México - 24 AGO 2020 -
Las imágenes fueron
grabadas en julio en Nuevo Laredo por uno de los soldados que participó en la
refriega. De los 12 civiles muertos tres habían sido secuestrados y tenían las
manos atadas.
En un vídeo sobrecogedor divulgado este lunes, militares
mexicanos ordenan un asesinato después de un enfrentamiento. Ocurrió el 3 de
julio, en Nuevo Laredo. Los balazos habían terminado. Los soldados rodeaban una
de las camionetas contrarias. En las imágenes, publicadas por el diario El
Universal, se ve que una persona levanta la cabeza de la batea de la pick up.
Entonces, uno de los uniformados grita: “¡Está vivo!”. Y otro contesta,
“¡mátalo a la verga!”. Aquel día murieron 12 civiles según la cuenta del
Ejército. No hubo heridos.
El enfrentamiento ocurrió de madrugada. Un convoy militar
patrullaba una avenida en Nuevo Laredo, Tamaulipas, en el noreste de México,
cuando un grupo de civiles armados los atacó a balazos. Esa es al menos la
versión que dio el Ejército. Los militares contestaron. Uno de los soldados, el
que iba a cargo de la ametralladora de una de las camionetas castrenses, grabó
todo con su cámara reglamentaria. Fueron cientos de disparos.
Hasta ahora se conocía
parte del vídeo que grabó el soldado, publicado por el propio Ejército en
julio. En las imágenes se ve la torreta de la camioneta y al soldado que porta
la cámara disparando aunque no es posible apreciar a qué distancia están los
presuntos criminales.
La violencia de las
imágenes ha impactado aún más porque al menos tres de los muertos no eran parte
de ningún grupo criminal y recibieron disparos a corta distancia. Al contrario,
habían sido secuestrados días antes por los criminales y aquel día estaban
atados, encerrados en una de las camionetas de los criminales. Sin embargo, la
Secretaría de la Defensa evitaba diferenciarlos en sus reportes.
Este lunes, el
presidente, Andrés Manuel López Obrador, se refirió a las imágenes, diciendo
que investigará lo sucedido. “Hoy mismo en la mañana di instrucciones al
secretario de la Defensa Nacional para que se investigue porque nosotros no
vamos a permitir estas prácticas. Eso se hacía antes, había la consigna de
rematar a los heridos en enfrentamientos”.
Las imágenes sugieren,
sin embargo, que los enfrentamientos siguen resolviéndose de la misma manera
que en el pasado y alimenta el debate sobre la opacidad de las Fuerzas Armadas
en el manejo de información sensible para la opinión pública. El vídeo
publicado este lunes era conocido por los mandos del Ejército pero se ocultó
durante más de seis semanas sin que se tomaran medidas hasta su publicación en
la prensa. Paralelamente, pone en entredicho la actuación de la fiscalía,
encargada de las investigaciones desde julio.
Criticado por perpetuar
el papel policial de los militares, López Obrador y su Gobierno enfrentan ahora
las dudas sobre una estrategia que genera nuevos problemas a los que intenta
sofocar. Casos parecidos al de Nuevo Laredo han ocurrido en las dos
Administraciones pasadas -las ejecuciones de Tlatlaya, o el asesinato de los
dos estudiantes del Tec, en Monterrey, por ejemplo- pero el mandatario trató de
marcar distancia, señalando que los militares ya no reprimirían.
Las imágenes reveladas,
sin embargo, señalan la distancia entre los deseos del presidente y los puntos
oscuros que deja la lucha contra el crimen organizado. El vídeo evidencia que
ningún otro militar llevaba encendida la cámara reglamentaria y agita el debate
sobre el papel que desempeñan los militares desplegados en las calles, ajenos
al escrutinio de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario