Indispuesta, debió leer sentada su ponencia en acto con México SOS
Karina Avilés y Armando Cruz Sánchez
Reportera y corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 3 de abril de 2012, p. 7
En su cuarto día de campaña, visiblemente pálida y mareada, lo que le impidió leer de pie su discurso al recibir la Agenda México 12-18 Seguridad y Justicia, la candidata del PAN a la Presidencia de la República, Josefina Vázquez Mota, se vio obligada a declarar al final del encuentro: “Me siento perfecta, muy fuerte; me siento bien”.
Aunque la réplica más fuerte del sismo se había registrado una hora antes, la abanderada del blanquiazul trató de excusarse señalando que alguien le dijo que “estaba temblando”, pero luego atribuyó su malestar a una fuerte gripa y al intenso calor de la Huasteca hidalguense, adonde previamente había tenido una gira. Más tarde, en una entrevista radiofónica, dijo que fue una “baja de presión”.
Una vez que regresó del atril y ocupó una silla, continuó con la lectura de las hojas que llevaba preparadas, aunque le llevó buena parte de su intervención recuperar el temple y la fluidez de la palabra. Sostuvo que es el momento de pasar a una “segunda fase” en el combate al crimen organizado, al cual “no daremos tregua, ni rendición”, pero “haremos cosas diferentes”. Los resultados, añadió, se medirán no sólo por los criminales capturados, sino por cuán estables y seguras están las comunidades.
En el hotel Marriott de Polanco, donde antes acudieron los candidatos de la coalición Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador; del PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto, y el aspirante del Partido Nueva Alianza (Panal), Gabriel Quadri, Vázquez Mota reiteró que sacará al Ejército de las calles, “siempre y cuando tengamos policías locales que puedan dar seguridad a las familias”.
Gripa... sismo... baja de presión
El malestar de la ex secretaria de Educación Pública se hizo evidente desde el primer minuto. Junto al presidente de México SOS, Alejandro Martí, Vázquez Mota optó por permanecer sentada, mientras dio unas palabras introductorias en las que se comprometió, de inmediato, no sólo a recoger la propuesta de las organizaciones que presentaron el documento, sino a convertirla en política pública, e incluso los invitó a diseñar una agenda legislativa.
Sin embargo, debió hacer pausas, tomar aire y comenzó a temblar, por lo que le ofrecieron agua, pero la rechazó. Para dar lectura a su discurso se dirigió al atril, pero al estar ahí, de pie, no pudo continuar y fue apoyada para regresar a la silla, por lo que Alejandro Martí se paró para ayudarla. Enseguida, le llevaron un vaso con refresco de cola, pero la aspirante presidencial insistió en rechazarlo: “No, no, gracias, estamos muy bien, estamos muy bien”.
Acompañada por su coordinador de campaña, Roberto Gil, y el ex aspirante a la candidatura presidencial de su partido Santiago Creel, la panista se comprometió a impulsar una ley de víctimas del delito y reiteró su convicción por una reforma laboral, pues “si no se recompone el mercado interno, difícilmente tendremos un mejor tejido social”. Insistió en que hará un gobierno de coalición, eliminará el fuero para todos los políticos, porque si no hay consecuencias cuando se coluden con el crimen organizado “la impunidad y la corrupción seguirán adelante”.
Planteó la existencia de más penales de alta seguridad, recuperar el control territorial de estos centros penitenciarios y tener penas menores para delitos menores. Cuando se le preguntó si ratificaría en el cargo al secretario de Seguridad Pública Federal, Genaro García Luna, reiteró que en su momento dará a conocer a su gabinete, aunque valoró el trabajo de este funcionario, señalado como responsable del montaje de la detención de Florence Cassez.
Por la mañana, en Huejutla, Hidalgo, Vázquez Mota encabezó un mitin que se inició con un retraso de hora y media porque la Plaza Revolución no se llenaba.
En su discurso, la abanderada panista expresó su repudio ante la violencia y dijo no querer el regreso del pasado, en alusión a su contrincante del PRI, Enrique Peña Nieto.
Acompañada por la candidata del blanquiazul a senadora Xóchitl Gálvez –autora de la frase “mi gallo es gallina y se llama Josefina”–, Vázquez Mota expresó: “Quiero paz, no quiero violencia; tampoco quiero el regreso del pasado. Ni un paso atrás en las libertades ganadas”.
Con el sol a plomo, la concentración transcurrió aprisa entre porras y ofertas de campaña para consumo local, como construir un hospital materno-infantil, la edificación de una presa en San Felipe Orizatlán y una universidad intercultural para los indígenas de esta región.