Por internet se encuentra circulando una nota en donde se busca a la niña Jennifer García Quintana, caso curioso es que en varios países está circulando por internet, Así como recorrió México, Argentina y ahora España. El anuncio es tan solo un esbozo, no da más detalles de la desaparición. Los lectores que hacen circular esta nota hacen que todo mundo voltee hacia ella, en donde una adolecente es buscada por su padre. Dan algunos datos de esta chica, pero para información de su paradero solo ponen dos correos electrónicos, que por cierto ya hice el intento de tener contacto, solicitando más información, pero ha sido en vano, no he tenido respuesta.
Podríamos decir que niña Jennifer García Quintana es la más buscada por el mundo cibernético, cambia de nacionalidad constantemente y su padre cambia de actividad laboral y corren cadenas de mensajes. Este tipo de anuncios, tal parece que son spam que circula por internet, pero es lamentable que ocupe un espacio que debería tenerlo un asunto más trascendental.
Pero esta nota nos debería hacer meditar y analizar lo siguiente: ¿Cuántas personas desaparecen y son buscados afanosamente por sus familiares o amigos? ¿Cuántos niños son robados y sus padres se encuentran viviendo un infierno? ¿Cuántas personas son parte de esas cifras del mercado negro de esclavitud, pornografía infantil y venta ilegal de órganos humanos?... Las cifras quizás son impresionantes.
Hay desaparecidos por diversas razones, las noticias dan cuenta de centroamericanos que cruzan entidades del territorio mexicano, son botín de la delincuencia organizada, algunos para explotarlos cuasi esclavos, otros para extorsionarlos o secuestrarlos y pedir rescates a sus familiares y los que corren la peor suerte son asesinados y desaparecidos físicamente.
Nos llegan reportes de personas que fueron al estado de Tamaulipas hacer negocios, ya no han regresado a sus hogares. Mujeres asesinadas en Ciudad Juárez, Chihuahua, y otras desaparecidas, llenan las estadísticas a nivel nacional. La violencia se desborda y con ello crece la segregación familiar. En otros países ocurren similarmente hechos que violentan y sacuden a la sociedad, por los cuales desaparecen personas.
Por eso, un anuncio en donde esta niña que se busca de nombre Jennifer García Quintana no nos debe desalentar para seguir formando redes sociales en busca de personas que no aparecen, pero además denunciar y luchar en contra de las lacras sociales que de manera deshumanizante impulsan la pornografía infantil, la esclavitud, la extorsión, el secuestro, etc.
desarmadorpolitico@hotmail.com
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