DF, diciembre de
2014
Al pueblo de México:
A los organismos defensores de los derechos humanos:
A las organizaciones populares, democráticas e
independientes:
A los organismos defensores de los derechos humanos:
Acciones políticas:
· Oaxaca, Chiapas, Michoacán, Hidalgo, Veracruz, Puebla
· Marcha metro Polanco a la oficina del Alto Comisionado de DH de la ONU
(Alejandro Dumas, No 165 Col. Polanco. Del. Miguel Hidalgo)
La situación política y económica por la que atraviesa nuestro país ha
conducido a un clima de terror para el pueblo mexicano. Por un lado se
encuentra la sistematicidad con la se aplica una política de terrorismo de
Estado dejando a su paso una estela de impunidad para los autores materiales e
intelectuales de los más aberrantes crímenes de lesa humanidad y por el otro,
un baño de sangre en el cual pretenden ahogar toda voz de protesta del pueblo
organizado y no organizado.
Desde administraciones pasadas se ha desatado una guerra contra el
pueblo bajo el pretexto de combate a la delincuencia organizada y el
narcotráfico; guerra que ha enlutado a más de 150 mil familias producto de las
ejecuciones extrajudiciales; más de 85 mil detenidos desaparecidos y miles de
desplazados de manera forzada.
Desde 2007 la práctica de la desaparición forzada toma nuevos bríos con
la detención desaparición de los luchadores sociales Gabriel Alberto Cruz
Sánchez y Edmundo Reyes Amaya el 25 de mayo en la ciudad de Oaxaca. Desde esa
fecha se ha desarrollado diversas actividades jurídico-políticas para saber
sobre su paradero, dentro de las cuales se encuentra la recomendación que la
CNDH hace al gobierno del estado de Oaxaca, sin que hasta el momento haya sido
acatada cabalmente.
En esta misma condición inhumana se encuentran las hermanas triquis
Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, también detenidas y desaparecidas en el
estado de Oaxaca; el defensor de derechos humanos Teodulfo Torres Soriano,
testigo presencial de la agresión policiaca el 1 de diciembre del 2012 en la
cual postrara en estado de coma y finalmente la muerte del maestro Kuy Kendal;
el indígena chatino Lauro Juárez y muchos otros casos denunciados o mantenidos
en el anonimato por temor, amenazas o el hostigamiento.
Todos estos casos tienen el común denominador de haber contado con la
participación de elementos policiacos, militares y paramilitares en su
cometido, a la vez que por parte de las autoridades permanece la negativa de
dar respuesta sólida y presentar con vida a todos y cada uno de los detenidos
desaparecidos por el régimen.
En estos momentos la participación del derecho internacional y de los
pactos y tratados que el Estado mexicano ha firmado y ratificado, son
fundamentales para garantizar el respeto irrestricto de los derechos humanos al
pueblo trabajador. Son miles de voces que claman que termine la larga noche de
terror que comenzó con el calderonismo y que continúa con Peña Nieto.
La lucha de familiares, organizaciones populares solidarias y el
acompañamiento jurídico por la presentación con vida de Gabriel Alberto y
Edmundo, luchado-res sociales reivindicados por el PDPR-EPR han forzado al
Estado mexicano a reconocer que en efecto sobre sus personas se cometió el
crimen de desaparición forzada y recientemente un juez del poder judicial de la
federación emitió una resolución judicial donde exhorta se cite a comparecer a
autoridades federales para dar con su paradero.
Entre estas diligencias el poder judicial de la federación ordena a
diversas autoridades:
·
Se trasladen a los lugares de
posible detención u ocultamiento, en especial, REALICEN la búsqueda DE EDMUNDO REYES AMAYA Y GABRIEL ALBERTO CRUZ SÁNCHEZ en las principales instalaciones militares;
·
TOMEN comparecencia a los funcionarios de la Procuraduría General de la República, a
funcionarios estatales o mandos militares, que hubiesen estado
en funciones en mayo de 2007, A FIN DE QUE DECLAREN EN RELACIÓN A
LOS HECHOS;
·
INFORMEN SOBRE LA INHUMACIÓN de cadáveres en los centros de detención o zonas militares que pudieran
coincidir con la de las víctimas para en su caso realizar diligencias de
identificación forense.
Esta resolución se suma a las estrategias jurídico-políticas en la
exigencia de presentación con vida; sienta a la vez un precedente para los
miles de casos, sin embargo, esta sentencia judicial por sí sola no es
suficiente, re-quiere del concurso de las distintas acciones políticas para
lograr la concreción clara de ver a los detenidos desaparecidos de vuelta a sus
hogares y con sus familias.
En este contexto, conmociona a todos los que hemos exigido mediante
acciones políticas de masas la presentación con vida, la noticia de que con
base en pruebas científicas se confirma la muerte del normalista Alexander, pero
que de ninguna manera borra el dolor de sus familiares. Cierra de alguna manera
el duelo y el peregrinar doloroso de su familia en su búsqueda, no obstante,
eso no significa que con saber la suerte de este compañero normalista se haya
hecho justicia, mucho menos reduce el crimen de lesa humanidad cometido contra
los que aún se encuentran en calidad de detenidos desaparecidos.
Cierto como pueblo, organizaciones populares y familiares se exigían
pruebas contundentes y con sustento científico, sin embargo, lo que aún no
encuentra espacio en el ideario del pueblo es la manera en que se pudo calcinar
a tal grado los cuerpos y que más bien, lo que se ha presentado como una
conclusión científica, en voz del procurador, parece intentar alimentar la
tesis que él mismo esgrimiera y la línea de investigación que conduce a un
grupo de delincuentes comunes. Jesús Murillo Karam y Enrique Peña Nieto han
difundido sin descanso, que fueron quemados e incinerados los normalistas, para
que una vez más, el Estado mexicano intente eludir su responsabilidad con el
argumento engañoso, pueril y demagógico del narcoestado.
Como organizaciones populares, colectivos estudiantiles y organizaciones
de derechos humanos nos exige mantenernos en la coordinación y no permitir que
una agresión contra nuestros hermanos de clase quede en la impunidad. A
establecer los mecanismos necesarios para responder organizadamente ante la
represión y el terrorismo de Estado.
Fraternalmente
¡Vivos se los
llevaron! ¡Vivos los queremos!
¡Presos políticos! ¡Libertad!
¡Alto al terrorismo
de Estado!
¡Alto a la
criminalización de la pobreza y protesta popular!
Frente Nacional de
Lucha por el Socialismo (FNLS)
Movimiento de
Unificación y Lucha Triqui (MULT)
Asamblea de los
Pueblos Indígenas (API)
Organización de
Lucha por la Emancipación Popular (OLEP)
Comité de
familiares de presos de Ameyalco
Comité de
familiares de detenidos desaparecidos “Hasta Encontrarlos”
Comité Cerezo
México. Radio Estudiantil
Libertaria
Red Nacional de
Defensa de los Derechos Humanos (RENDDH