(Foto: Cuartoscuro/Especial)
El Centro de Estudios del Sector
Bancario aseguró que, por ley, ambas instituciones deben contar con la
información de quiénes fueron los beneficiarios de la supuesta compra de votos a
favor del PRI.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público y la Comisión Nacional
Bancaria y de Valores (CNBV) tienen la obligación de informar sobre el
origen de los recursos y los nombres de los beneficiarios de tarjetas de Monex y
Soriana para la presunta compra de votos a favor del PRI, destacó al
diario La Jornada Marcos Fuentes Franco, coordinador del Centro de Estudios
del Sector Bancario.
Asegura que ambas instancias deben contar con registros donde aparezcan
nombres y domicilio de los supuestos beneficiados.
Fuentes Franco explicó que de acuerdo con las políticas de supervisión de
procesos preventivos de lavado de dinero, a la CNBV le corresponde supervisar
los reportes de clientes y usuarios del sistema financiero, para lo cual cuenta
con una Unidad de Inteligencia Financiera que tiene la obligación por ley de
detectar operaciones y negocios sospechosos, “así como la identificación de
personas, actividades, origen y destino de los recursos potencialmente
ilícitos”.
Asegura que al ser Monex es la mayor operadora de cambio de moneda en el
país, con más oficinas en el mundo que cualquier banco, tendría que haber
reportado tanto a Hacienda como a la CNBV, cualquier tipo de operación inusual
y los nombres de quienes las realizaron, de lo contrario, habrían violado las
disposiciones legales sobre lavado de dinero.
Consideró que la CNBV “investigar de inmediato, porque así lo establece la
ley, lo que parece blanqueo de dinero, porque no hay información del origen y
destino de los recursos involucrados”.
Fuentes Franco precisó que la Secretaría de Hacienda debe contar de inmediato
con esta información, “porque, de lo contrario, las instituciones financieras
estarían actuando fuera de la ley”.
En el caso de Soriana, expuso que para la expedición de sus tarjetas solicita
a sus clientes los domicilios y de una identificación oficial, según informa en
su página web, pues estos plásticos son parte de un programa por medio del cual
se obtienen “puntos”, dinero electrónico u otro beneficio como resultado de las
compras realizadas en sus establecimientos.
(Con información de La Jornada)