Otra tragedia más ha golpeado al periodismo veracruzano. El pasado 02 de enero del 2015, una llamada a la redacción de AGN Veracruz, realizada por parte de Jorge Sánchez Ordóñez hijo del periodista del municipio de Medellín de Bravo, Moisés Sánchez Cerezo propietario del periódico La Unión “La Voz de Medellín”; quien desesperado alertaba que su padre había sido sustraído de su vivienda ubicada en la calle Violetas número 4 en la colonia Gutiérrez Rosas en la localidad del Tejar. Indicó que alrededor de las 19:30 horas, un comando armado que se movían en varios carros, sustrajo a su padre y con lujo de violencia lo subió a uno de los vehículos para perderse en el municipio.
A seis días de la desaparición del periodista medillense, el gobierno del estado de Veracruz ha dado tumbos con relación al caso. En primera instancia, el gobernador, Javier Duarte de Ochoa, tardíamente se refirió al tema ante los medios de comunicación local. En un tono de burla y desdeñando su actividad, intentó minimizar la sustracción del comunicador refiriéndose a él como “chófer de un taxi y activista vecinal”, todo esto con la firme intención que dicho caso no fuera atraído por parte de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos en contra de la Libertad de Expresión (FEADLE), perteneciente a la Subprocuraduría de Derechos Humanos, Prevención del Delito y Servicios a la Comunidad de la Procuraduría General de la República (PGR). Cómo si Moisés Sánchez por el hecho de ser taxista no valiera lo mismo que un periodista. Al fin y al cabo, sea cual sea la actividad de éste, se trata de un ser humano.
Fue hasta el tercer día –bastante tardío por cierto- que el ejecutivo estatal decidió reunirse con la familia del colega periodista, donde reconoció su actividad pero como es su costumbre, ordenó circular a través de las redes sociales y los correos electrónicos controlados por el estado, una fotografía donde se encontraba junto la esposa e hijos con la intención de crear la idea de haberlos “planchado”, como lo ha hecho en otras ocasiones con otras familias que viven casos similares.
Cómo parte del plan nefasto y vislumbrando la posibilidad de destruir a la parte del Partido Acción Nacional que no ha podido comprar, ahora el gobierno del estado, rompiendo la “negociación” por debajo de la mesa que habían mantenido con Omar Cruz Reyes –acuerdos que le garantizaron su llegada a la alcaldía- se han dedicado a destruirlo literalmente. Se sabe que la finalidad del ejecutivo estatal es llegar al fondo en el caso Moisés con relación a los autores intelectuales y materiales, pero no porque le importe el periodista, sino porque mata muchos pájaros de un solo tiro con dicho acto:
1. Se quitó de encima a un periodista incómodo –obvio no dudamos que hasta se lo aconsejó al actual alcalde y este obedeció tontamente-.
2. Logran quitarse de encima a Omar Cruz Reyes, quien demostraba sentirse intocable y con una actitud de “virreinato” realizaba una serie de acciones en contra de los pobladores, hizo negocios al por mayor y se estaba convirtiendo en un “costal sin llenadera” para el estado.
3. Intenta destruir a su acérrimo enemigo, Miguel Ángel Yunes Linares y la parte del PAN que no ha podido “adquirir”.
4. Tendrá la posibilidad de controlar el municipio de Medellín de Bravo a sus anchas, por medio de su “policía acreditable” y ahora los negocios hacerlos por propia cuenta.
5. Envía un mensaje a los periodistas incómodos para que dejen de criticar su mal gobierno.
Regresando al desarrollo de este lamentable hecho amable lector, y para infortunio del gobernador, al otro día de su supuesta “reunión” con la familia de Moisés Sánchez Cerezo; periodistas y reporteros de diversos medios de comunicación, estudiantes de la carrera de Comunicación de la UV y maestros, acompañaron a los hermanos del comunicador y a su hijo en la manifestación realizada en los bajos del ayuntamiento de Medellín de Bravo, donde exigió la destitución inmediata de Omar Cruz Reyes. Es decir, sin fuero que lo proteja, este podrá enfrentar la acusación directa de la familia donde lo hacen el principal sospechoso del “levantón” que sufriera la noche del 2 de enero el comunicador.
Ahí mismo, Jorge Sánchez Ordóñez dijo a la prensa que lo acompañó, que en la reunión con el gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa que sostuvieron la noche anterior, fue realmente nula, pues este repitió el discurso “oficial” de siempre: “El crimen no quedará impune” “Agotaré las últimas instancias para castigar a los culpables” y lo más crítico de su “verborrea” fue decirles: “Prometo que no descansaré hasta devolvérselos vivo”.
“La verdad la reunión no tuvo sentido (…) No nos dijo algo realmente importante, pues nosotros esperábamos que nos comentara sobre los avances de las investigaciones para encontrar a mi papá con vida (…) Desafortunadamente repitió lo que siempre dice cuando se dan estos casos” dijo en entrevista el primogénito de Moisés Sánchez Cerezo.
El 06 de enero, un día antes de la visita de Enrique Peña Nieto a Veracruz, se alertó sobre el hallazgo de un cuerpo en el municipio de Soledad de Doblado. Se dice que militares arribaron a la zona y violando las garantías individuales de esa persona, sin esperar al Ministerio Público, lo subieron a uno de sus vehículos para posteriormente llevarlo a la ciudad de Xalapa. Con la finalidad de que este hecho no perjudicara la “burbuja” construida por parte del gobierno de Javier Duarte de Ochoa entorno a la visita del ejecutivo federal. La Procuraduría General de Justicia en el estado a cargo de Luis Ángel Bravo Contreras, negó categóricamente a la prensa local la existencia del cuerpo encontrado en Soledad de Doblado [así lo externó su enlace de prensa, Omar Zúñiga a AGN Veracruz].
El 7 de enero del año en curso, el presidente de la República realizó tan anhelada visita del gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa. Tanto el municipio de Boca del Río y como el puerto fueron literalmente sitiados pues en ellos sería donde se realizaría la gira del trabajo del ejecutivo federal. El WTC fue sede del acto conmemorativo del Centenario de la Promulgación de la Ley Agraria del 06 de enero de 1915 y en ese escenario, en el exterior, los familiares de Moisés Sánchez realizaron una protesta con cartulinas donde exigían ser atendidos por parte del ejecutivo federal y ahí exponerle la situación en torno al secuestro del comunicador. Es importante advertir que a dicho acto, arribaron integrantes de la organización Artículo 19 para dar seguimiento del caso.
En el desarrollo de la protesta sucedieron actos pueriles por parte del estado de Veracruz a cargo del “flamante” subsecretario de Gobierno, Marlon Ramírez Marín y del Estado Mayor Presidencial. Con la intención de quitarlos y no “manchar” su “honorabilidad”, intentaron de todo tipo de estrategias por demás denigrantes para moverlos del lugar.
- Primero intentaron condicionar a la “comisión” que ingresaría para hablar supuestamente con el presidente de la República.
- Luego intentaron –con una docilidad que ni ellos se creían- llevárselos a todos al interior del WTC, pero la familia se negó porque argumentaron que su intención era quitarlos de la vialidad y dejaran de manifestarse.
- El Estado Mayor y Marlon Ramírez Marín aceptaron que entrarían dos miembros de la familia, pero el hijo del periodista ahora les condicionó que ahora entraría con un abogado de Artículo 19 -que arribó a Veracruz para atender el caso- a lo que inmediatamente se negaron.
- Posteriormente tuvieron que aceptar el ingreso del abogado de Article 19, quien entró junto con Jorge Sánchez y la señora, María Josefina Ordóñez, esposa del periodista desaparecido, pero adentro, le impidieron presenciar la reunión con Miguel Ángel Osorio Chong.
Mientras que adentro los familiares esperaban a ser atendidos por el “presidente”, afuera los dos hermanos del comunicador continuaban en la protesta. Sorpresivamente, los elementos de Seguridad Pública de Arturo Bermúdez Zurita comenzaron a instalar vallas y al darse cuenta los manifestantes que habían sido encapsulados, las empujaron y salieron a la vía pública para continuar con su protesta. Los policías con la intención de justificar la aprehensión en contra de los dos hermanos, retuvieron a uno de ellos entre cuatro policías para intentar someterlo. Tanto estudiantes como periodistas impidieron la acción originando el enojo de los subordinados de Marlon Ramírez Marín y el Estado Mayor, quienes en forma desafiante iniciaron a fotografiar a los periodistas para intimidarlos.
Con esta acción amable lector, se puede constatar que en ningún momento el gobierno estatal le pretende garantizar absolutamente nada a la familia del reportero desaparecido. Los argumentos del señor gobernador de avalar que el comunicador le será devuelto a su familia, indudablemente vuelve a convertirse en una “perorata” y falta de ética de parte del empleado de los veracruzanos.
La madre e hijo de Moisés Sánchez a la salida de la supuesta reunión con que tendría con Peña Nieto –la cual no se llevó a cabo pues Osorio Chong quien los atendió y realmente tampoco les dijo nada relevante y sólo turnó el caso al estado- lograron también obtener la entrevista con el procurador General de Justicia, Luis Ángel Bravo Contreras, quien les dijo que el cuerpo encontrado en Soledad de Doblado –acto que aceptó que si encontraron- no correspondía a Moisés Sánchez, dándoles una esperanza a la familia de encontrar vivo a su ser querido.
Posteriormente en la noche, a las 21:00 horas, Bravo Contreras anunció una rueda de prensa en la ciudad de Xalapa, en ella no hizo más que contradecirse y ahora alertar ante los diversos medios de comunicación que el cuerpo localizado en el municipio choleño aún no podían precisar que se tratara del periodista desaparecido el 2 de enero del año en curso en Medellín de Bravo, pero tampoco descartarlo. Dijo que el cuerpo se encontraba en un estado que ni la propia familia podría identificarlo. Posteriormente de ello, el procurador les arroja el dato – más “charada” que otra cosa- de los 11 policías ya consignados con la finalidad de aventarles “algo” a la prensa y justificar su traslado a esa hora de la noche a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia.
Visita a la familia en el Tejar
Posterior a la manifestación en el WTC visité el hogar de Moisés Sánchez. Pude advertir la sencillez de su casa, la cual pese a tener una serie de limitaciones económicas, pude detectar la unión de su familia. Sin las comodidades básicas, sencillo, pero con las ganas de contribuir a la sociedad, este hombre luchaba ampliamente por el bienestar de su comunidad. Ruleteaba un taxi con dos intenciones: una llevar el sustento a su familia y dos, esto le permitía platicar con los pobladores, verificar las carencias de su comunidad y tener elementos informativos para poder exponer en su publicación. Una verdadera tribuna que propició la ira de un “enano” político, que en vez de trabajar decidió actuar en contra de la integridad del periodista.
En las afueras de la casa del comunicador, está una patrulla de la Policía Estatal, conformada por dos elementos. Son ellos los responsables del resguardo e integridad de la familia. Curiosamente en el tiempo que estuve ahí en la vivienda de Moisés Sánchez, pude percatarme que los elementos policíacos se encontraban más preocupados por consumir vivazmente todo lo que le ofertan los vendedores ambulantes -que pasan continuamente por la calle Violetas- que realmente hacer su trabajo de vigilar la vivienda.
Alrededor de las 19:00 horas, arribó a la casa de Moisés Sánchez Cerezo una mujer y un hombre, ella se identificó como Miriam Valdez –el tipo se quedó parado impávido viendo para un lado y para otro sin decir su nombre- y dijo pertenecer a la Policía Federal de la dirección de Investigación, la cual pertenece directamente a la Secretaría de Gobernación a cargo de Miguel Ángel Osorio Chong y mostró su credencial oficial.
Argumentó que la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos en contra de la Libertad de Expresión (FEADLE) fue quien le solicitó su colaboración para recabar la información pertinente y empezar la búsqueda del colega periodista. Acto que me llenó de asombro porque le cuestioné que si entonces nadie lo estaba buscando y la mujer me sostuvo que apenas estaban recabando información con los vecinos. En conclusión amable lector, podemos advertir entonces que nadie en este preciso momento está buscando a Moisés Sánchez Cerezo, porque el gobierno del estado está más preocupado por desbaratar el gobierno de Omar Cruz Reyes que buscar al periodista desaparecido. Hasta el momento, Bravo Contreras no ha otorgado elementos que nos hagan al menos pensar que están centrados en la búsqueda. Y si el estado y la federación no lo buscan –mucho menos Omar- entonces que me digan ¿Quién realmente lo está haciendo?
También en el periódico local Notiver, se comentó en una de sus columnas, que sería el día hoy –en el transcurso del día- cuando el titular de la PGJV nuevamente convocará a los medios de comunicación para aceptar que el cuerpo localizado en el municipio de Soledad de Doblado, corresponde a Moisés Sánchez Cerezo. Indignante y falta de ética en el caso que dicho medio haya tenido conocimiento realmente de las nefastas intenciones del gobierno. El sólo “aguantar” la información para no echar a perder la visita de Peña Nieto, en verdad es patético y nefasto.
Le dejaré en este momento amable lector lo que la Miriam Valdez de manera literal le dijo a la familia y usted haga sus propias conclusiones:
Versión textual de su interlocución, aclarando el punto, debido a que la mujer no fue muy precisa ni clara en sus argumentaciones:
“Pues nosotros con todo esto que se da de personas desaparecidas, por esta situación y por mandato presidencial quien ordena coadyuvar con la búsqueda de las personas, nosotros nos enfocamos a la búsqueda y la localización (…) Si hay algún delito detrás, eso lo corresponde a la Fiscalía (Feadle) y a la autoridad ya sea local y si se trata de un delito federal también se atrae por parte del Ministerio Público Federal quien es la que hace la asignación a las agencias para el esclarecimiento del delito. La desaparición no está tipificada aun, sin embargo nosotros colaboramos con la búsqueda (...) En primera instancia a nosotros nos mandan un mandamiento ministerial por parte de la Procuraduría de Derechos Humanos y Servicios a la Comunidad que está en la calle López en la colonia Centro (...) Bueno nos envían a nosotros para entrevistarlos, sobre todo a la señora -esposa de Moisés Sánchez- que estuvo presente en el momento de los hechos (...) También para entrevistar a su hijo y advertir si existen cámaras, pero ya nos dimos cuenta que no (...) Nosotros estuvimos durante el día de hoy preguntando a los vecinos, los cuales están temerosos y es comprensible, pero si hacen mención que el hoy desaparecido es una persona responsable, no hablaron mal de él, que mostraba interés por el bienestar de la comunidad, que vivía de manera tranquila y que tenía una buena calidad de vida (...) Los vecinos dicen que no es justo lo que le hicieron, pero sin embargo, no dan ningún otro dato que coadyuve para su investigación. Nosotros trabajamos en colaboración de las distintas áreas de la Policía Federal, la responsabilidad de nosotros es recabar todos los datos en campo y esos datos los enviamos a las diferentes áreas, trabajamos de manera estrecha con el área de gabinete de análisis táctico (…) No se haya algún teléfono celular o algún teléfono fijo donde haya recibido amenazas o que les hayan alertado de alguna situación que ustedes consideren importantes, nosotros con ese número telefónico hacemos un informe y se la proporcionamos a la área correspondiente y ellos hacen el análisis táctico que corresponde (...) Por ejemplo en esta cuestión de correos electrónicos, redes sociales, en fin, se hace el informe y se envía al área de cibernética (...) También trabajamos muy de la mano con el área científica para lo que son las muestras de ADN, en el caso de que se encuentre un cuerpo sin vida (...) Se trabaja de manera multidisciplinaria, de la mano con Derechos Humanos (...) Bueno nosotros lo que hacemos es coadyuvar y apoyar solamente en la búsqueda de las personas (...) Hasta ahí es nuestra competencia (…) También hacemos investigación con la familia que acepta que su familiar colaboraba con un grupo delictivo, te proporcionan los datos y todo eso nos ayuda para trabajar. Nosotros también nos enfocamos a buscar personas con vida (...) Sin embargo tampoco nos cerramos a otras opciones como el de detectar la parte de la delincuencia y no le damos negación a toda las partes (…) En este momento estamos aquí para que ustedes nos puedan compartir como fueron los hechos, si hay algún otro dato, nosotros no somos Ministerios Públicos, es decir, nosotros no tomamos ninguna declaración, es decir, nosotros no le vamos a decir, aquí fírmenle y luego los van a llamar (...) Nada, lo que nosotros hacemos es recabar información para que se genere la búsqueda (…) Nosotros al expediente de la Ministerial no tenemos acceso, porque no tenemos ningún mandamiento de colaboración (...) Quien nos hace el mandamiento de colaboración es de parte de la Feadle (...) Como auxiliares del Ministerio Público nosotros pretendemos a la Secretaría de Gobernación y a la Policía Federal, es decir, somos auxiliares del MP (...) No somos del estado, venimos de la Ciudad de México, de la División de las Policía Ministerial".
En resumen. Sólo andan haciéndole al loco, como siempre.