Por Luis Ortiz
Ramírez - 16 enero, 2016 en Opinión
Luis Ortiz Ramírez / México se
asemeja a la mujer ultrajada y golpeada que no acaba de salir de una
relación violenta donde el marido la sobaja y humilla cuando
quiere. Sin embargo cuando la mujer tiene el valor de dejar al
golpeador, esta comienza otra situación peor.
La realidad
es que México no ha conocido la paz desde hace muchos años,
su independencia dejo al país con muchas cuentas que saldar
con otras naciones. Comenzó su independencia libre del yugo español, pero con
grilletes económicos ante otras naciones. La injusticia ha permanecido
manifiesta siempre en la vida del mexicano.
En México o tienes
mucho dinero y estas podrido en billetes o formas parte de la clase jodida
compuesta por miles de burócratas, campesinos, obreros y de muchos comerciantes
informales que se encuentra debatiéndose en los estertores de la pobreza
y la miseria. La clase media se está extinguiendo.
En México la
mayoría de los mexicanos viven al día, la economía se encuentra dando tumbos en
todo el mundo, sin embargo en territorio nacional la economía ha
sido castigada por la explotación de una clase política hambrienta
asociada al dispendio y corrupción.
En México el
político corrupto se encuentra en el paraíso, tiene licencia para robar
lo que quiere ya que vive en la impunidad que le brinda su partido político o
su cofradía incrustada en las tripas del sistema político mexicano.
En México los
mexicanos vivimos una democracia pinchada con alfileres, una democracia que es
aprendida y enseñada a las nuevas generaciones por cadenas de televisión
coludidas con el sistema gobernante. Sus programas televisivos son
carentes de sintaxis e inteligencia, la creatividad y el compromiso se quedan
guardados.
En México los
mexicanos fanatizados conocen más de alineaciones de futbol local y
europeo, que de historia y geografía nacional. Conocen cuantos goles ha
metido Messi a lo largo de su carrera y dan lujo de detalles de los mundiales
de futbol, sin embargo no conocen que acontecimiento se celebra el 20 de noviembre,
confunden la Independencia con la Revolución mexicana.
En México los
mexicanos sufren cuando agarran al Chapo, lo consideran el Chucho el roto
posmoderno, los mexicanos sin mucho compromiso con los libros, quieren
ser como el hombre que logro conquistar a la Reyna del Sur, aunque le haya
costado cara la calentura.
En México a las
mujeres se les lastima y se le mete injustamente a la cárcel como a
la Comandanta Nestora, defensora de sus raíces y de los pueblos indígenas. En
varios estados del país se les maltrata y asesina cuando estas laboran como
periodistas, como a Regina, periodista valiente que fue asesinada
brutalmente en Veracruz por denunciar las corruptelas del sistema
opresor.
En México las
mujeres son de segunda categoría para la clase política, las pocas
que respingan por su gran sentido de justicia, tienen que luchar contra
la corriente para poder defender los espacios que por ley les corresponde.
En México no se
crece en el ámbito económico, educativo y cultural porque la historia es
transexenal y los políticos que llegan al poder traen consigo su basto caudal
de ocurrencias y amigos incompetentes que echaran perder lo poco que se logró
en el gobierno anterior.
Esa es parte de la
realidad que vivimos los mexicanos, la tarea que tenemos aquellos pocos que
leemos y nos mantenemos informados es gigantesca. Tenemos que hacer reflexionar
al hermano, el vecino, el obrero o el taxista, para poder lograr un
México mejor para las futuras generaciones. Hacerles ver que si unimos
esfuerzos las cosas pueden cambiar.
