15 de mayo de 2012

Los jóvenes en pie de guerra... contra Quadri


Esta vez fue el candidato del Panal el golpeado. Para calmarse se tomó una ron con coca a la salida del recinto.
 

14 de mayo de 2012

Buscaglia: Reta a Javier Duarte ,debe desmantelar las redes criminales que operan en Veracruz.

Ejercito Mexicano están arriesgando sus vidas sin ningún sentido en la medida en que la clase politica no haga acuerdos.

Durante su pasada visita a Xalapa, el ex consultor de la ONU, Edgardo Buscaglia, lanzó un reto al gobernador Javier Duarte de Ochoa: si quiere pasar a la historia, debe comenzar el desmantelamiento de las redes criminales que operan en Veracruz. No hacerlo sólo empeorará las cosas e incrementará la violencia.

En un diálogo con periodistas el experto señaló que el gobierno de Veracruz no debe esperarse a que el próximo presidente o presidenta del país remedie la situación, tampoco que lo haga la Marina o el Ejército Mexicano. Mucho menos que adopte una “paz mafiosa”, como la que imperó con su antecesor en el cargo, Fidel Herrera Beltrán.

Para el experto la única salida debe ser un gran político en Veracruz que haga posible el desmantelamiento de los negocios criminales.

“Yo llamaría al señor gobernador Duarte a que llame inmediatamente a sus adversarios más extremos y a sus aliados más cercanos, a que acuerde ya mismo una serie medidas básicas para comenzar a desmantelar la estructura criminal que existe en Veracruz y que existe en la economía legal”.


“Llamaríamos al gobernador Duarte tener un rol histórico, que se le recuerde por muchos años y que comience a tomar medidas que van a beneficiar a sus hijos y nietos, porque en la medida en que se continúe con el uso político que estamos viendo en el estado, se va a agravar violencia”

Buscaglia ejemplificó que recientemente platicaba con jueces en Chihuahua quienes se han topado con que hay cinco cervecerías de esa entidad que estarían ligadas con el Cártel de Juárez, pero no pueden hacer una investigación patrimonial ni decomisarles sus recursos.

“¿Porqué no las investigan y les decomisan sus recursos?, les pregunté y me respondieron: ‘tú estás loco, yo tengo familia, no puedo irme contra el Cártel de Juárez si nadie me defiende’”.

“No podemos pedirle a los fiscales que arriesguen sus vidas, que les decomisen sus bienes físicos y patrimoniales que les ayudan a los grupo criminales a moverse, a producir, si no hay este respaldo de la clase política para hacer su trabajo”.

Buscaglia previno también a las autoridades de caer en la trampa de que una disminución de la violencia, por la prevalencia de uno u otro grupo, resolverá el problema.

El problema, dijo, “está más allá de la violencia”.

“Todo esto no desaparece simplemente porque bajen los homicidios. Los homicidios pueden bajar bajo un una paz mafiosa, como la que prevaleció en Veracruz en la administración anterior cuando los niveles de violencia no eran tan altos”.

“En esos momentos había una paz mafiosa, había acuerdos entre autoridades y grupos criminales. Eso no es una solución sustentable, sostenida para Veracruz. Llamamos al gobernador Duarte a que tome estas medidas que venimos mencionando para poder atacar la cloaca de corrupción política-empresarial, hay que quitarle la infraestructura operativa a los grupos criminales que están operando hoy en Veracruz”.

“Incluso, operan grupos criminales de diferente orden: incluido grupos criminales asiáticos, no nos quedemos solo con la caricatura de Zetas y Sinaloa, son mucho más que eso”.


“Digamos que el gobernador Duarte tiene mucho trabajo y va a estar bastante entretenido si quiere ser un buen político: necesita primero un gran pacto y acuerdo político para tomar medidas puntuales y se verá un gran progreso en el corto plazo”. No hacerlo, alertó Buscaglia, sólo fortalecerá a los grupos criminales y tarde o temprano se desatará una mayor violencia.
En el caso de Veracruz, Buscaglia señaló que el gobernador no puede esperar a que llegue un nuevo presidente o presidenta a Los Pinos para que combata el problema o que las Fuerzas Armadas lo sigan haciendo en las calles. “La Marina no es la solución. Si no hay un acuerdo político, los funcionarios de la Marina están arriesgando sus vidas sin ningún sentido en la medida en que la clase política no los acompañe”.
“Eso le incrementará los costos a los grupos criminales y hará que Veracruz sea un negocio menos tentador, porque hoy Veracruz es un gran negocio para los grupos criminales, se trafica con seres humanos, drogas, armas, todo tipo de bien o servicio ilícito. Atacando directamente a la infraestructura económica se ataca también a las campañas políticas con vistas a purificar un poco más las próximas elecciones, los procesos electorales”.

Quadri, el candidato de las mentiras

El aspirante presidencial por el PANAL, Gabriel Quadri. UN GRAN MENTIROSO
Juan Carlos Cruz y Arturo Rodríguez
 
Foto: Hugo CruzAunque insiste en deslindarse de los políticos y presentarse como un simple ciudadano preocupado por la ecología, lo cierto es que Gabriel Quadri, el candidato del Partido Nueva Alianza a la Presidencia de la República, no es lo uno ni lo otro. Está rodeado de fantasmas por las tropelías cometidas en perjuicio de comuneros de varias entidades del norte del país, cuando fue titular del Instituto Nacional de Ecología, y por el de la propia Elba Esther Gordillo, la dueña del partido que lo impulsa. A lo sumo, Quadri es un político de extrema derecha, un neoliberal pragmático.
 
MÉXICO, D.F. (Proceso).- La trayectoria de Gabriel Quadri, aspirante presidencial del Partido Nueva Alianza (Panal) que controla la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo, desmiente sus banderas de “candidato ciudadano”, “ambientalista” y “académico”.
 
Luego del debate entre los cuatro candidatos presidenciables, la panista Josefina Vázquez Mota ha sido la única en fijarse en él. Y lo hizo sólo para señalar que su patrona es la maestra, dueña del partido que lo postula y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
 
Crecido, aun cuando los demás candidatos le hicieron el vacío pese a las puyas que les lanzó calificándolos peyorativamente de políticos, poco se ha dicho sobre el pasado de Quadri.
 
Pese a que se presentó como ciudadano y dijo que no es un político, se desempeñó como alto funcionario en el gobierno de Ernesto Zedillo, cuando estuvo al frente del Instituto Nacional de Ecología (INE), cargo de indiscutible envergadura política.
 
Desde hace 17 años, organismos ciudadanos y ambientalistas lo señalan como corrupto y lo consideran un político pragmático, de extrema derecha y ecocida. Sus acciones, sostienen, provocaron daños ambientales, erogaciones millonarias al Estado mexicano, malformaciones en niños de San Luis Potosí y contaminación de agua en territorios del norte del país.
 
El pasado 27 de abril, en la Ciudad de México, Quadri presumió en la Casa Lamm que ninguno de los contendientes presidenciales sabe de medio ambiente y sustentabilidad como él.
 
“El día que quieran les doy clases de sustentabilidad. Difícilmente otro candidato sabe más de ese tema que yo. Perdón que lo diga con arrogancia, pero eso sí lo puedo decir: ningún otro candidato está tan preparado como yo.”
 
Quadri era el menos conocido de los aspirantes –si acaso se sabía que ocupó algunos puestos en la burocracia, en la academia y en el sector privado– hasta el debate del domingo 6, tras el cual se le evaluó como una “sorpresa” por las ideas y críticas que expuso ese día.
 
Su primer puesto público fue en el INE, donde se mantuvo como director de 1994 a 1997, en el sexenio zedillista y al amparo de la entonces titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnap), Julia Carabias.
 
Trabajó en el Banco de México y fue director de la empresa EcoSecurtities. También fue académico en la UNAM, el ITAM y la UIA.
 
De 1998 a 2003 trabajó para el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) como director general del Centro de Estudios del Sector Privado para el Desarrollo Sustentable. Luego fundó su propia consultoría, denominada SIGEA Carbón, que tiene la misma línea que EcoSecurtities.
 
No obstante su largo paso por la burocracia, desde el inicio de su campaña presidencial viaja en una combi enarbolando las banderas de “candidato ciudadano”, “académico” y “ambientalista”. Incluso inició su proselitismo en los arrecifes de Veracruz, donde buceó para resaltar que México no tiene políticas de mares”; también ha dicho que el país carece de políticas públicas de ciudades, de aguas, y que las propuestas para la preservación ecológica son escasas.
 
Y aun cuando insiste en que él no es político, el martes 8, cuando visitó la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, una alumna le dijo, diccionario en mano:
 
“Usted ha dicho que es ciudadano y los demás son los políticos de siempre. Según el diccionario, político es aquel que interviene en los asuntos del Estado y en los negocios del gobierno. Entonces usted, desde que aceptó la candidatura de su partido, se convierte en un político.”

Quadri repuso: “Me agarraron en curva. Está bien. Sí, soy un político, pero lo soy desde hace mes y medio. No soy un político de siempre, soy un político nuevo que está haciendo una candidatura nueva”.
 
Los negocios públicos
 
El involucramiento de Gabriel Quadri en negocios públicos data de por lo menos tres lustros, cuando fue director del INE y grupos de ciudadanos afectados por sus decisiones lo cuestionaron, en particular por la instalación del tiradero tóxico aprobado por él en San José de la Paila, en Coahuila.
 
Campesinos de una comunidad asentada en Parras de la Fuente, colindante con General Cepeda, en esa entidad pidieron el apoyo a Jesús González Schmal, quien encabezó la defensa jurídica de los agraviados por el entonces funcionario del INE.
 
“La labor de Quadri (en ese instituto) fue pavorosa. Fue él quien autorizó el establecimiento de un Centro Integral de Manejo y Aprovechamiento de Residuos Industriales (Cimari), cuya función era reciclar o inhibir desechos tóxicos, pero que no eran más que un tiradero”, relata González Schmal.

La autorización fue combatida por los colonos y el alcalde de General Cepeda, ya que investigadores de diferentes universidades determinaron que se provocaría un grave daño ambiental que afectaría no sólo a la comunidad, sino a la ciudad de Torreón, a unos 200 kilómetros, por los cauces naturales del agua.
 
A través de la empresa Servicios Ambientales de Coahuila (SAC) conformada en Nuevo Laredo, Tamaulipas, sobre todo con inversionistas estadunidenses, el Cimari se apropió de 30 mil hectáreas ejidales y se instaló en una zona estratégica, a pocos kilómetros de la ruta del ferrocarril a la Ciudad de México y de dos carreteras.
 
Quadri litigó como titular del INE para que no se reconociera personalidad jurídica al ayuntamiento que negaba la autorización. Y lo logró. Sin embargo, luego de seis años de litigios, el municipio ganó el juicio de nulidad 6117/03-17-06-4/541/04-PL-06-04-RF del Tribunal Superior de Justicia Fiscal y Administrativa, que dejó sin efectos la autorización del INE.
 
Desde la solicitud de permiso que pidió la SAC quedó claro que su propósito era importar desechos estadunidenses, incluso presentó una lista de 15 empresas estadunidenses que serían sus clientes, entre ellas Halliburton, Chevron, Caterpiller, Dupont y Whirpool.

Según González Schmal, quien busca un escaño en el Senado impulsado por el Movimiento Progresista, la empresa se quejó de haber invertido 25 millones de dólares, pero en el lugar no había inversión física.
 
“Esa inversión fue seguramente para comprar los permisos que Quadri les pudo haber facilitado. Con el movimiento dejamos en la cuerda floja a Quadri, quien ya tenía problemas por el confinamiento de Guadalcázar en San Luis Potosí. Julia Carabias (titular de la Semarnap) tuvo que echarlo”, dice.

Añade: “Es necesario saber quién es Quadri, quien ahora se rasga las vestiduras y se dice ciudadano honrado y académico. En realidad es un vividor, un negociante que está lucrando con el tema ambiental; es un hombre muy peligroso”.
 
Cuando González Schmal dio parte de esta información en el noticiario radiofónico de Carmen Aristegui el viernes 11, Quadri reaccionó de inmediato e intentó descalificarlo: “Van a empezar a buscar detalles de mi vida personal. Son los políticos de siempre, va a haber más virulencia. Hay que estar preparados”.
 
Dijo que González Schmal, a quien calificó como un político tradicional, fue el responsable de que el Cimari no se instalara, por lo que ahora los residuos tóxicos van a ríos y cañadas.

Lo cierto es que cuando era titular del INE, a través del Oficio BOO.E.21.4722/97, la Comisión Nacional del Agua recomendó al organismo ambiental que no autorizara el Cimari porque los mantos freáticos estaban a 18 metros de profundidad.
 
Un ecocidio vigente
 
Los señalamientos contra Quadri no son nuevos. En los noventa, grupos campesinos y ciudadanos de Nuevo León lo denunciaron por el confinamiento de Residuos Industriales Multiquim, S.A. de C.V. (Rimsa), que se mantiene en operación a pesar de las múltiples anomalías registradas desde que inició sus operaciones.
 
La historia de Rimsa data de mediados de los ochenta, cuando confinó de manera inadecuada miles de toneladas de basura tóxica en Espinazo, Nuevo León. Luego, en 1987, con el huracán Gilberto, la crecida barrió el sitio de manera que los tambos quedaron regados a varios kilómetros.

Sin embargo pudo instalarse en el Cañón de San Bernabé, en Mina Nuevo León. La afectación motivó una respuesta ciudadana que exigió a las autoridades ambientales la clausura sin conseguirlo.
 
De acuerdo con Raúl Rubio Cano, el periodista que documentó el caso, Rimsa confinó de manera tan irregular que el ganado comenzó a morir, mientras que los campesinos eran despojados de sus tierras por la empresa. Los que se resistían a vender fueron privados de acceso a sus estancias con hombres armados. El INE de Quadri desdeñó las denuncias.
 
Rubio Cano consiguió un estudio realizado por el Texas Center for Policy Studies sobre ese caso, que incluye datos de 1994:

“Rimsa dispone de instalaciones para tratamiento, reciclaje, disposición y mezcla de combustibles. Debido a que la información en México sobre la cantidad generada y lugar en donde se manejan los residuos es bastante limitada y, en su mayoría, no reportada, no es posible determinar exactamente la cantidad procesada y dispuesta por esta empresa.

“De todas formas, Rimsa sostiene que sus instalaciones son capaces de tratar entre 600 mil y 800 mil toneladas de residuos peligrosos al año. El INE reporta la capacidad mensual de disposición de Rimsa como 100 mil toneladas.”
 
Los problemas con la empresa continuaron pese a la resistencia ciudadana. Las seguridades brindadas por las autoridades ambientales y la pasividad de las locales, dio paso a un desastre ambiental, cuando Pemex contrató el confinamiento para depositar en Port Arthur Texas residuos de hexaclorados (altamente cancerígenos) que no llevó a Texas, sino que trasladó desde el Complejo Pajaritos, en Veracruz, hasta las instalaciones de Rimsa. En el trayecto se derramaron.

Lo anterior derivó en una sanción consistente en prohibir la contratación por dos años de Rimsa en todo el gobierno federal, publicada el 25 de julio de 2001 en el Diario Oficial de la Federación.
 
“Lo más grave es que Quadri puso en peligro toda la zona metropolitana de Monterrey”, dice Rubio. Hasta hoy Rimsa sigue operando.

Neoliberal pragmático

En el altiplano central potosino, un vertedero tóxico operado primero por la empresa mexicana Confinamiento Técnico de Residuos Industriales, S.A. de C.V. (Coterin), y después por la estadunidense Metalcald, provocó un severo daño ambiental que derivó en malformaciones de niños de comunidades aledañas al tiradero.
 
Propiedad de la familia Aldrett de León, a Coterin se le había suspendido otro tiradero en Mexquitic, San Luis Potosí, donde enterraron 70 mil toneladas de desechos tóxicos. Nadie los detuvo. En 1990, mediante engaños, la firma hizo perforaciones al predio La Pedrera, una superficie de 814 hectáreas, localizado en el municipio de Guadalcázar.
 
A los pocos días sepultaron miles de tambos con residuos peligrosos, muchos de origen desconocido. En un año había ya 55 mil tambos, con 20 mil 500 toneladas de desechos industriales y 170 toneladas de medicamentos caducos.

Las lluvias de 1991 sacaron a flote el problema. El agua se llevó los tambos que contaminaron la represa de abastecimiento de parcelas de la comunidad. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió la recomendación 21/92 sobre ese caso, por lo que la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología (Sedue, antecedente de la Semarnat) clausuró el tiradero.

Al año siguiente, Metalcald, cuyo inversionista principal era el estadunidense Grant Kesler, se asoció con la empresa Environ Technologies Inc., con sede en Utah, que en junio de 1993 adquirió Cotrin, no obstante que el gobierno estatal les recomendó no invertir en La Pedrera porque el sitio era geohidrológicamente inadecuado.
 
En esa transacción participaron funcionarios como Humberto Rodarte Ramón, de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, quien había clausurado el tiradero. Rodarte recibió una comisión de 100 mil dólares. En 1999 la Semarnat lo denunció por la vía penal.
 
El caso está documentado en el libro Enfrentando la globalización, publicado por Porrúa en 2003. El primer capítulo, titulado “El conflicto del basurero tóxico en Guadalcázar”, fue escrito por Fernando Bejarano, coordinador de la investigación.
 
Pese a las recomendaciones, la Semarnat y el INE favorecieron a Metalcald para que reabriera el tiradero. En un convenio la empresa se comprometió a efectuar una auditoría ambiental, que se realizó entre finales de 1994 y principios de 1995. Según el estudió, el sitio era apto para la reapertura.

En entrevista con Proceso, Bejarano sostiene que la auditoría se hizo a modo para que Metalcald volviera a operar, legitimada por el INE de Gabriel Quadri y de la Profepa. La empresa sobornó inclusive al gobernador Horacio Sánchez Unzueta y a varios regidores.

Y aunque Sánchez Unzueta declaró la zona Área Natural Protegida, Metalcald argumentó, ante el arbitraje comercial del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que fue una “expropiación indirecta” de su inversión y ganó el litigio. El Estado mexicano debió pagar 16 millones de dólares de indemnización a la empresa.
 
Bejarano, quien hoy coordina proyectos en la Red de Acción y Plaguicidas en México (Rapam), tuvo acceso al expediente del litigio por la demanda comercial interpuesta por Metalcald, en la que se acreditó que la empresa ni siquiera tenía experiencia en el ramo e infló su experiencia mediante un juego de imagen para atraer inversionistas. El entonces titular del INE, Gabriel Quadri, fue quien la ayudó.
 
Bejarano remata: “Como ambientalistas no reconocemos su trabajo. Es un ambientalista de extrema derecha, un neoliberal pragmático que no se ha preocupado nunca por la salud de las personas ni por el medio ambiente”.

Campaña de Peña Nieto: focos de alarma en Oaxaca, Veracruz, Morelos, Tabasco y Chiapas

PREOCUPADO, CAE DE SU PEDESTAL...
Jesusa Cervantes y Jenaro VillamilMÉXICO, D.F. (Proceso).- “¡Es imposible!”, exclamaron en abril último los integrantes del equipo de campaña de Enrique Peña Nieto cuando en una junta analizaron los resultados de las encuestas encargadas a tres despachos: existe el riesgo de que el candidato presidencial del PRI pierda en los estados de Oaxaca, Veracruz, Morelos, Tabasco y Chiapas. El peligro se acentúa debido a la cauda de resentidos que dejó en esas entidades la repartición de candidaturas al Congreso de la Unión.




Al mismo tiempo que el candidato del PRI a la Presidencia, Enrique Peña Nieto, se encontraba el 11 de abril en la Alameda de León, en Oaxaca, y se esforzaba por acercarse a sus simpatizantes para tomarse la foto con ellos, burlando incluso a su propio equipo de seguridad, su “grupo compacto” de campaña se reunía en la Ciudad de México para detectar los focos rojos donde existe el riesgo de que el partido pierda la elección del 1 de julio.

“¡Imposible!”, exclamaron los asesores peñistas, tras detectar que una de esas entidades era precisamente Oaxaca, seguida de Veracruz, Tabasco, Morelos y Chiapas. No daban crédito a lo que les revelaban los datos duros, menos todavía cuando una semana antes Peña Nieto había estado en Veracruz donde, según observó, todo iba bien.

Pero la empatía entre Peña Nieto y el gobernador de Veracruz, Javier Duarte, se alteró en las siguientes semanas a causa de la forma poco hábil del mandatario para controlar la creciente violencia, pero sobre todo por el asesinato de Regina Martínez Pérez, corresponsal de Proceso en esa entidad, la madrugada del 28 de abril en la ciudad de Xalapa.

“Lo de Regina le va a pegar fuerte a Peña y están preocupados”, comentó a este semanario un integrante del equipo de campaña del mexiquense. En esos momentos aún no se sabía de la ejecución de tres fotorreporteros veracruzanos y la empleada administrativa de un diario local.

Según él, tres encuestas elaboradas por despachos diferentes indican que en Veracruz los resultados (de la campaña del PRI) son “un desastre”, lo cual tiene alarmados a los integrantes del equipo peñista.

El 4 de abril, durante su visita al puerto jarocho, Peña Nieto tenía programada una comida con integrantes de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y otros empresarios, que se canceló de última hora. En Veracruz son varios los hombres de negocios que de manera velada o abierta han expresado su descontento con la forma de gobernar de Duarte, correligionario del candidato presidencial.

Y aun cuando el equipo compacto de Peña Nieto realizó su evaluación de la campaña del aspirante priista de manera discreta, Proceso obtuvo información de diversas fuentes que pidieron omitir su identidad y corroboró que existe alarma entre los asesores.

Uno de los consultados asegura que los focos rojos en Oaxaca, Veracruz, Tabasco, Morelos y Chiapas “se deben a conflictos de distinta naturaleza”, entre ellos las imposiciones de candidatos desde el centro, la intervención de los gobernadores y la falta de recursos para las campañas de diputados y senadores.

Quienes manejan los recursos de la campaña determinaron que del millón 120 mil pesos que le tocan a cada candidato a diputado federal, sólo se le entreguen 600 mil pesos repartidos en tres ministraciones; el resto, 520 mil pesos, se destinará a la campaña presidencial, asegura el entrevistado. Y en cuanto a los senadores, el primer círculo de Peña Nieto determinó que cedan 30% de su tiempo en medios electrónicos al candidato presidencial.

Deserciones en Tabasco

En Tabasco, uno de los bastiones históricos del PRI, sucede lo mismo que en Veracruz. La designación de Jesús Alí como candidato priista a la gubernatura fracturó la relación con los otros precandidatos y con el mandatario saliente Andrés Granier, quien apoyó a su secretario de Salud, Luis Felipe Graham, para ser el abanderado del PRI.

La rispidez entre la militancia local fue evidente durante la gira de Peña Nieto, el 26 de abril. A diferencia de otros mandatarios, Granier estuvo ausente en los actos públicos del mexiquense, con el que sólo tuvo una reunión privada.

Hasta ahora, dice a Proceso uno de los dirigentes priistas de Tabasco, Granier es de los pocos gobernadores que se resisten a dar la “cuota” de dinero para la campaña nacional. Las diferencias de Peña Nieto con sus correligionarios tabasqueños también incluyen a Roberto Madrazo, gobernador y candidato presidencial en 2006.

Durante el encuentro en el salón Gran Villahermosa, Peña Nieto trató de evadir el saludo de Madrazo y del exgobernador Manuel Andrade y tomarse la foto con ambos.

Horas antes de reunirse Peña Nieto con “empresarios y sociedad civil” en el salón Gran Villahermosa, del parque Tomás Garrido Canabal, el 26 de abril, el exsecretario de Salud Jaime Mier y Terán –quien presidía la fundación que lleva el nombre de la esposa de Madrazo: Isabel de la Parra– se sumó a los dirigentes que renunciaron al PRI para sumarse a la campaña del perredista Arturo Núñez.

Las deserciones en ese partido se han incrementado en los últimos dos meses, entre ellas las de Humberto de los Santos, José Cruz Castellanos, Fernando Valenzuela, Manuel Rodríguez, Ángel Solís, Melvín Izquierdo, Alcides Mena y Miguel Vera, entre otros.

Y aun cuando el dirigente interino del PRI tabasqueño, Francisco Herrera León, y el delegado del CEN del partido, Rafael Oceguera Ramos, intentan minimizar las renuncias, la prensa local ha señalado que el descontento se originó sobre todo por el poder que ha adquirido el auténtico operador de la campaña del mexiquense en Tabasco: Benito Neme Sastre.

Socio y amigo de Peña Nieto, Neme Sastre es hijo del exgobernador Salvador Neme Castillo y el principal impulsor de la carrera de Jesús Alí, cuya gestión como alcalde en Villahermosa fue tan dispendiosa como la gubernatura de Peña Nieto en materia de publicidad. De 2010 a 2011, por ejemplo, el cabildo le autorizó 20 millones de pesos, con lo que invirtió en ese rubro 250 millones de pesos, más de 10% del presupuesto anual destinado al ayuntamiento de Centro.

Descontento en Oaxaca y Morelos

Oaxaca es otra de las entidades donde las fracturas priistas fueron evidentes. Durante su visita, Peña Nieto marginó de todos sus actos públicos al exgobernador Ulises Ruiz; José Murat, quien participa en el equipo presidencial de campaña como operador en determinadas entidades, optó por cumplir un papel discreto en el único evento que organizó para el aspirante presidencial del PRI: su visita a San Pablo Guelatao, la cuna de Benito Juárez.

Peña Nieto advirtió a los dirigentes estatales, candidatos a diputados federales y alcaldes priistas que “nuestras diferencias, por legítimas que sean, no pueden distraernos (de la labor fundamental de la campaña), que es vencer en los comicios presidenciales de 2012”.

E insistió: “Vamos a ganar la presidencia, pero también queremos y seremos mayoría en la Cámara de Diputados y en el Senado; que nadie tenga excusa ni pretexto para estar al margen”.

No obstante el exhorto, los golpes bajos continuaron. Durante el mitin central, realizado en la Alameda de León el 11 de abril, una treintena de jóvenes del grupo Voces Oaxaqueñas Construyendo Autonomía y Libertad (VOCAL) concentrados en la contraesquina de la catedral de Oaxaca comenzaron a gritarle: “¡Fuera, fuera!”, mientras el candidato se subía a las bocinas para saludar a los poco más de 10 mil asistentes a la concentración. Y aunque el mexiquense ignoró las protestas, los medios locales consignaron al otro día la protesta.

En esa gira, Peña Nieto se comprometió a “consolidar la red hospitalaria de Oaxaca” para brindar mejores servicios de salud, uno de los rubros más sensibles en la entidad, sobre todo por los escándalos de corrupción en los que estuvo implicado Ulises Ruiz durante su administración, que aún hoy es investigada por Gabino Cué.

Al exmandatario se le abrió un expediente por dejar inconclusas 102 obras de hospitales y por un presunto desvío de recursos en obras públicas y servicios de salud que rebasan los 4 mil millones de pesos.

Las inconformidades y fracturas al interior del priismo de Morelos también afectan la campaña de Peña Nieto, lo que prendió los focos rojos en el CEN priista.

Las disputas entre los simpatizantes del candidato a la gubernatura Amado Orihuela Torres y Manuel Martínez Garrigós, quien perdió la contienda interna y hoy está al frente de la lista de diputados plurinominales, hizo que Peña Nieto cancelara su primera visita a la Plaza de Armas de Cuernavaca el 10 de abril, fecha del aniversario luctuoso de Emiliano Zapata.

“El aplazamiento no se debe a conflictos internos, que existen en cualquier partido vivo”, justificó Jorge Meade Ocaranza, coordinador de la campaña presidencial en el estado.

Peña Nieto visitó Morelos dos semanas. Se dirigió al Centro de Convenciones de Xochitepec, donde en medio de estrictas medidas de seguridad y en un evento cerrado tomó protesta a Orihuela. No obstante, alrededor de 200 simpatizantes de César Cruz Ortiz, aspirante derrotado a la alcaldía de Temixco, protestaron contra Martínez Garrigós durante el acto, azuzados por el propio Orihuela.

Dos semanas antes, en el mismo sitio, fueron detenidos 15 jóvenes que protestaban por “las imposiciones” del PRI en las candidaturas. Llevaban 20 granadas.
 
Estructura paralela

El 11 de enero Enrique Peña Nieto anunció la conformación de su equipo de campaña. A Luis Videgaray se le designó encargado de vinculación con sectores empresariales, de evaluación, coordinadores de circunscripción y de comunicación social.

En ese grupo formal incluyó a políticos cercanos a Manlio Fabio Beltrones, Beatriz Paredes y al defenestrado Humberto Moreira. Sin embargo, la verdadera conducción de la campaña es la “estructura paralela” que trae el candidato del PRI.

Su gente de confianza es la que dispone la forma en que debe distribuirse el dinero, quién recolecta apoyos entre gobernadores, qué lineamientos de defensa se esgrimen ante el IFE y quién evalúa verdaderamente la campaña.

Militantes del PRI consultados por los reporteros a condición de que se omitan sus nombres dicen que los verdaderos asesores de Peña Nieto son el exgobernador Alfredo del Mazo, quien además es su tío, y Juan Antonio González Fernández, exdirigente priista y secretario del Trabajo durante el sexenio de Ernesto Zedillo.

“A ellos es a los que escucha”, dice uno de los priistas. Y añade: “Fueron ellos quienes dijeron en una reunión que había sido un error convocar a una mesa en Tlalnepantla para enfrentar la campaña negra del PAN sobre los compromisos de Peña Nieto. (Del Mazo y González Fernández) dijeron que fue un riesgo innecesario mandar tanto al equipo formal como al informal”.

Y en el equipo compacto participan “tres luises”: Luis Videgaray, coordinador general de la campaña; Luis Miranda Nava, encargado de la recolección de fondos y de la elaboración de las listas de los candidatos al Congreso, y Luis Vega Aguilar, quien aparece formalmente como secretario de administración del CEN del PRI pero en realidad se encarga de la distribución de los recursos. También está Estefan Chidiac, el tesorero formal del PRI, quien sólo se dedica a cuadrar los gastos ante el IFE.

En la parte política operan el dirigente nacional del PRI, Pedro Joaquín Coldwell, y Miguel Ángel Osorio Chong, quien ocupa la Secretaría de Organización. Los conflictos entre el exgobernador de Hidalgo y Videgaray se han agudizado por las ambiciones adelantadas de ambos.

Benito Neme es el que ordena cómo, cuándo y de qué manera debe defender al partido y a su candidato ante el IFE en materia electoral. Felipe Solís Acero, experto en temas electorales y allegado del senador Manlio Fabio Beltrones, opera “lo que Neme ordena”; lo mismo hace Sebastián Lerdo de Tejada, representante oficial del PRI ante el IFE.

Para la evaluación y seguimiento de la campaña, Peña Nieto nombró a la diputada María Esther Sherman, quien no realiza las tareas propias de este cargo, aun cuando tiene asignado un equipo. En los hechos, el verdadero evaluador es Alejandro Nieto Enríquez, un experimentado político del Estado de México que fue compañero de Arturo Montiel, José Antonio González Fernández y Manuel Cavazos Lerma en la LV Legislatura federal. Además, Nieto, el hombre de mayor confianza de Videgaray, ocupa formalmente el cargo de secretario técnico de la coordinación general de campaña.

Otro ejemplo de estructura paralela es Jorge Carlos Ramírez Marín, gente de Beatriz Paredes que oficialmente es vicecoordinador general de la campaña y se encarga del área de comunicación social. Sin embargo, quien pone en marcha toda la estrategia es el joven Aurelio Nuño, egresado de la Universidad Iberoamericana.

Una de las posiciones importantes en ese equipo es la que ocupa el diputado por Nuevo León Ildefonso Guajardo, encargado de vinculación empresarial, aunque es el mexiquense Enrique Jacob Rocha, quien fungió como secretario de Desarrollo Económico durante la administración de Peña Nieto, el que realiza esa labor.

Al interior del PRI se asegura que Osorio Chong tiene un gran apoyo de Peña Nieto. Quien fuera su secretaria de Finanzas en el gobierno de Hidalgo, Nubia Mayorga Delgado, por ejemplo, acompaña a Luis Miranda cuando éste viaja en busca del respaldo económico de los gobernadores del PRI; además, su esposa, Laura Vargas, le lleva parte de la agenda a la actriz Angélica Rivera y se maneja como su “secretaria particular”.

El dinero

Luis Vega Aguilar, secretario de administración del PRI, se encarga de controlar los recursos del partido. Priistas entrevistados sobre la forma en que Peña Nieto pretende “darle la vuelta” a los gastos de campaña en el IFE detallan que Vega Aguilar diseñó una estrategia consistente en que parte de los recursos programados para las campañas al Congreso se desvíen a la de Peña Nieto, aunque certificados “como si hubiesen sido para diputados y senadores”.

En lo que respecta al hecho de que a los candidatos a diputados federales sólo se les entregarán 600 mil pesos del millón 120 mil que les corresponden para sus campañas, uno de los priistas entrevistados explica: “si multiplicas los 520 mil pesos (restantes) por los 300 candidatos a diputados, tienes un remanente de 156 millones para la campaña del candidato presidencial. Por eso se ven tantos anuncios y dicen en la dirigencia que no se rebasarán los topes de campaña. Lo que no aclaran es que están redistribuyendo el mismo dinero restándole a los diputados casi 50% de lo que les corresponde”.

La fuente comenta que en el caso de los 128 aspirantes al Senado sucede lo mismo, pero indica que como el IFE fijó un tope a partir del número de votantes por entidad, ahí no se puede sacar una media del dinero que se desviará hacia la campaña de Peña Nieto.

Heliodoro Díaz Escárraga, coordinador de la campaña en Oaxaca, admite que no les llegan recursos suficientes y aclara que toda la propaganda, aun la pinta de bardas, debe ser autorizada por el equipo de Peña Nieto. Sostiene asimismo que el asunto del financiamiento se da entre el voto duro del PRI, “que está muy acostumbrado a recibir sus apoyitos”. Y añade: “Nosotros vamos dejando claro que ese no es el tema; el tema ahora es la participación”. (Con información de los corresponsales Regina Martínez, Pedro Matías y Armando Guzmán.)

Los engañados

Buscan liberarse del engaño en el que sienten haber vivido dentro de un sistema que corrompe y manipula. Peña Nieto lo vivió en carne propia y no fue en la UNAM sino en la Ibero, uno de los corazones nacionales de la educación superior de privilegio.

Por Ramón Alberto Garza
"…La única cosa que todos tenemos en común es que somos el 99 por ciento de los que no tolerará más la codicia y la corrupción del 1 por ciento", Occupy Wall Street
 
El 15 de mayo de 2011 brotó en España el 15-M. Es el movimiento que hoy se conoce mundialmente como de Los Indignados.
 
Ocuparon emblemáticos sitios como la Plaza del Sol, con protestas pacíficas para buscar una democracia participativa, lejos del bipartidismo y de las corporaciones bancarias a las que culpan de la crisis financiera española.
En el fondo, los estudiantes buscaban eludir el engaño mediático que terminaría por ocultar en el micrófono sus réplicas al candidato. Dicen que están cansados de la versión “oficial”. El ejemplo cundió, y para el 17 de septiembre de 2011 la fiebre de las protestas ciudadanas se instaló en el corazón de Nueva York, con el movimiento Occupy Wall Street.

Y desde entonces, en múltiples latitudes del planeta, se alzan las protestas públicas de ciudadanos cansados del sistema que privilegia a unos cuantos y lesiona a los muchos.
 
Bajo esta perspectiva, de la cual México no puede sustraerse, es que hay que ver lo que está sucediendo en las universidades con los candidatos presidenciales del 2012.

Si un nombre podría darse a estos movimientos universitarios es el de Los Engañados. Porque lo que buscan es liberarse del engaño en el que sienten haber vivido dentro de un sistema que corrompe y manipula.
 
Enrique Peña Nieto lo vivió en carne propia el viernes. Y no fue en la UNAM que repudió el 14 de marzo de 1975 a Luis Echeverría. Fue en la Ibero, uno de los corazones nacionales de la educación superior de privilegio.

Es cierto que analizando formas, no se invita a un candidato -del partido que sea- para repudiarlo y expulsarlo de esa manera. En un claustro académico se le escucha y se le confronta con argumentos, con inteligencia.

Pero también es cierto que, en el fondo, los estudiantes buscaban eludir el engaño mediático que terminaría por ocultar en el micrófono sus réplicas al candidato. Dicen que están cansados de la versión “oficial”.

Por eso decidieron organizar desde un día antes una sonada protesta que no pudiera ser ignorada. Como la de Los Indignados o los de Ocuppy Wall Street. Para decir ya basta de engañar con el discurso. Los Engañados están de pie.
 
Son los mismos engañados del Tecnológico de Monterrey que esperan la verdad sobre los estudiantes de excelencia, acribillados el 19 de marzo de 2010 a las puertas de esa institución.
 
Ahí podría estar una de las explicaciones de la bienvenida apoteósica con los gritos de ¡Presidente!, ¡Presidente!, ¡Presidente!, a Andrés Manuel López Obrador en el campus del Tec de Monterrey.
 
Es la misma institución en la que Enrique Peña Nieto puso como condición para presentarse un teleprompter y 900 asientos para los suyos. Se le canceló.
 
Por eso vale la pena reflexionar si este naciente movimiento estudiantil en universidades privadas no es sino un reflejo de Los Indignados o de Ocuppy Wall Street.

Hombres y mujeres jóvenes que exigen una democracia participativa, lejos del bipartidismo y del corporativismo al que culpan de que México no avance.

11 de mayo de 2012

Peña Nieto enfrenta fuertes críticas en la Ibero

Por: Jesús Cárdenas

◦El aspirante presidencial salió del auditorio universitario por la parte trasera

Los universitarios cuestionaron a Peña por su relación con Elba Esther Gordillo, la deuda millonaria en Coahuila y lo que consideraron una mala gestión como gobernador del Estado de México

CIUDAD DE MÉXICO (11/MAY/2012).- La presentación del candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto, en la Universidad Iberoamericana transcurrió en medio de fuertes cuestionamientos y protestas dentro y fuera del auditorio José Sánchez Villaseñor.
 
Peña Nieto tuvo que enfrentar cuestionamientos sobre su relación con la líder magisterial, Elba Esther Gordillo; la deuda millonaria en Coahuila de Humberto Moreira; su relación con las empresas de televisión y lo que los universitarios consideraron una mala gestión como gobernador del Estado de México.
 
El candidato del PRI dijo entender la "pluralidad y efervescencia" que existe entre los estudiantes de esta casa de estudios, pero les recordó que la contienda electoral debe superar el encono y privilegiar el trabajo en unidad.
 
Durante su presentación, Peña Nieto escuchó señalamientos como el que durante su gobierno hubo violaciones a los derechos humanos en el municipio de San Salvador Atenco.

Peña Nieto dijo que era respetuosos de las posiciones y expresiones de los jóvenes universitarios.

Además, se deslindó de la líder magisterial, Elba Esther Gordillo, al señalar que son los propios sindicatos quienes eligen a sus dirigentes; en el caso de Coahuila dijo que las autoridades de procuración de justicia son las encargadas de investigar y deslindar responsabilidades, pero advirtió que cada quien debe asumir sus acciones.
 
El aspirante presidencial salió del auditorio por la parte trasera en medio de una serie de fuertes cuestionamientos y críticas.

.CRÉDITOS:El Universal / EGMO

“Colosio, el asesinato”, para que la gente piense: Bolado

El cineasta Carlos Bolado (Veracruz, 1964), quien en 1998 obtuvo siete Arieles por su película Bajo California: El límite del tiempo, regresa con un tema político sobre el misterioso crimen del candidato priista Luis Donaldo Colosio, filme que un mes antes de su estreno empieza a recibir cuestionamientos. Incluso el director denuncia que ha recibido amenazas de muerte, y acusa: “El PRI le ha hecho mucho daño a México”.
 
MÉXICO, D.F. (Proceso).- Aún no se estrena Colosio, el asesinato, la nueva película de Carlos Bolado sobre el homicidio en 1994 del candidato del PRI a la presidencia, Luis Donaldo Colosio, y ya existe polémica alrededor de ella.

Bolado revela a este semanario que su equipo fílmico ha sido amenazado por teléfono:

“Le estamos pisando los callos a alguien, son amenazas veladas. Hubo dos llamadas amenazantes. La productora Mónica Lozano, el guionista Hugo Rodríguez y todos tenemos miedo; pero hay que decir la verdad.”

Nada ni nadie lo parará:

“Hay que hablar de la historia de este país. Yo se cómo van las encuestas y van a gobernar ellos (PRI), aunque no sé si voy a volver a hacer una película. No sé si me voy a tener que ir del país.”

Aceptó el proyecto de filmar Colosio, El asesinato (Proceso 1837) porque “es importante hablar lo que se ha escondido y el PRI, que estuvo en el gobierno 70 años, cometió una gran cantidad de asesinatos políticos en todo ese tiempo” y “hay personajes que estuvieron en toda esa historia”, precisa: “Es un relato de asesinatos y crímenes de estado”.

La producción de 59 millones de pesos, según Lozano, se estrenará el 8 de junio próximo, si bien existen algunos periodistas que han acusado al proyecto de ser “propaganda política en plena coyuntura electoral”, o de que “coincide con los objetivos de Enrique Peña Nieto”, denunciando que “el productor Fernando Sariñana es concuño del actual candidato priista” y además, el filme “está respaldado por Felipe Calderón, a través del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) y los Estudios Churubusco”.

Hay más.

Un grupo de cineastas critican que “haya obtenido dinero público directo” cuando hay tres fuentes de financiamiento “con reglas claras” (Fidecine, Foprocine y Eficine) y que “toda la comunidad cinematográfica espera sus convocatorias para concursar” (Proceso 1839).

Nada de eso acepta el realizador de Bajo California, Promises, Sólo Dios sabe y Tlatelolco (éste se proyectará en los cines en octubre próximo).

“Yo no le hago un homenaje a Colosio, no es un largometraje con un fin partidista, ni tengo el gusto de conocer físicamente a Felipe Calderón ni tampoco a Consuelo Sáizar, presidenta del Conaculta, ellos no ordenaron la producción.

“Los Estudios Churubusco siempre han apoyado a películas mexicanas. En Colosio, el asesinato no participa Sariñana, quien (en cambio) sí produce mi otro proyecto, Tlatelolco, sobre el movimiento estudiantil del 68, pero no es concuño de Peña Nieto. Yo no sé nada del dinero, de eso se encarga (Mónica) Lozano, y confío mucho en ella.”

–¿No sabe usted como director de dónde proviene el dinero para el filme?

–No. Y no me importa, sólo sé que no viene del narco.

“Lo más importante es rodar el filme. Mi intención es hablar de la historia contemporánea de México y es un tema que me interesa, porque aparte de ser cineasta yo estudié sociología y ciencias políticas. Es el primer proyecto cinematográfico sobre ello, sólo sé que existe el videohome Magnicidio: complot en Lomas Taurinas, que filmó Miguel Marte en 2002.

–¿No le parece poco serio no saber dónde se consiguió el financiamiento?

–Sería poco serio tratar la película de una manera frívola y banal, y no decir la verdad o servir para fines partidistas, (pero) no puede ni aprovecharse (con la cinta) el PAN. Lo único claro es que se le pega a alguien y son los que van a gobernar. Yo doy un paso al frente y mi posición es crítica. Yo sí que corro peligro.

“El PRI ha hecho mucho daño”

Recuerda que Colosio, el asesinato es un guión que data “desde hace años”, pues Bolado lo leyó en 1999:

“Iba a ser mi largometraje después de Bajo California, y también el guión de Los capos del norte, que luego se convirtió en Amapola; pero siempre quise realizar la cinta del crimen de Colosio. Luego me enteré que Lozano compró los derechos de ese guión. Y cuando le mostré mi película sobre el 68, ella me ofreció rodar Colosio, el asesinato”.

–¿Es acaso un proyecto que ordenó Calderón?

–¡Nooo…! Uno tiene que filmar las películas cuando es posible ya filmarlas.

“Yo sí sé muy bien quién soy, sé muy bien dónde estoy parado, sé de lo que hablo. Es un largometraje duro y soy un personaje crítico. Nadie me condicionó, no hubo censura, nadie mi tiró línea. Hago la película que quería hacer y es una historia que deseo se cuente.”

–¿Qué espera al estrenar en plena campaña presidencial?

–Que la gente piense, reconsidere… El PRI le ha hecho mucho daño a México y a sus nuevas generaciones. 1994 es uno de esos años: fue la aparición pública de los zapatistas, el llamado “error de diciembre”, el asesinato de José Francisco Ruiz Massieu… Eso significaba: “¡Aquí mando yo y se chingan todos!”. Y todo esto se menciona en mi largometraje.

“Me cuesta mucho trabajo votar en este país por los especímenes que tenemos que votar. Son mesiánicos o enloquecidos, o poco inteligentes o con una historia negra de corrupción.”

En cuanto a que para obtener dineros públicos, la cinta Colosio, el asesinato no se sometió a los tres fondos reglamentados, Bolado argumenta que “no hay un buen sistema que funcione”, toda vez que “Fidecine y Foprocine no sirven” y “en este último, los que son jurados no son directores de cine”. Lo grave es que “el dinero del artículo 226 de Impuesto Sobre la Renta (Eficine) se le otorgue a Legionarios de Cristo y filmen Cristiada”, asegura con vehemencia:

“Deberían pedir una garantía de que el proyecto sea por lo menos una obra artística. ¿Cómo van a utilizar dinero de los impuestos para hacer esas cosas? Allí está el problema, Fidecine tiene muy pocos proyectos y sus jurados son gente inmiscuida en la distribución y no les interesan las cintas mexicanas, sino las gringas… ¿Que Conaculta Cine no debe existir, ni crear películas? Estoy de acuerdo. Lo que no funciona es el sistema, yo no soy responsable del financiamiento; pero sí de (lo que se ve en) la pantalla, yo dirigí a los actores, cambié los diálogos, escribí las escenas y eso es por lo que se me puede juzgar. Ni dinero tengo, soy pobre.”

Lozano: “Opiniones encontradas”
 
La filmación de Colosio, el asesinato inició el pasado 15 de enero y el rodaje duró cinco semanas. La productora Mónica Lozano no ha recibido ninguna amenaza.

Ella reconoce que exista la inquietud de por qué se produjo un largometraje como éste ahora “en tiempos electorales”, pero el guión “ya existía desde hace muchos años”, dice, “entonces colaboró el escritor, dramaturgo y periodista Vicente Leñero en él, aunque no hubo las condiciones para llevarlo a la pantalla grande”. Y asume su compromiso con los temas políticos sociales:

“Se ha demostrado este compromiso con mi vinculación en películas como El baile de San Juan, de Francisco Athié; El atentado, de Jorge Fons; El mural de Siqueiros, de Héctor Olivera o Arráncame la vida, de Roberto Sneider, en los cuales hay hechos que nos permiten reflexionar de dónde venimos, quiénes somos y ojalá formulen preguntas para ver a dónde vamos.”

Según ella, Colosio, el asesinato “va a generar manifestaciones a favor y en contra”. Sobre el financiamiento, señala que “es un proyecto muy sólido, más allá del contexto político es la historia la que convence a los productores”.

Detalla paso a paso:

“Por fortuna tengo una experiencia de muchos años y tengo socios que trabajan conmigo. Como es el caso de OBERON Cinematográfica, con sede en Barcelona y con dicha empresa llevamos ocho películas. Entonces le hablé a su representante, Antonio Chavarrías, le envié el guión y le propuse que lo hiciéramos posible… También invité a Emilio Maullé, quien vivió en Francia 25 años y conoce muy bien los mecanismos de colaboración en ese país. Incorporé a Gustavo Ángel, colombiano, e igual conoce la colaboración en su país… A Gussi-Artecinema le pido adelanto de distribución y a las empresas históricas de bienes y servicios les pido colaboración, como los Estudios Churubusco y CineColor. Es un esquema de colaboración como en todas mis películas.”

Las empresas que intervienen son: Udachi Productions (Miami, Estados Unidos), La Femme Endormie (Francia), Gaugin (Colombia) y Alebrije producciones (de Mónica Lozano) con la colaboración de Estudios Churubusco, CineColor y EFD en renta de equipo.

Y Colosio, el asesinato la mantiene contenta porque “me encanta el compromiso de todo el equipo, todos poseen una postura política y creen que debe haber cambios y se comprometen en la vida cotidiana con su quehacer para que haya esas transformaciones. Uno está aterrado, ya no se puede tener una vida normal porque se encuentra sitiado por la violencia”.

–¿Cuál es la urgencia de estrenar?

–La población de mayor frecuencia en las salas de cine se da en el verano. Y Colosio, el asesinato un thriller político que está perfectamente construido, el contexto en el que se desarrolla es tan fuerte como para compartir con cualquier otra película de Hollywood en mil 200 o mil 500 pantallas.

“Entonces, al saber que uno cuenta con la posibilidad de competir, se quiere llegar a ese lugar. Ahora, coyunturalmente hay una elección y es un tema que puede empujar a los políticos que discutan el tema, y nos contesten preguntas que allí se formulan; pero no hay otra intención”, concluye.

En Colosio, el asesinato aparece personificado por un actor el periodista Eduardo Valle, El Buho, quien falleció en Matamoros el pasado 3 de mayo.