunidad para sembrar el terror y el miedo entre la población.
Por qué no presentaron a esos nuevos Terminator, que entrarán en funciones ahora  que sean retirados del estado de Veracruz, los elementos de la marina y el ejército mexicano.
La otra noticia habría dado a los ciudadanos la garantía de que el flamante secretario de Seguridad Pública de Veracruz, ha estado concentrado planeando las estrategias para el total retorno de la paz al estado.
Pero no. Nadie sabe a qué se ha dedicado mientras las fuerzas federales de la marina y el ejército han realizado valientemente, el trabajo que les corresponde a elementos de seguridad del estado de Veracruz y del municipio, según establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
En tanto,  dependencias de gobierno federal como la Procuraduría General de la República (PGR), reveló en su informe del mes pasado, que en el estado de Veracruz, las denuncias por secuestro se duplicaron en los últimos 5 años.
Lamentablemente Veracruz ya ocupa el segundo lugar nacional en el citado delito, solo por debajo de Tamaulipas y seguido de los estados de Coahuila, Michoacán, Distrito Federal, Durango, Zacatecas, Chihuahua, Estado de México y Guerrero.
La Secretaría de Defensa Nacional lo confirmó también, al emitir un boletín informativo donde reveló el crecimiento del secuestro de enero a la fecha, aunque las autoridades de seguridad estatal, lo niegan. Tampoco extraña. Y eso sin considerar los delitos de extorsión, robo a casa habitación, robo a mano armada, desapariciones de mujeres jóvenes, de niños y otros muchos otros hechos de inseguridad que siguen afectando a los ciudadanos.
Después de observar que en dos años, las autoridades del estado no han ofrecido los resultados esperados en materia de administración de recursos públicos, combate a la pobreza, realización de obra pública, mejores programas de salud, combate al analfabetismo, a la corrupción en todos sus niveles y por supuesto, disminución de la inseguridad, qué más se puede anhelar.
Continuamos observando la falta de voluntad política para que las cosas cambien. Se nota y en serio que los burócratas  en el poder, están  mas preocupados por afianzar sus negocios y crecer sus cuentas bancarias, pero no en atender y resolver los graves problemas que enfrentan los ciudadanos.
¿Ir para Adelante?. No, continúa Veracruz hacia atrás.
Se preguntará, hasta cuándo.

10 de octubre de 2012

PROTESTAN POR FALTA DE RECONOCIMIENTO OFICIAL DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE VERACRUZ (UPAV)

Regresan protestas por estudios patito en UPAV
www.fotover.com.mx
Un grupo de jóvenes de Tezonapa, Córdoba y Orizaba se manifestaron en la Plaza Lerdo para denunciar la falta de reconocimiento oficial de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV), que encabeza el rector Guillermo Zúñiga Martínez.
Los estudiantes revelaron que cada uno paga por cuatrimestre y semestre, dependiendo de la carrera, 3 mil pesos, además de una cuota de cien pesos para mantenimiento, sin embargo, toman clases en instalaciones prestadas y en el caso de un grupo hasta en las gradas o en “un campo abierto” por falta de espacios.
También denunciaron que hay jóvenes egresados cuyos títulos no son reconocidos por ninguna institución en la que han pedido trabajo como en el IMSS, para los de enfermería.
Juan Carlos Hernández, estudiante de esta carrera en la UPAV, narró que una de las estudiantes, que está a punto de egresar, incluso “nos platicó que fue a la SEV a ver su caso y le dijeron que prefieren un curso de dos años de secretariado en cualquier universidad que nueve semestres de la UPAV”.
Los jóvenes lamentaron que la única respuesta de las autoridades de la institución hasta ahora es sólo entregarles las copias de las gacetas con el decreto de creación del organismo.
www.fotover.com.mx

DESAPARECE MENOR DE EDAD, LENIN ANTONIO PEREZ, HIJO DEL ACTIVISTA MAXIMINO ANTONIO JIMENEZ...

Lenin Antonio Pérez

Orizaba, Veracruz.- Maximino Antonio Jiménez presento formal denuncia en el Ministerio Público del sector sur de Orizaba, Veracruz, integrándose la investigación ministerial número 813/2012 por la desaparición de su hijo de nombre Lenin Antonio Pérez, de 13 años de edad y estudiante de la secundaria técnica 4 de Orizaba, Veracruz, quien salió de su domicilio este martes 9 de octubre, después de las 8 de la noche y ya no regreso.

De acuerdo a información recabada a Maximino le van a hablar para entregarle  unos papeles que tendrá que pegar en hoteles, terminales y tiendas y luego llevar a la subprocuraduría otro tanto,

Los familiares del menor Antonio Pérez tienen temor que atenten en contra de su integridad física, ya que Maximino Antonio es activista social y miembro del Frente Popular Revolucionario (FPR), tomando en consideración que en Orizaba, han desparecido a un buen número de personas, entre los que destacan al militante del FPR Gabriel Gómez Caña.

Maximino Antonio Jiménez se pondrá en el Parque Apolinar Castillo de Orizaba, Veracruz a repartir volantes con la foto de su menor hijo y solicita el apoyo de todos los ciudadanos para que lo ayuden a dar con el paradero de su menor hijo…

Cualquier información al telefeono 2727089647

Informacion que nuestros lectores nos hacen llegar al correo alternativo: desarmadorpolitico@hotmail.com.ar

DENUNCIAN CHONTALES A PEMEX POR “DAÑOS AMBIENTALES Y SOCIALES”


La Profepa denunció ante la PGR a Pemex por la muerte de 13 tortugas golfinas.
OAXACA, Oax. (apro).- Indígenas chontales interpusieron una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en contra de Petróleos Mexicanos (Pemex) por “daños ambientales y sociales” provocados por el derrame de 18 mil litros de hidrocarburo que contaminaron casi 200 kilómetros de playas, la mayoría de ellas utilizadas por las tortugas marinas para desovar.
En la queja, las comunidades chontales de la región de la Costa argumentaron violaciones a derechos constitucionales y leyes de protección al medio ambiente.
Ese ordenamiento, denunciaron, “se ha incumplido, pues de los resultados obtenidos se advierte la presencia de contaminantes y residuos peligrosos que afectan a la población y al ambiente”.
La querella chontal fue presentada en la delegación de la Profepa-Oaxaca y está avalada por autoridades de los municipios de Santo Domingo Tehuantepec, Santiago Astata y San Pedro Huamelua, así como de la asociación civil Costa Salvaje.
Los quejosos destacaron que Pemex provocó daños a gran parte de lagunas de mangle, la muerte de tortugas y dejó a cientos de familias sin sustento, violentando con ello el derecho a la alimentación.
“No se encuentra garantizado el derecho de toda persona a un medio ambiente adecuado para su desarrollo y bienestar, además del daño al ambiente, recursos naturales y desequilibrio ecológico que acontece”, se advierte en la querella.
Asimismo, “nos encontramos ante una serie de hechos, actos y omisiones de distintos actores y realizados en distintos lapsos de tiempo que han producido y continúan produciendo desequilibrio ecológico, daños al ambiente y a los recurso naturales de la zona, consistente en el derrame de hidrocarburos en las costas de Oaxaca, lo que deviene en el incumplimiento a la legislación ambiental”.
También denunciaron que autoridades ambientales, así como del sector salud, no han recorrido todas las áreas costeras afectadas por hidrocarburos, como las playas y lagunas de manglar de San Diego, La Playita, Brincaperro, laguna de El Rosario, Mazcalco, Barra de la Cruz, Zimatán, así como el santuario de la tortuga golfina ubicado en La Escobilla.
En la denuncia se destaca “el incumplimiento de la Ley General de Vida Silvestre, en virtud de que el derrame de hidrocarburos ha implicado la destrucción, daño y perturbación de la vida silvestre”.
Finalmente, las comunidades chontales exigen, entre otros, que se castigue con todo el rigor de la ley a los funcionarios de Pemex por su actitud negligente, misma que provocó el derrame de hidrocarburos el 11 de agosto anterior y provocó daños al ambiente y a los recursos naturales.

Lazca: ¡Levántate y anda!


JENARO VILLAMIL  ANÁLISIS

Exhibe Marina cadáver de “El Lazca”. 
Foto: Semar
MÉXICO, D.F.(apro).- Más peligroso que la brutalidad del cártel de Los Zetas es el humor negro de miles de usuarios de redes sociales. Lo que bien podía presentarse como un éxito crepuscular en la guerra calderonista contra el crimen organizado se puede convertir en otra tragicomedia de errores.
¿Cómo es posible que en pleno funeral el cuerpo abatido de Heriberto Lazcano, el Lazca o Zeta 3, máximo líder identificado de la banda de Los Zetas, haya sido robado? ¿Por qué la Secretaría de Marina tomó una foto del cadáver –misma que fue difundida y boletinada– y luego se lo “roban”, y difunda una ficha errática sobre la estatura y el año de nacimiento del capo?
El anuncio de la muerte de Lazcano estuvo lleno de equívocos:
Primero, en redes sociales comenzó a difundirse el rumor de que, desde el domingo 7 de octubre, había sido abatido en Coahuila, el territorio de los Moreira en punga, el personaje nacido en Hidalgo, en 1974, y que transitó de los cuerpos de elite del Ejército a cabeza paramilitar del cártel del Golfo y después a líder del grupo del crimen organizado más sanguinario en los últimos años.
En la noche, durante la transmisión del noticiero estelar de Televisa, Joaquín López Dóriga leyó un mensaje de la Secretaría de Marina. La dependencia informó que existen “fuertes indicios” (¿acaso existen indicios débiles?) de que El Lazca fue abatido. Al mismo tiempo, otros informes indicaron que un comando llegó a la funeraria en Sabinas, Coahuila, la misma madrugada del 8 de octubre, y se llevó el cuerpo.
Las dos versiones generaron una ola de escepticismo de los usuarios de redes sociales. Los antecedentes y las torpezas cometidas en otros casos despertaron la suspicacia. ¿Se repetiría la “pifia” del hijo peligroso de El Chapo Guzmán que resultó ser un equívoco? ¿Había alguna relación entre el asesinato y “posterior fuga” de El Lazca con la detención de Salvador Alfonso Martínez, alias La Ardilla, presunto jefe regional de Los Zetas en Coahuila y uno de los responsables de la fuga de más de 300 reos en esta entidad y la masacre de 72 migrantes en San Fernando? ¿La cacería de los “jefes Zeta”, incluyendo al Z-4, tenía alguna relación con el reciente asesinato de Eduardo Moreira Rodríguez, hijo del exgobernador y exdirigente nacional del PRI, Humberto Moreira?
Frente a la serie de dudas que han proliferado en las últimas horas, las dos principales autoridades vinculadas al caso de El Lazca sólo atinaron a contradecir sus versiones. Mientras la Secretaría de la Marina reiteró que las pruebas dactilares del cadáver hacían pensar en Heriberto Lazcano, la procuraduría coahuilense confirmaba que “les robaron” el cuerpo en un relato digno de las películas de los hermanos Almada.
La reacción en Twitter de decenas de usuarios sociales constituye un buen termómetro de la ironía y del humor negro frente a esta serie de dudas y equívocos:
@Korcolito: “Sólo les faltó decir Lazca, ¡Levántate y Anda! / Y ando y largo.”
@Charlie: “El Lazca no estaba muerto, andaba de parranda!”
@ Al Paccino (evidente sarcasmo del actor hollywoodense): “Estarían mejor custodiados los muertitos con los hermanos Almada que con los marinos o como se llamen!!!”
@Chabona: “Insisto, que lo busquen abajo del colchón”. En evidente referencia al caso más lamentable de investigaciones criminales como es el de la niña Paulette en el Estado de México.
@ElviaHernández: “#FuertesIndicios de que los apóstoles fueron los que lo sacaron de la cueva, digo, de la morgue.”
@NetoNovoa: “Un comando armado de billete$, no? Lo más probable.”
@DavidChavarría: “Comprobado, Calderón es más bruto que Fox… de perdido, a Vicente se le escapaban VIVOS.”
@WhiteStiggy: “Sólo les faltó decir que tiraron el cuerpo al mar por la religión del Lazca.”
@CuevoJuanjo: “Agarraron al Chapo y se les escapó vivo. Ayer agarraron a El Lazca y se les escapó muerto. La procu va de mal en peor…”
La frase “fuertes indicios”, utilizado por la Secretaría de Marina, se convirtió en la tarde del 9 de octubre en uno de los temas más comentados (trending Tepic) en Twitter, con decenas de chistes y comentarios sarcásticos.
Uno de ellos resumió así los #FuertesIndicios:
@Diógenes:
“-Mataron a ‘El Lazca’
-Qué bueno.
-Hay #FuertesIndicios.
-Qué malo.
-Pero hay fotos del cadáver.
-Qué bueno.
-Pero no hay cadáver.
-Qué malo.”

Descansará líder de Los Zetas… en remanso de lujo


La capilla de El Lazca en Hidalgo. Foto: Miguel Dimayuga
La capilla de El Lazca en Hidalgo.
Foto: Miguel Dimayuga


A continuación se reproduce la parte medular del texto escrito por el reportero Rodrigo Vera:
Desde hace tiempo en Hidalgo se sabía que El Lazca levantó esa ostentosa capilla de la Virgen de San Juan de los Lagos, en la calle Álamos de la colonia Tezontle, en la periferia sur de Pachuca.

Aledaña al Campo Militar 18-A, el templo tiene una cruz metálica que se yergue muy alta y domina el vasto arrabal de apiñados caseríos. Sus jardines, patios, muros de colores encendidos y amplias puertas y ventanales de cristal hacen de la capilla un remanso de lujo para la nutrida feligresía local.
Por dentro, a la espaciosa y moderna nave la iluminan vitrales de tonos azulados. Relucen los candiles y compiten en esplendor con los pisos de mosaico. Y en el altar –bajo un gran vitral que tiene la figura de una paloma– está la escultura de la Virgen de San Juan de los Lagos con su vestido ampón.
Aunque por ser capilla no tiene un párroco, los sacerdotes de los templos cercanos solían oficiar ahí las misas. Venían principalmente de la parroquia de San Cayetano, con todo y sus fieles.
Ahora el recinto está fuera de servicio.
Atrás de la capilla se construyó el Centro de Evangelización y Catequesis Juan Pablo II para dar formación religiosa a niños y jóvenes. Los salones de ese centro circundan un patio que sirve de área de recreo. Durante la construcción se dice que hasta los albañiles eran enviados por el narcotraficante oriundo de Apan, Hidalgo.
Cuando corrieron las primeras versiones del origen de la capilla, en julio pasado, Proceso preguntó al sacerdote Francisco González, encargado del decanato de la zona, si sabía algo sobre las aportaciones del capo hidalguense. El párroco contestó: “No lo sé, no lo sé”.

Los fieles, por su parte, eran renuentes a hablar de su relación con el líder de Los Zetas.
Se rumoró que el arzobispo de Tulancingo, Domingo Díaz, sabía del asunto y para no comprometerse impidió que su nombre se pusiera en la placa que conmemora la inauguración de la capilla.
Finalmente la chapa metálica sólo dice: “Centro de Evangelización y Catequesis Juan Pablo II. Donado por Heriberto Lazcano Lazcano.
“‘Señor, escucha mi oración, atiende mis plegarias, respóndeme, tú que eres fiel y justo’, salmo 143.”
Hubo fuegos artificiales, bandas de música, juegos mecánicos y una abundante tamaliza el día de la inauguración de la capilla: el 2 de febrero del año pasado. La placa se develó ese mismo día, el de la Candelaria.
Y fue por esa placa delatora que apenas el pasado octubre el Congreso de Hidalgo exigió investigar el caso. Algunos legisladores señalaron que la película “El infierno” –en cuya trama un cura es cómplice de un capo local– se quedó corta ante la realidad hidalguense.
La Procuraduría General de la República (PGR) inició la averiguación previa AP/PGR/PACH/I-V/752/2010 para indagar si la capilla fue construida con recursos del narcotráfico. El presunto delito es lavado de dinero contra quienes resulten responsables, sea el arzobispo Díaz o algunos de sus párrocos.
El vocero de la arquidiócesis primada de México, Hugo Valdemar, pide a la PGR no hacer distingos: “Si un sacerdote sabe que el donador es un delincuente se convierte en cómplice, lo cual es gravísimo; sería sano que se le iniciara una investigación penal, sería muy sano tanto para la Iglesia como para la sociedad”.
La arquidiócesis primada –en el editorial de su semanario Desde la Fe de la semana pasada– señala que “para vergüenza de algunas comunidades católicas hay sospechas de que benefactores coludidos con el narcotráfico han ayudado con dinero del más sucio y sanguinario negocio, en la construcción de algunas capillas, lo cual resulta inmoral y doblemente condenable y nada justifica que se pueda aceptar esta situación”.
Manuel Corral se encoge de hombros, arquea las cejas y comenta intrigado: “El caso de esa capilla sólo se hizo notorio por la placa que pusieron. Todo lo hicieron muy evidente. Me pregunto: ¿el caso hubiera quedado oculto de no haberse puesto esa placa? ¿Habrá más capillas en igual situación?”.
Lo cierto es que hasta el momento los narcodonativos a la Iglesia sólo se conocen por ese tipo de registros escritos.
Es el caso de la parroquia de Tamazula, Durango, en el llamado Triángulo Dorado: las bancas de madera del templo fueron donadas por los narcotraficantes locales o por sus familias, según las inscripciones puestas en los respaldos.
“Inés Calderón Q.”, dice la banca donada por el capo Inés Calderón Quintero, oriundo del lugar y miembro del cartel de Sinaloa. Fue uno de los primeros en introducir cocaína y heroína a Estados Unidos. Se le acusó de colaborar en el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena. Murió en un tiroteo en marzo de 1988.
“Familia Coronel Aispuro”, reza el letrero de la banca donada por esa familia a la que pertenece Emma Coronel, esposa de Joaquín El Chapo Guzmán y sobrina del narcotraficante Ignacio Coronel, muerto recientemente en Jalisco en un enfrentamiento con el Ejército.

“En memoria de mis padres Martín Ávila Beltrán y Griselda Amézquita; de Chuy Ávila”, dice la inscripción que, en otra banca, pusieron los familiares de Sandra Ávila Beltrán, La Reina del Pacífico, presa en Santa Martha Acatitla.

Y así, una a una, cada banca del templo de San Ignacio de Loyola, en Tamazula –edificado por los jesuitas en el siglo XVIII–, va dando cuenta de los narcotraficantes que la donaron.
Rodríguez Gómez ataja: “Sabemos de esos donativos. Los narcotraficantes van y colocan sus bancas en los templos y no hay quien los pare. Nos guste o no nos guste, ahí está su banca. No censuramos a nuestros párrocos por eso. Comprendemos lo difícil de su situación”.
Corral lo secunda: “Muchos sacerdotes son obligados a prestar servicios espirituales al crimen organizado. Uno de ellos me comentaba que, en una ocasión, lo obligaron a dar misa. Al regresar a su casa un enviado de los narcos tocó a su puerta y le dijo: ‘Padre, aquí le mandan esto en pago por sus servicios’. Era una camioneta último modelo. El párroco rechazó el regalo”.
Ambos refieren que Michoacán, Durango, Sinaloa y Guerrero son los estados más peligrosos para ejercer el ministerio. Varios sacerdotes ya han sido asesinados por el narcotráfico. Sólo la arquidiócesis de México –agregan– lleva ya siete ejecutados. Hasta algunos obispos padecen las amenazas del narco, tema del que este semanario ya se ocupó (Proceso 1713).

Por esos motivos, dicen, hay que evitar juicios precipitados y esperar las pesquisas de la PGR y saber en qué condiciones construyó la capilla El Lazca. Pudo haber presionado o pudo tener el apoyo voluntario de la arquidiócesis de Tulancingo, cuya jurisdicción abarca Pachuca.

Problema añejo
La estructura criminal de Los Zetas se ha extendido, por cierto, a los 84 municipios hidalguenses en un entorno de complicidades que incluiría al gobernador saliente, Miguel Ángel Osorio Chong, y al electo, Francisco Olvera, así como a las autoridades judiciales, policiacas y militares del estado (Proceso 1748).

Pero el tema de las narcolimosnas no es nuevo. Ya en los noventa se acusaba a los hermanos Arellano Félix de apoyar con fuertes donativos al entonces obispo de Tijuana, Emilio Berlié, quien a su vez gestionó una reunión privada entre esos narcotraficantes y el entonces nuncio apostólico en México, Jerónimo Prigione (Proceso 937).

En septiembre de 2005 Ramón Godínez –en ese tiempo obispo de Aguascalientes– afirmaba que esos jugosos donativos se “purifican” al llegar a la Iglesia. Y lo que importaba era la “buena intención” de los devotos delincuentes. “Dondequiera que se entreguen las limosnas del narcotráfico da igual, no nos toca a nosotros investigar el origen del dinero”, decía Godínez.
Ahora Rodríguez y Corral insisten en que las 60 mil capillas del país son el flanco más débil por el que se puede colar, o se está colando, el dinero del narcotráfico, ya que el aparato burocrático del episcopado no tiene control administrativo sobre ellas.
El secretario general de la CEM explica: “Las periferias de las ciudades están creciendo aceleradamente y sus pobladores, muchos de ellos migrantes de provincia, tienen necesidades espirituales, por lo que empiezan a reunirse aunque sea bajo un árbol. Buscan luego un terreno para construir su capilla. Después consiguen recursos para edificarla poco a poco.
“Ya construida, ellos mismos se encargan de su administración y mantenimiento. Llaman a algún sacerdote para que les oficie misa esporádicamente, pues no son de culto regular. Pero ahí ya se formó una comunidad católica.”
–¿El sacerdote sólo tiene injerencia en el culto?
–Por lo general así es. El sacerdote no puede llegar y decirle a los fieles: ‘A ver, muéstrenme la licencia de construcción de su capilla y díganme de dónde sacaron los tabiques’. No, porque además se lo prohíben los usos y costumbres de la comunidad, que deja esa responsabilidad a sus fiscales y mayordomos, quienes también se encargan de organizar fiestas patronales u otras ceremonias. Esa es la tradición de nuestro pueblo.
El jerarca refiere que, sin embargo, los fieles están obligados “legalmente” a pedir la autorización de su diócesis para construir una capilla, para que aquélla la registre en la lista de las que pertenecen a su jurisdicción.
“Esto en la práctica generalmente no se da. Incluso es muy común darnos cuenta de la existencia de una capilla cuando la vemos construida. Y ni modo que la mandemos tumbar”, dice.
Indica que las 9 mil parroquias del país, a diferencia de las capillas, están controladas administrativamente por sus diócesis, como lo estipula el derecho canónico. Aparte de cumplir con la normatividad pastoral y litúrgica, el párroco responsable debe presentar periódicamente su estado de ingresos y egresos, el número y monto de los donativos que recibe, de dónde provienen, en qué se gastan…
–¿Cómo saber cuando una capilla es construida o recibe donativos del narco? –se le pregunta.
–Eso solamente puede notarse en el proceso constructivo de cada capilla. Por lo general es un proceso muy lento porque los fieles las construyen con sus aportaciones y su esfuerzo diario. Pero ya resulta sospechoso cuando en una comunidad pobre se levanta aceleradamente una ostentosa capilla.
Ante esta falta de control, Corral señala que para impedir que los capos sigan construyéndolas, la única medida que tiene el episcopado es dar “formación” a los laicos para que sean “coherentes con su fe”.
Por eso, comenta, la jerarquía católica difunde comunicados, exhortaciones y cartas pastorales –como la más reciente: Que en Cristo nuestra paz México tenga vida digna– donde se alerta a los laicos sobre los peligros del narcotráfico.
El documento sentencia: “Lo primero que hay que hacer para superar la crisis de inseguridad y violencia es la renovación de los mexicanos. México será nuevo sólo si nosotros mismos nos renovamos… Por tanto, la primera e inaplazable tarea es la formación integral de la persona”.
Corral concluye: “Las capillas pertenecen a una compleja estructura no controlada y sin organización. Es muy difícil meterlas en la estructura parroquial. Y el episcopado es sobre todo una entidad moral, eso que quede muy claro”.