5 de julio de 2012

ROCIO ZAVALETA ¿LÍDER O DELINCUENTE ANTORCHISTA?...

LA LIDER ANTORCHISTA, SOLO HIZO EL RIDICULO....
ROCIO ZAVALETA
El día domingo 1 de julio estuvo muy activa la líder Rocío Zavaleta (regidora del ayuntamiento de Córdoba, Veracruz y líder del movimiento Antorchista) en las 16 casillas ubicadas en la localidad del pueblito, estas corresponden a la sección 1086 del distrito 16 con cabecera en Córdoba, Veracruz. Con unas 50 personas militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) todo el día, lo que corresponde la jornada electoral, estuvo activa con sus correligionarios con el objetivo de lograr el triunfo del Partido que milita. Desde las 8 de la mañana de la jornada electoral, se presentaron algunas personas vestidas de negro con la actitud intimidatoria, que según algunos vecinos de la localidad formaban parte de la delincuencia organizada, entre los que se encontraban el administrador del mercado la isla de nombre Antonio Gutiérrez Valdivia. Estas personas vigilaban desde muy temprano y utilizaban radios, hablando todo el día. Miraban a las personas que llegaban votar, muy serias y en algunas veces amenazantes.

Después de las 6 de la tarde un grupo de vecinos de la colonia arboledas del movimiento Antorchista se encontraban apoyando a Rocío Zavaleta, esta líder azuzaba a sus agremiados para apoyar y gritar consignas a favor del PRI, sin embargo después de Las 11 de la noche que salieron de la escuela 1 de mayo y Emiliano zapata, se dieron cuenta que ese partido (PRI) no le había ido bien. Las cifras alegres que esperaban no eran las esperadas. Por ejemplo en la básica de la misma sección 1083 básica el PAN llevo 143 votos para senadores, el PRI se llevo 116 votos, esto por mencionar un ejemplo. En la Reserva territorial tan defendida por la estructura de la organización Antorchista, no les funciono la estrategia violenta.

En Veracruz, lo que más le dolerá al gobernador es haber perdido el distrito 16 electoral (su tierra) en donde desde luego el PAN gano la diputación federal con Leticia López…

De nadie le sirvió a Javier Duarte haber venido a Córdoba, simulando atender a la ciudadanía, cuando en realidad andaba en campaña política.
 
De que van a caer cabezas, van a caer, pero de ¿Rocío Zavaleta caerá? De ese cacique manipulador, que por más que hizo quedar bien con su PRI, de nada sirvió, aunque actúe y esté ligada con la delincuencia…ya le llegara su hora ¿o no? ¿O Javier Duarte dirá o hará algo al respecto o quizás esté de acuerdo con estos delincuentes?

Enviado por un lector a correo alternativo

TEXTO IRREVERENTE: BARBOMETRÍA

ENCUESTAS UTILIZADAS EN CAMPAÑA
Por Andrés Timoteo
BARBOMETRÍA

No solo a nivel nacional están bajo predicamento las casas encuestadoras que con tal de inflar la candidatura del priísta Enrique Peña Nieto, manipularon las mediciones sobre la intención de voto para hacerlo parecer como un contendiente invencible y así desalentar a la ciudadanía que tenían preferencia por algún abanderado de los partidos de oposición, sino que en Veracruz algunas hicieron de las suyas.
 
A nivel nacional las empresas Indemerc –Harris, que le dio 20 puntos de ventaja al copetón, GEA/ISA que le asignaba 18 puntos, Buen Día y Loredo que le pronosticó 17 puntos, Ulises Beltrán le otorgaba 16, Parametría c17 y Consulta Mitofsky con 15, ahora son señaladas de degradar el trabajo técnico para transformarlo en parte de la propaganda electoral. Esas firmas sentaron un precedente peligroso porque destruyeron la credibilidad de las mediciones.

Ninguna de ellas acertó –obviamente, con premeditación, alevosía y ventaja pues no quisieron hacerlo para ayudar al priísta- en la proyección y las dos únicas casas encuestadoras que se acercaron a la realidad fueron Berumen e Ipsos-Bimsa que informaron sobre una ventaja de 6.1 y 6 por ciento del mexiquense, cifra que se aproximó a lo que arrojó el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) del IFE. El resto quedaron en evidencia y desacreditadas.
 
En Veracruz también hubo errores garrafales de algunas de esas empresas porque no acertaron en la proyección demoscópica pero a la vez los mismos actores políticos creyeron en las mismas encuestas que pagaron para favorecerlos. Desde mediados de mayo se anticipó que el Revolucionario Institucional registraría un derrumbe en los resultados electorales pues los sondeos ciudadanos así lo indicaban.

Se hablaba de entre 10 y 12 distritos que perdería el tricolor y no andaban errados pronósticos porque los priístas perdieron las demarcaciones de Huatusco, Cosamaloapan, Veracruz Rural y Urbano, Córdoba – que ganaron los candidatos panistas- y Jalapa Urbano que fue para el perredista Uriel Flores Aguayo, pero también hay cifras cerradas en los distritos de Papantla, San Andrés Tuxtla, Acayucan y Jalapa Rural, es decir, las encuestas no andaban tan equivocadas.
 
En el caso de los abanderados al Senado tampoco hubo mucho error porque daban entre 1 y 3 puntos la ventaja del priísta José Yunes Zorrilla frente al panista Fernando Yunes Márquez. Es más, una de las casas encuestadoras que arrojó la mayor distancia no rebasaba los seis puntos. Claro, la medición se centraban entre las dos primeras formulas porque Julen Rementería y Héctor Yunes no figuraban en las estadísticas. Ambos estaban lejanos en las preferencias ciudadanas.

Sin embargo, hay casos muy desastrosos como en la conurbación Veracruz-Boca del Río donde los candidatos a las diputaciones federales, Oliver Aguilar X y Ángela Perera Gutiérrez fueron engañados – o más bien, se dejaron engañar para no ver la realidad que se anticipan- de los que les decían las encuestadoras güegüenches como Lenguotecnia, Radio Bemba, Barbometría y Consulta Chimowsky que les pintaban un panorama halagüeño.
 
Los lambiscones que los rodeaban les endulzaron los oídos y filtraban a la prensa que ambos candidatos tenían 18 puntos de distancia entre sus adversarios. Hubo incluso algunas notas informativas declaradas por dirigentes priístas que así lo aseguraban. A nivel estatal también le asignaban ese porcentaje al priísta Yunes Zorrilla pero todo fue mentira y los resultados del primero de julio dejaron muy mal parado a los asesores y operadores chafas.

Algo muy cierto es que los priístas no se pueden decir engañados porque hubo voces que los alertaron sobre lo contrario. Tan solo en el distrito de Boca del Río, las empresas Parametría, Defoe, Simo Consulting y Demotecnia ubicaban a Aguilar X entre 12 y 14 puntos abajo del panista Humberto Alonso Morelli y una medición similar se anticipó para Perera Gutiérrez en Veracruz, dando como margen de error entre 1.5 y 2 puntos porcentuales.
 
Los resultados del PREP fueron próximos a esta advertencia demoscópica ya que los candidatos azules superaron 10.93 y 9.54 puntos, respectivamente a los priístas de los distritos 4 y 12. ¿Qué sucedió?. Se confiaron, prefirieron cerrar los ojos y creerle a Radio Bemba que les daba números bonitos, y consideraron que el dinero y la publicidad pagada en medios de comunicación sería suficiente para llevarlos directo a la curul en San Lázaro. Moraleja: barberos y lambiscones, no son buenos encuestadores.

LA INCONGRUENCIA
 
Vaya que es incongruente el panista, Felipe Calderón Hinojosa, que termina su sexenio en medio de la ignominia y el desastre. Declaró la guerra al crimen organizado sin consultar al pueblo, sin tener un aparato de inteligencia eficaz y sin combatir la corrupción en las corporaciones policiacas y militares, y especialmente sin limpiar las gubernaturas estatales que estaban coludidas con la delincuencia. Metió a la nación en un conflicto armado, no legal ni declarado formalmente, pero que ha costado la vida a 60 mil personas y ha inundado con lagrimas a miles de hogares más.
 
Pese a ello, Calderón ayer rechazó la petición del Senado de la República para sancionar y publicar en el Diario Oficial de la Federación la Ley de General de Víctimas que fue aprobada el 30 de abril pasado. Esta legislación contempla el apoyo, la atención del gobierno y la indemnización a todas las personas que sean víctimas directas o colaterales de la violencia generada por su guerra contra el narcotráfico. No la avala y se niega a publicarla para que entre en vigor, aludiendo que es “incosteable”, es decir, que no hay recursos suficientes para atender a los damnificados pero si hubo recursos para iniciar y sostener una guerra que no ganará.

Es más, advirtió que el Congreso de la Unión carece de facultades para emitir una ley de este tipo, lo que significa que se atribuye únicamente a él, como el titular del Poder Ejecutivo, hacerlo. Y como no le parece ni quiere, las víctimas pueden seguir igual, sin ser atendidas. Los mexicanos pueden morir o sufrir las consecuencias y la autoridad no se hace responsable de atenderlos. Por eso los ciudadanos le propinaron un voto de castigo a él y a su partido el pasado 2 de julio, y ya no ven la hora en que se vaya del poder presidencial, el cual, por cierto y no se debe olvidar, ostentó durante seis años bajo la sombra del fraude y de la ilegitimidad.
 

Mas pruebas del fraude electoral 2012, en Veracruz. A favor de EPN.

Evidencian actas infladas en algunas casillas del Estado.
Por Manuel Hernández
Tras haber iniciado el recuento de votos en las distintas sedes del IFE, fueron enviadas a Notiver actas electorales en donde es tangible inconsistencias en el proceso electoral, con actas en donde la nemeralia no coincide o es evidente existió manipulación, de manera muy clara.
 
Como se sabe, el conteo de votos que dio inicio ayer estaba contemplado para durar tres días.
 
En cuanto a las actas enviadas se tiene por ejemplo el caso de la casilla 557 Contigua 1 con sede en Boca del Río, en donde se tiene un listado nominal de 536 ciudadanos y votaron 652 personas, por lo que existe una diferencia de 116 votos de más,
 
En esta casilla el candidato ganador fue el priista Enrique Peña Nieto.
 
Lo mismo ocurre con la que se ubica en la Sección 0746 Veracruz Coatepec, urna inflada por el PRI para la elección de Senadores.

En el acta se aprecia claramente la manipulación de números, unos que se transforman en nueves, seises en ocho, en ese estilo.

Cabe destacar que los partidos Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano formalizaron la solicitud para que el IFE para que se lleve a cabo el reconteo voto por voto de las casillas utilizadas en las pasadas votaciones del primero de julio.
 
El representante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Joaquín Sosa Herrera, dijo que hicieron entrega de los documentos requeridos en las primeras horas de este miércoles donde se manifiesta que haga la revisión de todas las casillas para revisar voto por voto.

Reportaje de: Notiver Diario.

4 de julio de 2012

ANONYMOUS TIRA WEB DE SORIANA!

AY NANITAS
 
MÉXICO, D.F. apro).- El colectivo de piratas cibernéticos (hackers) Anonymous atacó este martes el sitio web de la tienda de autoservicio Soriana en represalia por la supuesta entrega de tarjetas prepagadas que hizo el PRI a ciudadanos, a cambio de su voto a favor de Enrique Peña Nieto.

Este día el periódico La Jornada publicó una nota sobre la compra masiva de productos en la tienda Soriana ubicada en la avenida Zaragoza en Iztapalapa, con tarjetas prepagadas que presuntamente regaló el PRI a cambio de votos.

En las redes sociales también circularon fotografías y videos de las compras de pánico que realizaron los supuestos acarreados ante el rumor de que el PRI cancelaría el saldo de las tarjetas.

En represalia por el hecho, Anonymous lanzó un ataque a la página de la tienda departamental a través de una de sus cuentas. @AnonOpsLatino: "@AnonMexicoFE: TANGO DOWN http://www.soriana.com/ POR VENDIDOS Y CORRUPTOS", publicó el colectivo en su cuenta.

El ataque se prolongó hasta pasadas las 21:00 horas a través del enlace http://pastehtml.com/view/c3ln9oobf.html y continuaba al cierre de esta edición.

Según el administrador de la cuenta de @AnonOpsLatino "fuentes de Soriana" le informaron alrededor de las 20:45 horas que los beneficiarios de las ya no podían hacer efectivo su "regalo" porque no tenían sistema.

"Fuentes dentro de Soriana informan que los últimos acarreados no pueden cobrar porque no hay sistema. #Anonymous #EPNNuncaSeraMiPresidente", informó el colectivo.
 

El PRI "gana a huevo" en Veracruz.

Presumen priístas "órdenes directas" del gobernador Javier Duarte: Peña Nieto tiene que ganar "a como de lugar".

La elección federal en el estado de Veracruz transcurre entre compra de votos, acarreo priísta, funcionarios de casilla que no se presentaron a la apertura de las mismas, intimidación a representantes de Morena, y un alto número de casillas que no abrieron, denuncian reportes ciudadanos.
 
En el distrito 5 con sede en Poza Rica, por ejemplo, en decenas de casillas la instalación se demoró más de 50 minutos, porque de última hora, en una acción que parecería orquestada, los escrutadores de las mesas directivas no se presentaron.
 
En algunos casos se recurrió a ciudadanos formados en la fila para sustituirlos, pero en otros, nadie aceptó y tuvo que ser el IFE el que determinara quién fungiría en esa tarea.
 
Otra denuncia repetida en numerosos casos es que a los representantes de Morena (PT) se les pretende negar el derecho a firmar las boletas por la parte trasera.

En la casilla 3134, por ejemplo, el presidente de casilla primero le negó a la representante del PT el derecho a firmarlas, luego le dijo que "sólo tenía permitido por ley firmar 50 boletas" (lo que es falso); finalmente, y tras ejercer presión, se logró que la asistente del IFE hiciera un sorteo para determinar cuál de los representantes de partido firmaría las boletas.
 
Los representantes del PRI en las casillas salieron a las calles con sus característias playeras rojas, y abarrotaron todas las casillas, donde incluso afuera de las mismas hay gente vestida con ese color, vigilando a los grupos de acarreados que están llegando a votar.

Entre los representantes del PRI se han escuchado comentarios, supuestamente sarcásticos, en el sentido de que "este arroz ya se coció", porque, afirman, "el gobernador ya dijo que aquí ganamos a huevo".

Mentiras, filtraciones e incompetencia en el caso Regina

Jorge Carrasco AraizagaFalta de voluntad, incumplimiento de la palabra empeñada, incompetencia, actos de intimidación, mentiras… He aquí lo que explica la falta de resultados en torno al asesinato de Regina Martínez Pérez, corresponsal de Proceso en Veracruz. Así, la procuraduría estatal utiliza a medios locales, siembra versiones falsas –“el crimen fue pasional”, pregona– y acosa al gremio periodístico. A este desaseo se suma el desdén del gobierno de Javier Duarte de Ochoa hacia las organizaciones civiles e instancias internacionales que le han exigido una solución pronta e imparcial del caso. Por ello, este semanario solicitó a la PGR atraer la investigación, a través de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión.

Regina Martínez, Reportaje Especial
 
MÉXICO, D.F. (Proceso).- Ante la falta de resultados en torno al asesinato de Regina Martínez Pérez, corresponsal de Proceso en Veracruz, ocurrido hace más de dos meses, y habida cuenta de las filtraciones del gobierno de Javier Duarte de Ochoa en torno al caso, este semanario solicitó a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión (Feadle) atraer la investigación.
 
La petición se hizo el 27 de junio último ante esa instancia de la Procuraduría General de la República (PGR) toda vez que desde el gobierno estatal se emprendió una campaña mediática para sembrar la idea de que se trató de un “crimen pasional”.
 
No sólo no ha habido resultados, sino que comenzaron las filtraciones de supuestos detalles del crimen “por motivos personales” y hasta se ubicó al presunto autor en el propio gremio periodístico, sin que la Procuraduría General de Justicia estatal (PGJ) haya investigado si el asesinato de Regina Martínez fue perpetrado en represalia por su labor informativa.
 
El crimen ocurrió la madrugada del 28 de abril en el domicilio de Regina, ubicado en la ciudad de Xalapa. Ella murió por asfixia. Desde el siguiente día, la directiva del semanario le expresó directamente al gobernador Duarte su desconfianza ante las promesas de una investigación pronta y seria (Proceso 1853).
 
Con la impunidad a cuestas y luego de que durante más de un mes la procuraduría estatal escatimó información a la propia PGR, funcionarios del gobierno veracruzano comenzaron a filtrar la versión del crimen pasional, al margen de la coadyuvancia de la Feadle y de la revista, valiéndose de la prensa local y de Carlos Loret de Mola, conductor de Primero Noticias, de Televisa, y columnista del diario El Universal.
 
La primera filtración fue a nivel nacional. El 21 de junio, justo una semana antes de que se cumplieran dos meses del crimen, Loret de Mola dio por terminada la investigación en su columna de El Universal: “El gobierno veracruzano está a punto de anunciar los resultados de su indagatoria sobre el asesinato de la periodista Regina Martínez Pérez. Seguramente despertará mucha polémica”, escribió.
 
Dos días después, el periódico Imagen, del puerto de Veracruz, fue utilizado para continuar con la campaña: “Versión: identifican asesino de Regina Martínez”. Una escueta nota sin firma, en primera plana, fue suficiente para difundir la idea de que se trató de un crimen pasional.
 
“La autopsia practicada al cuerpo de Regina Martínez Pérez reveló la marca de una mordida en el cuello de la víctima; este indicio llevó a los investigadores a ubicar al agresor… Con esta prueba pericial se estableció que se trató de un crimen pasional o ‘de motivaciones personales’”, informó el diario, con base en “fuentes extraoficiales”. La versión también fue esparcida en Veracruz por la agencia de noticias Imagen del Golfo.

Aunque el mismo diario publicó el 25 de junio, también en portada y sin firma, un comentario sobre “el gran malestar” que causó esa versión, acusando a “algún funcionario” de Duarte de “crear confusión” sobre el asesinato, la versión acerca del “crimen pasional” siguió extendiéndose.

Ese mismo día, el columnista del puerto jarocho Luis Velázquez publicó en el blog expediente.mx: “Todo indica que la Procuraduría de Justicia de Veracruz está a punto de esclarecer el primero de los nueve crímenes de reporteros y fotógrafos ocurridos en los últimos 18 meses”.
 
Abundó en la versión del diario al que perteneció: “A partir de la mordida, los expertos han seguido la pista… Es más, se habla de que el presunto homicida ya fue identificado y una nube de policías, agentes y detectives siguen la huella”.

Incluso, ubicó al supuesto asesino entre el gremio periodístico de Veracruz: “Por eso es que a varios trabajadores de la información de Xalapa, citados a comparecer, les han tomado una placa de su dentadura para cotejarla con la marca hallada en el cuello de la víctima”.
 
Prosiguió: “la noche del velorio y el día del sepelio el presunto homicida estuvo presente. Con toda la sangre fría… el asesino participó en el duelo de principio a fin. Desde luego, parando oreja. Días después, no obstante, y según las versiones, desapareció… hasta el momento actual en que nadie de los colegas da señales de sus días y noches.

“Se habla, incluso, de que su trabajo reporteril lo dejó tirado y de nadie se despidió. Simple y llanamente, voló. Por eso es que la procuraduría y la Agencia Veracruzana de Investigaciones, AVI, se está dilatando un poquito… Pero a diferencia del hazmerreír con el hijo del Chapo, y del michoacanazo aquel, la procu jarocha tiene no los pelos de la burra en la mano, sino la burra completa”.
 
Aseguró que en la procuraduría veracruzana “ya saben todo” del asesino y “tienen hasta fotografías del presunto”. En el mismo tono de advertencia del conductor de Televisa, escribió: “aun cuando resultará (todo indica) una bomba mediática y política, ni modo, la verdad se impone”.
 
La “versión oficial”
 
Con la idea del crimen pasional, que de acuerdo al columnista “corresponde más que a una vida privada, a una vida clandestina, pues la corresponsal de Proceso era una mujer discreta”, el gobierno de Veracruz descartó extraoficialmente cualquier relación del asesinato con el trabajo periodístico de Regina Martínez.
 
Esparcida la versión, salió a escena Marco Antonio Rodríguez Lobato, encargado de la Fiscalía Especializada en la Atención de Denuncias Contra Periodistas y Comunicadores de la PGJ y quien formalmente está a cargo de las investigaciones.

“La PGJ desarrolla la investigación ministerial 019/2012/PC, con distintas líneas de investigación, en las cuales se realizan acciones jurídicas para cubrir las mismas y hasta en tanto no haya una determinación legal final de la indagatoria, no pueden hacerse suposiciones sobre la misma”, escribió el encargado formal de la investigación en una carta enviada al periódico Imagen y a la agencia de noticias Imagen del Golfo.

“Si alguna confusión existe, ésta se origina con la publicación de notas que no identifican sus fuentes y con datos no veraces”, añadió en su escrito publicado como inserción.

La campaña para propalar esa versión ocurrió cuando apenas la PGJ le había solicitado a Proceso el protocolo internacional para investigar casos de ataques contra el ejercicio periodístico, instrumento que desde la primera semana de mayo la revista le pidió a la fiscalía veracruzana que utilizara en sus investigaciones.
 
Bajo esa petición, lo que hizo la PGJ fue citar a declarar a varios periodistas veracruzanos. En uno de los casos, los policías ministeriales entregaron el citatorio durante una marcha gremial realizada el 7 de junio, Día de la Libertad de Expresión. Los policías ministeriales, literalmente, corrieron tras Norma Trujillo Báez, reportera de La Jornada Veracruz, para hacer el emplazamiento judicial.
 
Los policías le pidieron datos de otros periodistas, pues traían por lo menos otros seis citatorios, dice Trujillo. En su comparecencia, la PGJ le preguntó sobre hábitos personales de la corresponsal de Proceso. “Es algo que desconozco”, dice al reportero, y comenta que consideró un acto intimidatorio el hecho de que la procuraduría la citara con dos semanas de anticipación.
 
A los primeros colegas suyos que declararon, la PGJ no sólo les preguntó sobre sus relaciones con Regina Martínez y su vida personal; también les tomó las huellas dactilares de ambas manos. Los siguientes en comparecer se negaron a que les tomaran las huellas y a ser fotografiados con número, como si se tratara de una ficha signalética ordenada por un juez.

Intimidaciones al gremio
 
En lugar de indagar la eventual relación del crimen con el trabajo periodístico de Regina Martínez, la PGJ se valió de esos interrogatorios para indagar sobre la vida personal de la corresponsal de este semanario.

La idea del crimen pasional no es nueva. Apenas habían pasado unas horas cuando funcionarios de la propia PGJ así se lo hicieron saber a los familiares de la periodista. Luego siguió el interés de la procuraduría de orientar el asesinato hacia un robo, pues Regina vivía “en un barrio bravo”, según declaró a Proceso el procurador Felipe Amadeo Flores Espinosa.
 
Durante el primer mes, la PGJ se dedicó a interrogar a los vecinos de Regina Martínez, al poner énfasis en el robo de una televisión de plasma, una computadora y dos teléfonos celulares.

Ya en ese momento, el gobierno de Duarte hablaba de avances en “una línea concreta” de investigación, según declaró la vocera gubernamental, Gina Domínguez, el 23 de mayo.

Sin embargo, para entonces la PGJ ni siquiera había entregado la información completa a la Feadle, que participa como coadyuvante en la investigación. Fue necesario que el 28 de ese mes viajaran a Xalapa la titular de la fiscalía especial, Laura Angelina Borbolla Moreno, y el subprocurador de Derechos Humanos, Atención a Víctimas y Servicios a la Comunidad, Miguel Ontiveros Alonso.

Reunidos con Flores Espinosa, los funcionarios federales comenzaron a hacer una relación de la información no entregada cuando los interrumpió Rodríguez Lobato. El encargado de la fiscalía especial del estado aseguró que la información acababa de ser entregada. Mintió.

Pasaron más de dos semanas para que la Feadle tuviera los datos sobre las huellas encontradas en el lugar. La PGJ sólo había entregado fotografías de las huellas y no la confrontación de las mismas con el banco de datos de Plataforma México, en el que se encuentran, entre otras, las huellas de personas detenidas en territorio nacional. La procuraduría estatal adujo problemas técnicos para la entrega de esa información.

Además, la PGJ había entregado a cuentagotas sus dictámenes, entre ellos el de criminalística de campo, en el que se indica la manera en que se encontraron el cuerpo y el lugar de los hechos. La Feadle aun no determina si admite o no la petición de Proceso para atraer el caso.

Los escarceos del gobierno veracruzano para investigar el asesinato desestiman las peticiones de organismos nacionales e instancias internacionales para esclarecer el crimen, además del seguimiento que le ha dado la prensa extranjera.
 
Desde que el asesinato de la periodista se difundió fuera del país, la Oficina de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU y la Relatoría Especial de Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidieron al gobierno de Duarte hacer una investigación pronta e imparcial para esclarecer los hechos y sancionar a los responsables.

La relatora de la CIDH, Carolina Botero, recordó incluso que en Veracruz Proceso “ha sido objeto de la compra masiva de ejemplares por parte de quienes se sienten afectados por las publicaciones y en distintas oportunidades se ha visto en la necesidad de mantener en anonimato el nombre de los periodistas que cubren temas de seguridad”.

3 de julio de 2012

El PAN devuelve Los Pinos al PRI

Con el conteo rápido del IFE, Peña Nieto es declarado virtual presidente electo. Vázquez Mota acepta el resultado. Calderón saluda el regreso del PRI a Los Pinos. Y López Obrador espera el resultado oficial
Por Félix Arredondo -
Con el conteo rápido del IFE, Enrique Peña Nieto fue proclamado anoche virtual presidente electo de México,con una ventaja de 7 puntos sobre Andrés Manuel López Obrador.
 
Eran las 23:13 horas cuando el presidente del IFE, Leonardo Valdés Zurita, apareció en televisión. Como hace 12 años lo hizo su homólogo José Woldenberg.

Se trataba de confirmar oficialmente una noticia que ya casi todos sabían: que las tendencias favorecían al priista Enrique Peña Nieto.

En el script, siguió el turno de Felipe Calderón. Como hace 12 años lo hizo su antecesor, el priista Ernesto Zedillo.
 
El objetivo fue el mismo. Reconocer que el triunfo era de Peña Nieto, como hace 12 años Zedillo reconoció que había ganado Vicente Fox.

Horas antes, la candidata del PAN Josefina Vázquez Mota admitió que los resultados no la favorecían. Gabriel Quadri fue más allá. Le pidió a López Obrador que reconociera su derrota. Pero el candidato del Movimiento Progresista esperó hasta el final.
 
López Obrador fue prudente. No reconoció la derrota y tampoco descalificó las cifras que le daban el triunfo a Peña Nieto. Dijo que prefería esperar a tener en su poder todas las actas para asumir una postura.

Sin embargo, a las once y media de la noche todo parecía consumado. Enrique Peña Nieto era proclamado extraoficialmente presidente de México.

Y es que si en 2006, la diferencia de 0.56 por ciento de Felipe Calderón sobre López Obrador fue suficiente, en 2012, una diferencia de 7 puntos parece una barrera insalvable para descalificar la validez de esta elección.
 
Eran casi 3.5 millones de votos. Casi la misma ventaja que Vicente Fox tuvo sobre el priista Francisco Labastida.

Sin embargo, a diferencia de lo que sucedió hace 12 años, esta vez no hubo festejo en las calles.
 
Tampoco hubo celebración en el Ángel de la Independencia. Solo en la vieja sede del PRI.
 
En un ambiente totalmente controlado, Enrique Peña Nieto se reunió con los suyos en el vetusto y emblemático edificio del tricolor.

Se le veía contento, relajado, satisfecho. Pero, sobre todo, prudente y mesurado. Pronunció un discurso tan políticamente correcto y cuidado, que resultó acartonado.
 
El priista le tendió la mano al presidente Calderón. Lo reconoció por no haberse entrometido en el proceso electoral, cuando en los hechos sucedió todo lo contrario.
 
Fue respetuoso y hasta generoso con sus adversarios. Anunció que quería ser el presidente de la reconciliación.
 
Ganó México, dijo Peña Nieto. Hubiera sido imprudente que dijera alguna otra cosa. Y el mexiquense lo entendió.
 
Y es que si bien 3.5 millones de votos hicieron la diferencia para ganar, según los conteos preliminares, lo cierto es que el PRI no obtuvo una mayoría absoluta.
 
Si los porcentajes del conteo rápido que anunció el presidente del IFE se mantienen, Peña Nieto obtendrá unos 19 millones de votos de los casi 50 millones que estuvieron en disputa.
 
Los otros 31 millones de sufragios son de mexicanos que prefirieron una opción distinta de la oferta tricolor.
 
¿Por qué regresó el PRI?

Seguramente en los próximos días se harán innumerables análisis y explicaciones. La mayoría razonables y válidos.
 
Sin embargo, no se puede negar el hecho de que detrás del triunfo de Peña Nieto hay algo más que buenos spots, una campaña que se inició hace seis años, o un candidato bien parecido.
 
Detrás de esa victoria hay una larga historia de hechos que sucedieron en los últimos dos sexenios, pero sobre todo en el de Felipe Calderón.
 
Hace 12 años, los mexicanos creyeron que con la derrota del PRI, se había acabado la práctica del dedazo.
 
Que ya no se utilizarían los recursos públicos para ganar una elección. Que se terminaría la impunidad. Que se combatiría la corrupción. Que se vigilaría el gasto público. Que se acabaría el nepotismo.

Que la economía crecería a una tasa sostenida superior a 6 por ciento. Que habría más empleos. Que se reduciría la pobreza.

Que México sería competitivo. Que los campesinos podrían aspirar a una vida digna. Que los recursos de Pemex ya no se utilizarían para financiar campañas políticas.
 
Que habría justicia. Que México sería más seguro. Que disminuiría la desigualdad en la distribución del ingreso.

Sin embargo, nada de esto sucedió. Desde los primeros días del cambio, poco o nada cambió.

Pero los hechos fueron cambiando el ánimo de los millones de mexicanos que creyeron en el cambio.

Y es que desde los últimos días de noviembre del 2000, Vicente Fox dio a conocer a los “nuevos” miembros del gabinete, muchos eran los mismos priistas que se habían visto durante cerca de 30 años.

En enero de 2001, Joaquín “El Chapo” Guzmán salió de una prisión de alta seguridad. En 2007 ya aparecía en la lista de multimillonarios de Forbes.

En abril del año 2001, Fox anunció su intención de gravar con el IVA alimentos y medicinas.

Para mayo, las toallas de Los Pinos ya costaban más de 4 mil pesos.

En julio, Fox se casó con su vocera Marta Sahagún, convirtiendo así a una Cenicienta en “La Jefa”. Y para noviembre, Vicente y Marta ya eran la pareja presidencial que retó al Vaticano.

En 2003, el “Presidente del Cambio” decidió intercambiar los lingotes de oro de luchar contra la corrupción del Pemexgate por los cacahuates de una reforma fiscal que nunca pudo prosperar y el indulto a sus Amigos de Fox.
 
México fue perdiendo competitividad. En las elecciones de 2003, el PRI empezó a regresar al Poder Legislativo. Se convirtió en la primera mayoría legislativa.

Los hijos de Marta se hicieron ricos en la más amplia de las impunidades. Fox engañó hasta a sus mejores amigos.
 
Compró ranchos en secreto. Falseó sus declaraciones patrimoniales. Hizo del pueblo de San Cristóbal su pequeño feudo.
 
Los hijos de Marta se compraron un jet. Los que tenían los basureros por negocio, se hicieron terratenientes, constructores, financieros. Nada les pasó.
 
En 2006, solo un conflicto interno del PRI, que acabó con la imagen de Roberto Madrazo, y la campaña del miedo impidieron que el tricolor fuera competitivo en las elecciones presidenciales de ese año.

Por eso, aun ganando en 2006, Felipe Calderón perdió.

El sello del sexenio fue la confrontación. Se perdió la paz. Creció la violencia. Se disparó el número de muertos. Aumentó el consumo de drogas. Se instaló la inseguridad.

Y Calderón culpó a todos sus antecesores. La economía siguió a la deriva a pesar de que México tuvo los ingresos petroleros más altos de su historia. Y sus deseos de convertirse en el “Presidente del Empleo” se frustraron. El PAN fue perdiendo adeptos.
 
En 2009, el PRI volvió por sus fueros en el Congreso. Y cayeron las gubernaturas azules de Querétaro y San Luis Potosí. Hasta el corredor azul del Estado de México se volvió tricolor.

El PAN también perdió ayer Jalisco y Morelos. Los priistas conquistaron a los tapatíos y los perredistas a los morelenses.

Calderón perdió ayer el poder. Y los panistas su partido.

La decisión final
 
PRI o no PRI era la disyuntiva de las elecciones 2012. Y una mayoría minoritaria se decidió por el PRI.
 
Si se confirman las cifras del conteo rápido, López Obrador no habría podido convencer a suficientes mexicanos de que su propuesta era mejor.

Y, guste o no, la opción es hoy para Enrique Peña Nieto.

Un político de 46 años que, según los resultados electorales que se conocen hasta ahora, cuenta con más legitimidad para gobernar que Felipe Calderón.

La mexicanos esperan que les devuelva la paz. Que se termine la guerra. Esperan que México vuelva a crecer. Que haya más empleos. Los pobres y los marginados quieren dejar de serlo.

Ojalá, por el bien de México –y si las cifras oficiales lo confirman–, que Peña Nieto pueda lograr como presidente lo que no se cumplió en los últimos dos sexenios.