El estado de Veracruz se ha convertido en un territorio donde la delincuencia organizada y la impunidad predominan ante las autoridades y con el consentimiento del gobernador Javier Duarte de Ochoa.
Uno de los casos más polémicos de su administración fue la muerte de Gibrán Martiz, un joven cantante del programa televisivo ‘La Voz México’, quien fue desaparecido de manera forzada por policías estatales en la ciudad de Xalapa, Veracruz, el 7 de enero de 2014.
En entrevista telefónica para el medio local e-consulta, el padre de Gibrán, Efraín Martiz Aguirre, señala que la muerte de su hijo merece justicia: “Yo soy el ejemplo de un padre común al que le mataron un hijo, y no iba a permitir que eso quede impune. Y si me tengo que tardar diez o doce años, o el tiempo que se pueda hacerlo, hasta comprobarlo, hasta tener justicia, lo voy a hacer”.
Hasta la fecha las investigaciones siguen siendo turbias e ineficientes por el entonces procurador de justicia del estado, Amadeo Flores Espinoza, y continuada por el ahora Fiscal General, Luis ángel Bravo Contreras.
En los hechos están involucrados siete policías de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP). De acuerdo con el medio, salieron bajo fianza de 5 mil pesos en diciembre del año pasado por no tener otros agravios en su contra.
Recomendaciones de la CNDH
Después de un año y cinco meses de los hechos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), emitió una serie de recomendaciones en contra del gobernador Javier Duarte por los delitos de detención arbitraria, indebida procuración de justicia y desaparición forzada -este último un delito de lesa humanidad característico de dictaduras y países en guerra- en agravio de Gibrán Martiz y dos jóvenes más.
“En dicha resolución se exige al fiscal perseguir el delito de desaparición forzada, pues el código penal de Veracruz, ya lo contempla tras la reforma el 18 de julio de 2014 en su artículo adicional, el 318 Bis”
El organismo concluye que las diligencias practicadas no han sido suficientes para esclarecer debidamente los hechos y la responsabilidad penal que corresponda, generando con ello que los hechos continúen impunes.
Para el señor Martiz Aguirre, es un “primer paso” en la lucha por alcanzar la justicia de su hijo. Además declaró ante el medio referido que se preparará para iniciar incluso un proceso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) para llevar el caso de su hijo.
“Yo tuve que salir del país por mi seguridad y la de mi familia, pero ya tengo gente que me está ayudando a presentar mi reclamo ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, por lo que ha hecho esta gente, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, y su secretario de SSP, Arturo Bermúdez Zurita”.
Veracruz, sin estado de derecho
Para el padre de Gibrán en Veracruz “hay un estado de no derecho, inseguro, un estado que con el gobernador Duarte, estamos totalmente a merced de su propia gente, además de los cárteles que hay”.
Martiz Aguirre expresa que estas recomendaciones indican que “hay caminos para obtener justicia” y hace una invitación a los padres de otros familiares desaparecidos.
“Yo le digo que se acerquen a la Comisión Federal de Atención a Víctimas, ellos me ayudaron, y como hay una oficina en Veracruz es una piedra en el zapato, hasta para la CEDH porque les está mostrando los errores que ellos cometen, y dándoselo a ver al mismo gobierno. Y definitivamente hay que pegarse mucho a la CNDH, y ellos no le van a cobrar, es estar dando información, si uno se acerca con ellos, ellos te ayudan”.
Por último, en la entrevista Efraín Martiz advierte que emprender una lucha por la justicia en un caso de desaparición no es algo sencillo, “es una situación difícil, es difícil vivirla, porque cuando uno va descubriendo cosas, uno vive con temor porque uno se da cuenta que en cualquier momento, nos pueden desaparecer”.
“Cuando uno pierde un hijo, uno no mide consecuencias, uno ve y trata de hacer las cosas lo mejor posible, trata de hacer las cosas que nos lleven a ellos o nos aclaren que fue lo que pasó”, concluye.