Calderón y Duarte en la inauguración del libramiento Xalapa.
Foto: Rubén Espinosa
Foto: Rubén Espinosa
XALAPA, Ver. (apro).- Con la inauguración de obras inconclusas, el presidente Felipe Calderón continuó hoy su gira de despedida, aunque en el caso de esta entidad, prometió regresar el próximo domingo para cortar el listón del tramo carretero México-Tuxpan.
Acompañado del gobernador Javier Duarte de Ochoa, así como de funcionarios federales y estatales, el mandatarios aliente inauguró la segunda etapa del Libramiento de Xalapa denla que se invirtieron 13 mil millones de pesos, 5 mil de los cuales fueron aportados por la iniciativa privada.
Igual que las obras puestas en marcha en los últimos días, la nueva autopista no podrá ser utilizada todavía por los automovilistas que transitan del puerto de Veracruz y de la capital del estado a la Ciudad de México porque faltan detalles y los cimientos no han fraguado en su totalidad, según confesó la alcaldesa de Xalapa, Elizabeth Morales, con base en dictámenes de la Asociación de Constructores de Veracruz y otras cámaras empresariales.
Antes, en el puerto de Veracruz, el Ejecutivo federal inauguró con un retraso e dos años el hospital de alta especialidad del ISSSTE en el que se invirtieron recursos federales por más de mil millones de pesos.
Lo que las autoridades no dijeron es que dicho hospital operará a medias porque faltan equipo y médicos y enfermeras.
Ya por la tarde, Calderón Hinojosa presidió la ceremonia de clausura del curso de adiestramiento básico naval de los cadetes de primer año de la Secretaría de Marina-Armada de México, en donde se despidió de los “leales marinos”.
Ahí, Calderón volvió a insistir en que la guerra contra el crimen organizado, era necesaria por los momentos complejos que vivía la Nación.
“Frente al crimen y amenaza de los grupos delincuenciales se actuó en legítima defensa. Nos tocó vivir tiempos adversos y tormentas, pero pudimos salir adelante, hoy tenemos mejores instituciones sólidas y mucho más preparados para hacerles frente”, expresó Calderón Hinojosa.
“Sí algo aprendí de los marinos, es que el capitán es responsable del timón, pero también de la embarcación y de los que van a bordo, y aunque el capitán no es dueño ni controla los fenómenos naturales, pudimos salir adelante, y no tanto por la destreza y talento del capitán, sino la lealtad y el patriotismo de sus tripulantes, como lo son los miembros de la Armada de México”, expresó.
Durante la ceremonia de clausura de cursos de Adiestramiento Básico Naval de los cadetes de primer año en la Heroica Escuela Naval en Alvarado, Calderón destacó que frente al crimen organizado “el Estado mexicano actuó en defensa propia…y el Estado mexicano golpeó como nunca a los grupos criminales”.
Afirmó que a esta administración le “tocó navegar en mares de tormenta y de frente a los arrecifes…nos tocó navegar donde otras naciones llegaron al desastre”, en clara alusión a lo ocurrido después de la crisis financiera internacional iniciada en Wall Street en 2008 que afectó a todo el planeta.
Respaldado en todo momento por el gobernador priista, Javier Duarte, Calderón Hinojosa apareció relajado, como si estuviera de gira turística. Él mismo confesó que Veracruz “le sienta bien”, incluso prometió regresar, “aunque ya no sea su presidente”.
En la inauguración del hospital del ISSSTE, incluso hizo apologías de justicia social y la necesidad de una equidad en los distintos polos de las clases sociales: “Un elemento de justicia es igualar las oportunidades, que sea igual para el hijo de un pobre que para el hijo de un rico acudir a un hospital.”
Ya en su mensaje, precisó que la inversión en remodelación de varios hospitales del ISSSTE se debió a la reforma a este instituto, lo que permitió salvar una dependencia que estaba al borde de la quiebra.
“Se dice fácil –acotó Calderón-, pero el ISSSTE estaba prácticamente quebrado y la reforma permitió sanear en largo plazo sus finanzas, dar viabilidad financiera, crear un sistema de pensiones que, a la vez, les permitiera una pensión digna a los asegurados y no quebrara al Instituto, como era la tendencia”, señaló.
En la correspondencia de adulaciones, el gobernador priista Javier Duarte de Ochoa aseguró que el sexenio de Calderón, que está por fenecer, es un parteaguas en la historia y el desarrollo de Veracruz.
Durante la supervisión-inauguración del Libramiento de Xalapa, el gobernador dijo que esta nueva autopista de “altas especificaciones” es un logro de cinco siglos de esfuerzos.
“El Libramiento de Xalapa es el más reciente logro de cinco siglos de esfuerzos por comunicar mejor a la Ciudad de México con el puerto de Veracruz. Este es un nuevo trazo para la ruta de casi 500 años que ha sido fuente de desarrollo económico y social”, presumió.
En ese momento, Duarte de Ochoa agradeció al Calderón el apoyo para “escribir un nuevo capítulo para Veracruz” y así ayudar a beneficiar y a cambiar el destino de casi 8 millones de veracruzanos.
Aunque Calderón Hinojosa tenía planeado comer en la escuela naval de Antón Lizardo, acompañado de las fuerzas armadas y de integrantes de su gabinete, por motivos de agenda no explicados, se retiró minutos después de concluido el evento protocolario.