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El corredor industrial en el cual está inmersa la ciudad de Orizaba se
encuentra profundamente lacerado por los crímenes de lesa humanidad y de Estado
en esta entidad veracruzana, sin embargo, lejos de ser un caso aislado,
representa el botón de muestra de lo que acontece en todo el país en general y
en el estado de Veracruz en particular. Se comprueba de manera muy dolorosa
para las masas trabajadoras la relación perversa entre el poder económico y el
político, que representa la cúpula política-empresarial de donde tienen origen
todos estos crímenes.
Decenas de fosas clandestinas, cientos de cuerpos inhumados de forma
ilegal y privados de la vida de forma arbitraria, lo que devela la esencia de
la política represiva con la que se condujeron las administraciones estatales
anteriores, porque en cada uno de estos restos mortales subyace una persona que
fue detenida desaparecida de manera forzada, cuyo deleznable final fue la
ejecución extrajudicial; política de gobierno de la que no difiere en lo
sustancial la actual administración que encabeza el panista Miguel Ángel Yunes
Linares.
A meses de haber ocupado el cargo quien se ostentó como un paladín de la
justicia y que haría “cimbrar a México” por los elementos tangibles de
corrupción que daría a conocer, está claro que no es la corrupción lo que
cimbra a nuestro país, sino la exorbitante cifra de fosas clandestinas que
emergen día con día, la forma exponencial que crecen la incalculable lista de
desapariciones forzadas en el estado y los innumerables casos de violaciones a
los derechos humanos a través del Mando Único.
Esta entidad rica en recursos naturales, cuya litoral rodea casi en su
mayoría el golfo de México, es el escenario de supuestos enfrentamientos de
grupos criminales, donde la constante son las ejecuciones extrajudiciales
masivas, con la particularidad que las víctimas son del pueblo sin ninguna
relación con los supuestos cárteles de la delincuencia organizada. Es de
singular importancia observa la forma en cómo el gobernador se apresura a afirma
que los cuerpos sin vida que fueron abandonados en las inmediaciones de la
ciudad de Boca del Río, Veracruz corresponden con “delincuentes”, conclusión a
la que llega después de un escrupuloso análisis respecto a la “forma” en cómo
fueron ejecutados.
Resulta un absurdo y una verdadera falta de responsabilidad, por decir
lo menos, que un titular del ejecutivo del nivel que sea, se atreva a sostener
sin ninguna base científica sólida, que sólo por la forma en que se cometió un
crimen obedezca a un “pleito” entre grupos criminales. De acuerdo al acotado
estado de derecho mexicano, toda persona tiene derecho a presumir inocencia y
menos aún se puede afirmar de tajo que todos los que son víctimas de tan
atroces crímenes sean en automático delincuentes.
La realidad es terca y sin prisa expresa sin ningún pudor la verdadera
esencia de esta política criminal, muchas de las víctimas, la mayoría, nos
atrevemos a afirmar, no tienen nada que ver con los grupos delincuenciales. Se
comprueba con testimonio de familiares que son efectivos del ejército, la
marina, policía federal, estatal y municipal, quienes cometen estos deleznables
crímenes y que las víctimas son del pueblo.
En este contexto es que nos recibe la ciudad de Orizaba para la
realización de las actividades políticas y de denuncia en torno a La
Jornada Nacional De Lucha: las víctimas del terrorismo de Estado son del
pueblo, no desistiremos ¡HASTA ENCONTRARLOS!, un pueblo y una ciudad
que viven día a día el cometido de cientos de crímenes de lesa humanidad y, sin
embargo, no voltean la mirada, no muestran indiferencia, por el contrario, la
solidaridad se muestrea de distintas formas. Esta ciudad enclavada en las faldas
de la Sierra Madre Oriental, donde el aroma de café y caña de azúcar se mezclan
en el ambiente, es también una de las más golpeadas por la política represiva
de los gobiernos en turno.
La conferencia de prensa convocada en el parque Castillo en el primer
cuadro de la ciudad, logró dar cita a varios periodistas; la lectura del
boletín corre a cargo de los compañeros del FNLS en esta ciudad, en éste se
detalla las particularidades y razones por las que desarrollamos la Jornada
Nacional y por qué se consideró a esta ciudad como una de las sedes.
Cuando toca el turno a los compañeros de los compañeros que fueron
víctimas del intento de ejecución extrajudicial en la Ciudad de México el 7 de
noviembre de 2015, exponen que una de las razones por las que el Estado
mexicano intentó privarles de la vida es por la actividad de denuncia política
que hemos desarrollado a través de distintas jornadas de lucha y por exigir la
presentación con vida de los luchadores sociales Gabriel Alberto Cruz Sánchez y
Edmundo Reyes Amaya, detenidos desaparecidos el 25 de mayo en la ciudad de
Oaxaca, Oaxaca.
En los trabajadores de la comunicación se observa el interés sobre el
tópico de la desaparición forzada y la ejecución extrajudicial, y no es para
menos, puesto que son muchos los integrantes de este gremio los que han sido
víctimas de estos deleznables crímenes. La labor periodística se convierte en
esta entidad como una de las actividades más peligrosas, lo que refleja que el
cometido de estos crímenes de lesa humanidad es un fenómeno exponencial.
La actividad de denuncia continúa hasta las 15:00 horas, mediante un
mitin se informa a través del equipo de sonido a todas las personas que pasean
en una mañana agradable por el parque Castillo, son muchos quienes se detienen
a leer las mantas mientras nuestros compañeros hacen entrega del volante. Al
dar un vistazo general del contenido de la propaganda, hacen una pausa y buscan
entre sus pertenencias una moneda para depositarla en el bote, en
estos aspectos particularidades se expresa la solidaridad del pueblo ante tales
injusticias que se cometen contra él.
Para ampliar el campo de la difusión se nombra un equipo de compañeros
para visitar a los locatarios del mercado “Zapata” y dar de primera mano la
información a ellos y a quienes están en un día de compras. No es sorpresa para
nosotros observar la aceptación de la información plasmada en el volante y el
cartel, sin embargo, cada uno de ellos expresó su preocupación por la creciente
ola de violencia en el estado.
¿Qué delito pudo haber cometido una jovencita de 15 años? ¿Qué
responsabilidad puede tener una joven de 16 años en un acto delictivo? Son
algunas de las preguntas con las reflexionaban los locatarios y las personas
que se detenían a escuchar la información. En aquellas reflexiones se expresa
que existe el escrutinio popular, donde el pueblo cuestiona y observa con ojo
crítico el acontecer nacional y estatal, por lo tanto, poco a poco se reconoce
en cada una de las víctimas a un hermano de clase.
Así termina un día de actividades de esta jornada nacional, donde la
solidaridad se vio reflejada en varios aspectos, desde la moneda depositada en
el bote, aportación de víveres y alimentos, desde este espacio un
merecido reconocimiento a todos ellos que coadyuvan a la realización de esta
actividad de gran importancia.
Queda expresado de manera puntual que por muy fuerte que sea el dolor,
por muy profunda que sea la angustia y por muy lacerante que sea el terrorismo
de Estado, la solidaridad del pueblo no puede ser eliminada, ésta se brinda de
forma incondicional y cobija a todas las víctimas de tan deleznables crímenes.
La Jornada continua sin renunciar al derecho de conocer la verdad que sucede
con todas las víctimas, sin desistir ¡HASTA ENCONTRARLOS!
FRENTE
NACIONAL DE LUCHA POR EL SOCIALISMO
¡Por la unidad obrera, campesino y popular!
¡A impulsar y organizar la lucha por el socialismo!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS)