Ciudad de México, 15 de marzo (SinEmbargo).– El Gobernador priista
de Veracruz Javier Duarte de Ochoa ha mantenido a la alza, durante los
cuatro años de su administración, los peores indicadores: la violencia y la
deuda pública.
Duarte de Ochoa tomó posesión el 1 de
diciembre de 2010 y desde entonces y hasta ahora, la entidad ha vivido entre
episodios de violencia. Apenas el pasado 4 de marzo, en el municipio de
Medellín del Bravo donde en enero fue secuestrado y asesinado el periodistaMoisés Sánchez Cerezo, el Mando
Único tomó control de la seguridad, debido a la incidencia delictiva en esa
región.
Recientemente,
el gobierno de Duarte de Ochoa también ha sido criticado por los
recortes a las finanzas públicas del estado, particularmente en programas
sociales, y pese a que apenas el jueves pasado el Gobernador aseguró que la
entidad no está en quiebra, las cifras oficiales de la deuda de la entidad
dicen lo contrario: el mandatario priista casi ha duplicado el monto de la
deuda con la que recibió la administración local en 2010.
LA VIOLENCIA
En
Veracruz, entre diciembre de 2013 y junio de 2014, se localizaron más de 50
cadáveres en por lo menos 14 fosas clandestinas, tanto en la zona pesquera de
Alvarado, como en la cuenca del Río Papaloapan.
Según
datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública
(SESNSP), la entidad cerró 2014 con al menos 487 homicidios, y aunque se
registró una disminución con respecto al 2013 –cuando se contabilizaron al menos
863 asesinatos–, este crimen se ha mantenido a la alza en el mandato del
priista.
Un
año antes de que el mandatario llegara a la gubernatura de Veracruz, en 2009,
la entidad cerró con un total de 347 asesinatos, mientras que en 2010, ya con Duarte de Ochoa al frente de
la administración local, se contabilizaron 583. En un año de su gobierno, los
homicidios se dispararon y cerraron 2011 en 890; mientras que 2012 se convirtió
en el año más violento en lo que va de su sexenio, con 968.
Otro
delito que se ha mantenido a la alza en el gobierno del priista es el
secuestro. En 2010 se registraron 17, en 2011 al menos 60, en 2012 al menos 91
y en 2013 unos 109 plagios; mientras que el cuarto año de su mandato cerró con
el mayor número de este delito, con al menos144 casos registrados.
En
tanto que al inicio de este año, hasta el 30 de enero, la entidad ya registraba
30 asesinatos.
LA DEUDA DE DUARTE
Pero
la administración de Duarte no sólo se ha opacado con la
violencia, también con la creciente deuda pública que el mandatario ha
mantenido en lo que va de su gobierno. Apenas el pasado 4 de marzo, la
consultara Aregional advirtió que Veracruz es la cuarta entidad más endeudada
del país, sólo por debajo de Sinaloa, Chihuahua, Durango, esto al dar a conocer
el “Índice de desempeño financiero de las entidades federativas 2015″.
De
acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Javier Duarterecibió en 2010 a Veracruz con una deuda
de 21 mil 499 millones de pesos. Durante el primer año de su mandato, la deuda
creció en 2011 a 27 mil 938 millones de pesos.
En
el segundo año de la administración del priista, la deuda casi se duplicó y
ascendió en 2012 a un monto de 40 mil 028 millones de pesos, siendo este el año
de mayor contratación de pasivos hasta ahora de la actual administración de
Veracruz.
Pese
a que durante 2013 la deuda creció en menos grado, dejándola en 40 mil 923
millones de pesos, lo mismo que en 2014 cuando subió a 41 mil 149 millones de
pesos, legisladores de oposición han denunciado que Duarte de Ochoa mantiene
a Veracruz en números rojos.
Tan
sólo de junio de 2014 a diciembre del mismo año, la deuda de esa entidad pasó
de los 40 mil 767 millones de pesos a 41 mil 149 millones.
Pese
a las cifras y los recortes que el gobierno veracruzano ha tenido que
implementar, el pasado jueves Javier Duarte de Ochoa aseguró: “Estamos tomando
medidas evidentemente para poder ajustar el gasto público, medidas que
evidentemente se ven, por eso luego hay quienes dicen que estamos quebrados,
pero son medidas de responsabilidad y de atención a lo que son las condiciones
económicas que se están viviendo”.
VIOLENCIA CONTRA LA PRENSA NO CESA
El Duarte veracruzano no sólo ha
mantenido a la alza la violencia en general y el endeudamiento, además ha
convertido a Veracruz en el estado más peligroso del país para ejercer el
periodismo en México y en todo el continente.
En
el gobierno de Javier Duarte, 11
comunicadores han perdido la vida, cuatro permanecen desaparecidos y al menos
13 han salido de la entidad y se catalogan como desplazados. El más reciente
caso de violencia contra el gremio fue el Moisés Sánchez Cerezo, director y editor del diario la Unión de Medellín, quien fue
secuestrado y asesinado el pasado 2 de enero por la presunta orden de Omar Cruz Reyes, Alcalde panista de
Medellín de Bravo, pero quien es un abierto simpatizante del Gobernador
priista.
Sin
embargo, en Veracruz no sólo no se ha podido garantizar el derecho a la
libertad de expresión. El proceso para llevar ante las autoridades al presunto
autor intelectual de la muerte de Sánchez Cerezo, al Edil panista de
Medellín, ha sido largo y hasta la fecha el mandatario municipal, de quien no
se sabe su paradero, cuenta aún con el fuero constitucional por lo que no se ha
podido girar una orden de aprehensión en su contra.