Místicos y Terrenales
· Duarte abre su corazón: Silva su candidato
· Montano, alineado con ellos
· Impunidad como plan de gobierno.
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
Pues así es el asunto.
Javier Duarte de Ochoa ya tomo dos decisiones de largo plazo:
1. Su candidato a la
gubernatura en el 2016 es Alberto Silva Ramos.
2. No sancionará a nadie por
las irregularidades en la construcción de la infraestructura para los Juegos
Centroamericanos.
Las señales las reforzó además en Tuxpan, para que no quepa duda
de que así será, donde alabó una y otra vez a Silva y donde dijo a cada rato
que las cosas en la construcción de infraestructura para los Juegos
Centroamericanos marchan de maravilla.
¿Porqué Duarte va a impulsar a Silva?.
Porque Duarte y compañía aspiran a continuar utilizando al
estado de Veracruz como su negocio particular.
Javier Duarte volvió a sacar el nombre de su coordinador de
Comunicación Social, Alberto Silva, como posible candidato a la gubernatura de
Veracruz en el 2016, ahora que ya le quedó claro que no habrá la gubernatura de
dos años que tanto anhelaba.
Javier Duarte llegó a Tuxpan para inaugurar una pista de
canotaje y ponderó todo el tiempo a Alberto Silva.
Para remarcar su favoritismo por Silva, incluso recordó que ahí
inició su gobierno.
Pero antes de eso, desde la misma coordinación dejaron fluir
versiones de que Javier Duarte iba a apoyar a Alberto Silva rumbo a la
gubernatura, lo cual se confirmó cuando a los que tienen relaciones con el
gobierno del estado les empezaron a exigir –ese es el termino correcto, porque
no fue una petición- que debían pronunciarse por el exalcalde de Tuxpan.
Alejandro Montano es de los que menciona en abierto que Alberto
Silva debe ser el candidato al gobierno del estado para el próximo sexenio.
El diputado federal se presenta todavía como el representante
del alemanismo en Veracruz, lo que tiene un cierto peso, porque Miguel Alemán
le apostó incluso recursos a Javier Duarte, junto con Carlos Slim.
La muestra de cómo Alemán y Slim han invertido y pagado a Javier
Duarte, son todas las facilidades que se les dieron para implantar el proyecto
“Nuevo Veracruz” que empezó con un centro comercial insertado en donde estuvo
la fábrica de Aluminio, en la que Miguel Alemán era socio mayoritario; la idea
es hacer todo un desarrollo poblacional en esa parte del municipio de Veracruz,
pero se les olvidó el pequeño detalle de habilitar vías de comunicación, lo que
provocó que se congestione la antigua carretera libre de Veracruz a Paso de
Ovejas.
¡Pero eso no importa, porque están bien con el gobernador!.
Carlos Slim ha querido mantener a Javier Duarte con buena imagen
e incluso lo ha apoyado en sus medios de difusión, más que nada porque no
quiere que se le ligue a un gobierno con mala presencia.
Pues bien, en ese tenor Alejandro Montano se apuntó para la
gubernatura de dos años, primero, y luego ha dejado correr la versión de que
Alberto Silva es quien más le conviene a Veracruz para el próximo sexenio.
Ahora, ¿realmente Carlos Slim y Miguel Alemán tienen tendencia
por Alberto Silva?.
Se ve difícil, muy difícil.
En fin.
Las versiones a favor de Alberto Silva incluyen el difundir una
reunión que supuestamente los Yunes rojos y los azules tuvieron, porque están
en un acuerdo para que uno de ellos sea el próximo gobernador de Veracruz,
tratando de mostrar la situación como un asunto de familia.
Pues bien, Alberto Silva es el candidato de Javier Duarte, y
Alejandro Montano es el primero que se forma a su lado.
La otra parte, la de mantener la impunidad ante los actos de
corrupción, es algo que también Javier Duarte ya dejó en claro.
En la inauguración de la pista de canotaje en lugar de anunciar
castigos o acciones contra quienes esquilmaron los recursos, ponderó los
trabajos y dijo que todo –absolutamente todo- avanza bien.
Entonces, los que nada hicieron y sólo se llevaron el dinero,
nada van a pagar.
¿Y porqué habría de ocurrir de otro modo?.
Los dos grandes casos de corrupción que se han evidenciado y que
incluso el mismo Javier Duarte remarcó, sólo merecieron un señalamiento
publico, para ahora volverlos a jalar al grupo de cercanos y promoverlos
incluso como posibles candidatos a algún puesto de elección popular.
Así pues, si Gabriel Deantes Ramos, primo y cercano del
coordinador de comunicación social de Javier Duarte, Alberto Silva Ramos, se
plantea como el gran operador electoral para manejar los comicios el próximo
año por parte de los duartistas, ¿por que lo habrían de sancionar por las
tropelías que antes se le anotaron?.
Si Edgar Spinosso Carrera pudo saquear las arcas de la
Secretaría de Educación y hoy se le menciona como el representante del
duartismo para la zona de Martínez de la Torre, ¿porqué habrían de sancionar a
las constructoras?.
Vaya, si Alberto Silva sigue manejando el recurso de
comunicación social pagando facturas a los medios propiedad de los integrantes
del circulo de poder (esos mismos que no quieren soltarlo y buscan seguir
medrando en el estado por tiempo indefinido) y de aquellos que están manejados
por socios y familiares, ¿porqué habrían de hacer algo contra las empresas
constructoras?.
Además, si algo de eso hiciese Javier Duarte y lo aplicase a
todos los casos de mal manejo con las constructoras, también tendría que barrer
con el mismo Edgar Spinoso, y con Tarek Abdala, que igualmente tuvo relaciones
simultáneas y documentadas con tres empresas constructoras.
O incluso contra su ahora Secretario de Infraestructura y Obras
Públicas, Gerardo Buganza, quien acusó que la empresa constructora
Concesionaria Túnel de Coatzacoalcos, la que debía hacer el túnel sumergido,
incumplió con el contrato, pero la cual se fue con total impunidad, porque el
mismo Buganza nunca hizo las promociones para que se le sancionaran.
Así pues, ¿porqué habría Javier Duarte de cambiar de actitud y
sancionar a unos por algo que dejaron de hacer si antes no lo ha hecho?.
Actitudes como está son las que provocan que muchas personas
piensen que está coludido con quienes cometen irregularidades de forma impune.
¡Que demuestre que no lo está!