Por: José Miguel Cobián
Autocrítica: Cuando leo en la prensa o escucho en la radio los mismos comentarios que durante el Fidelato, comienza mi preocupación por la falta de atención a lo cotidiano de los formadores de opinión en Veracruz. Muchos de esos comentarios son los mismos del sexenio pasado, con la salvedad de que en el sexenio pasado las cosas se hacían de manera diferente que en el actual, además de que sucedían cosas diferentes en Veracruz de las que suceden ahora.
Se comenta: ¨El gobernador no atiende a la gente en sus giras¨. La realidad nos dice y lo dice el propio gobernador Duarte, que la atención a la ciudadanía merece todo el respeto del mundo, y que las audiencias de banqueta no son la mejor solución. Duarte afirma que cualquier veracruzano será atendido por el ejecutivo, ya sea por medio de los secretarios de despacho o directamente por el gobernador, pero en el lugar, en la hora y con la atención adecuada. Curiosamente hemos visto a los funcionarios veracruzanos atendiendo a la población y en particular al secretario de Gobierno Gerardo Buganza y al subsecretario de gobierno Erick Lagos. Estos dos funcionarios cuyos puestos en otras épocas eran inalcanzables, hoy están a la distancia de una cita telefónica y una espera generalmente breve en palacio de gobierno. Lo mismo sucede con la mano del gobernador, Juan Manuel del Castillo, que siempre tiene su oficina a reventar de ciudadanos, y a todos los atiende, los escucha en privado y como los otros dos funcionarios mencionados, les resuelve sus asuntos siempre que sean de su competencia y esté en sus posibilidades realizarlo.
Un comentario común es: ¨violencia y muertos en tal lugar, pero ya sabe usted, que en Veracruz no pasa nada¨. Tratando de insinuar que desde las alturas del poder se esconde la información sobre hechos violentos. Lástima que la realidad se imponga al deseo de crítica, pues hemos visto al gobernador Duarte informar vía su twitter prácticamente en tiempo real sobre lo que sucede, y no se esconden los hechos.
Sobre la situación económica de Veracruz, también se dice que desde las alturas del Olimpo no se informa sobre la falta de liquidez del estado. Esto es falso, pues el propio secretario de finanzas ha salido a la palestra a informar sobre el estado de las finanzas. Se ha informado sobre la forma de poner al corriente los adeudos pasados y actuales, se ha pedido paciencia a los acreedores y se les ha garantizado el que si de verdad se les debe por una obra o un servicio realizado, se les cubrirá poco a poco su adeudo. También esta situación económica provocó que la tenencia se aplique en 2012, pero únicamente para vehículos cuyo valor de factura antes de IVA sea de $230,000.00, con lo cual se afirma que 9 de cada 10 autos quedarán exentos de dicho gravamen, y únicamente aquéllos que más tienen serán los que aporten para apoyar a las finanzas del estado. Propuesta que provocó la molestia de una parte del sector afectado, pero que también provocó el apoyo de empresarios conscientes de su obligación de apoyar al erario estatal, con un gravamen que dado su nivel de ingresos no resulta lesivo para ellos, y sí muy beneficioso para el estado de Veracruz.
Se dice también que no se combate la corrupción. Sin embargo vemos que las cuentas públicas de 2010 están siendo revisadas por el ORFIS, y los que entendemos de este asunto, sabemos también que una cosa es tener observaciones, y otra cosa muy diferente generar una acción penal, pues una vez definidas las observaciones, éstas tendrán un plazo para ser aclaradas a plena satisfacción del órgano de fiscalización superior, y en caso de no atenderse adecuadamente, entonces se procederá a fincar responsabilidades. En el caso de la contraloría del estado, se promueve la jubilación anticipada de servidores públicos para reducir gastos, así como la reducción de salarios y percepciones de ciertos niveles medios y altos de servidores públicos, vigilancia de aplicación de una austeridad que aunque no es por decreto, si se aplica de manera cotidiana, y quizá lo más importante, la revisión de la deuda atrasada, para determinar especialmente en el caso de constructoras, si éstas realmente cumplieron con la entrega de los bienes ordenados, o si se puede reducir o eliminar el adeudo por razones de incumplimiento o falta de calidad en las obras terminadas.
Ojalá que aquéllos que utilizan en este sexenio los mismos argumentos que se usaron en el sexenio anterior, perciban que Veracruz es otro, y que quien gobierna Veracruz con un nuevo estilo es Javier Duarte.
