Debido a las condiciones de marginación y pobreza que persisten en las zonas indígenas de Veracruz, cada vez es mayor el número de habitantes que migran a otras entidades a trabajar como jornaleros agrícolas, sin embargo en la mayoría de las veces lo hacen en condiciones de esclavitud, mencionó el diputado local e integrante de la Comisión de Asuntos Indígenas, Moisés Hernández Barrales.
En la región de Chicontepec, distrito al cual representa, señaló que es común que llegue alguna persona con un camión a invitar a los indígenas a trabajar en las cosechas de tomate o granos en Sinaloa, sin firmar algún convenio o explicarles bajo qué condiciones estarán, y al llegar allá los campesinos son explotados como si se tratara de la época revolucionaria.
Esta situación, aseguró, es similar en cada una de las regiones indígenas de Veracruz, pues ante la falta de fuentes de empleo o apoyos para reactivar el campo, los pobladores de estos lugares se aventuran a ir a trabajar como jornaleros a otras entidades del país, sin tener la certeza de las condiciones laborales que enfrentarán.
El legislador estimó que en los últimos 10 años, la población indígena de Veracruz se redujo hasta en 40 por ciento, debido a que mucha gente que se va a trabajar a los cultivos de otras partes deciden asentarse por esos sitios y no regresar a sus pueblos.
“Lo peor es que muchos, una gran cantidad de paisanos regresan pero ya adentro de una bolsa, porque fallecen mientras trabajan, ya sea en otro estado del país o en Estados Unidos”, expresó.
Moisés Hernández Barrales mencionó que todavía es muy común que los indígenas sean engañados de que si van a trabajar en las cosechas ganarán mucho dinero, pero al llegar al sitio del trabajo se dan cuenta que prácticamente son esclavos y que deben realizar las faenas para recibir alimento y un lugar donde descansar sólo por algunas horas.
Frente a esta situación, resaltó, hace falta dar mayor orientación a los indígenas sobre los riesgos que enfrentan al aventurarse a un trabajo así, sin tener la certeza de que al menos recibirán un pago.
De igual modo, dijo, se requiere que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social llegue hasta las comunidades más apartadas de Veracruz a informar al respecto y a ofrecer el programa de jornaleros agrícolas, mediante el cual una persona puede ir a trabajar ya sea dentro o fuera de México pero con condiciones adecuadas, certeza en el pago, alojamiento, vivienda y hasta seguro médico.
Sin embargo, reconoció que es tan grande la necesidad que mucha gente optará por irse a trabajar con quienes llegan a reclutar personas, mientras tanto en los pueblos sólo habrá niños y mujeres.
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