El pasado lunes La Jornada Veracruz informó que existen ciudadanos que llevan hasta tres años intentando recuperar sus vehículos que les fueron robados, mientras tanto éstos se echan a perder en los corralones de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), por lo que el agente del Ministerio Público Especializado en Atención de Delitos de Autos Robados en la región de Xalapa, Adán Daniel Márquez Limón, aseguró en entrevista que no existe algún tipo de reporte por corrupción en esta dependencia. Agregó que apenas lleva un mes como titular de esta Agencia en la región de Xalapa, “y no tengo ningún reporte de algún tipo de corrupción”.
Asimismo, señaló que semanalmente salen más coches de los que entran, pues en promedio siete u ocho vehículos se van del corralón cada semana y entran alrededor de cinco o seis. En ese sentido, dijo que actualmente personas que perdieron sus automóviles en los años 2007 y 2008 recientemente han ido al corralón por su propiedad, “estoy revisando los expedientes, se les avisa, hacen el trámite y se van contentos”.
En el corralón ubicado en el municipio de Banderilla es notoria la gran cantidad de automóviles olvidados por sus dueños, que se encuentran echándose a perder, ante esta situación se le cuestionó al Ministerio Publico, por lo que Márquez Limón reconoció que algunos automóviles ya se encuentran adjudicados al gobierno del estado, conforme al Código de Procedimientos que contempla que se debe poner a disposición del gobierno del estado las unidades que no han sido recogidas por un periodo mayor a los dos años, por lo que expresó que en este caso el gobierno estatal es el que decide qué hacer con las unidades adjudicadas, pues las pueden recoger y quedárselas o subastarlas, “de eso el gobierno se encarga”.
Asimismo, Adán Daniel Marquez rechazó categóricamente que exista algún tipo de corrupción en su región, pero reconoció: “sí escuche comentario de que les cobraban, pero no puedo comentar nada ahorita, yo tengo otra forma de trabajar”.
Por lo que dijo que a simple vista se encuentran los teléfonos en donde se pueden quejar por si algún servidor público les pide dinero, “ahí es en donde se puede quejar una persona”.