Siete minutos bastaron para que
el titular de la Secretaría de Educación de Veracruz, Adolfo Mota Hernández,
fuera exhibido en cadena nacional y ante millones de televidentes. En el
programa de la periodista Denise Maerker fue presentado un reportaje sobre las
telesecundarias de Veracruz, bandera de la que se agarra con frecuencia el
señor Mota para presumirle a la raza que la entidad es la que más tiene en el
país. Y sí, son 536.
Lo
que oculta mañosamente es que 156 carecen de todo y en este renglón Veracruz
también ocupa el primer lugar a nivel nacional. Denise puso al descubierto el
engaño; de estas últimas todas sin excepción carecen de energía eléctrica,
televisores y la mayoría de las instalaciones están tan jodidas que rayan en lo
conmovedor.
En la
telesecundaria de Santa Cruz, Soconusco, los niños reciben clases abajo de un
árbol y los maestros se apoyan en rotafolios que cuelgan sobre el tronco para
impartir sus enseñanzas. “El árbol nos lo turnamos entre tres maestros”, dice
la profesora María Isabel García y agrega que hay generaciones que concluyeron
sus estudios sin recibir un sólo día clases por televisión. La escuela cuenta
con la clave 30ETV0429Q expedida por la SEP.
Otro
caso pero peor que el anterior, es la telesecundaria de El Palmar en Hueyapan
de Ocampo. El lugar donde debería situarse la escuela es un lote baldío,
montoso y atascado de alimañas por lo que los niños reciben sus clases en un
cuatro desvencijado, con techo de lámina y paredes de madera donde se cuela de
todo, desde el viento y la lluvia hasta alacranes y culebras. La directora del
plantel María del Carmen Reyes, indicó que la escuela se fundó en 2012 y su
clave ante la SEP es 30ETV0440M.
Y el
último ejemplo que presentó el equipo de Denise fue la escuela de San Miguel Acayucan
que está dotada con una antena satelital que se oxida en un rincón ya que no
hay luz ni televisores. Su director, Marco Aurelio Martínez Hernández comentó:
“en algunos libros menciona ‘ve a internet en la página tal’ y qué es lo que
hacemos, pues decirle a los muchachos, nomás imagínenselo porque no tenemos luz
y menos internet”.
Palabra
que si no fuera patético sería hasta gracioso.
Atrapado
en sus falacias Adolfo Mota se escondió y mandó a la subsecretaria de Educación
Básica, Xochitl Adela Osorio, a explicar lo inexplicable. Pobre mujer, causó
pena ajena escucharla por teléfono (porque tampoco dio la cara) enredarse una y
otra vez con sus palabras y dejar a los televidentes con la impresión de que lo
único que hacen los funcionarios de la SEV es cobrar puntualmente su sueldo y
que lo demás les vale madres.
“Hay
grupos que establecen sus escuelas sin darlo a conocer a la autoridad
educativa. Cuando salimos en el periódico que están abajo de un árbol, nos
enteramos que están ahí en un árbol (sic)” dijo la funcionaria.
Lo
que en realidad quiso decir es que por sus pistolas los padres de familia
pusieron a estudiar a sus hijos bajo la sombra de un árbol pero que esa escuela
no está reconocida por ninguna autoridad escolar. Falso, todas las escuelas presentadas
en el reportaje tienen su clave ante la SEP y maestros asignados que cobran un
sueldo que por supuesto desquitan.
Más
adelante agregó: “Nos están instalando plantas de luz ahorita, se instalaron 15
plantas en aquellos lugares alejados…” En dónde señora, en dónde.
Pero
la responsable no es ella. La SEV tiene un titular que debería ver estos
problemas pero no le importan. A Adolfo Mota le encantan las candilejas
mediáticas y es feliz luciendo impecable ante los reporteros pero le valen
corneta la educación, los maestros y los educandos de Veracruz.
Alguna
vez lo dije y hoy lo repito: la SEV necesita de alguien que conozca el
magisterio y los problemas inherentes a la educación. Necesita un maestro que
vaya a las escuelas fregadas y tome nota puntual de sus necesidades para actuar
en consecuencia. No necesita de un figurín.
No se
vale que Adolfo esté al frente de una dependencia tan importante. No se vale
que a base de rollo retórico quiera tapar la desgracia educativa de la entidad,
no se vale que quienes estén pagando su incompetencia sean maestros y alumnos y
no se vale que por eso cobre un sueldo.
Pero
ahí sigue.
Siete
minutos le bastaron a Denise Maerker para poner en evidencia la capacidad de
Adolfo Mota como titular de la SEV, pero es casi seguro que el reportaje no
haga mella en su futuro político. El señor quiere ser diputado federal por el
distrito de Coatepec y es casi seguro que le den la candidatura.
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