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| Fernández Noroña. Contradicciones |
Proceso
jueves, 28 de agosto de 2025
Fernández
Noroña abandona la Mesa Directiva del Senado acosado por escándalos. La compra
de una propiedad de lujo en Tepoztlán contradice su discurso de austeridad.
Además, su estilo confrontativo culmina con un pleito que simboliza su
turbulento paso por la presidencia de la Cámara Alta.
Gerardo
Fernández Noroña fue taxista, librero y sociólogo antes de incursionar en la
política, donde forjó una carrera en partidos de izquierda. Este hombre de 65
años deja este fin de semana la Presidencia de la Mesa Directiva del Senado.
Su salida no
es un epílogo silencioso, sino un capítulo cargado de ecos: además de las
presiones internas en Morena, críticas por sus viajes al extranjero y un legado
de reformas aprobadas en medio de tormentas parlamentarias, están los recientes
escándalos, primero, por la compra de un inmueble en Tepoztlán, Morelos, por al
menos 12 millones de pesos, ADQUISICIÓN QUE CHOCA DE FRENTE CON EL DISCURSO DE
LA AUSTERIDAD REPUBLICANA que enarboló el entonces presidente Andrés Manuel
López Obrador y con los llamados que la presidenta Claudia Sheinbaum ha hecho
para que funcionarios públicos y militantes de Morena se conduzcan bajo los
principios de humildad y austeridad.
Segundo, por
el enfrentamiento a empujones y jaloneos que el propio Noroña protagonizó ayer
miércoles, en el Senado, con el priista Alito Moreno durante la última sesión
de la Comisión Permanente.
MARGINADO DE
LA CÚPULA DEL PODER
Cuando Noroña
asumió su encargo, durante su toma de protesta él mismo se calificó como un
“plebeyo”, y actuó, según él, con la misma esencia con la que llevó toda su
carrera política.
“Mi fuerza no
es estar en la Presidencia de la Mesa Directiva, mi fuerza es quien soy,
siempre he sido igual, he llegado hasta donde estoy siendo lo que soy, no voy a
cambiar. Si por como soy me ‘chupa la bruja’, políticamente hablando, bien
empleado, no tengo ningún problema, y si eso me da nuevas oportunidades, bien
empleado también, no tengo preocupación”, dijo en conferencia de prensa que
ofreció en junio del año pasado.
Sus
detractores denuncian que, pese haber ocupado el cargo de presidente del
Senado, no logró trascender en la esfera política donde las cúpulas del poder
continúan mostrándole su desdén.
A Fernández
Noroña se le resbalaron los desaires que en su momento tuvo con el expresidente
Andrés Manuel López Obrador y las diferencias políticas con la presidenta
Sheinbaum; en el último año logró la aprobación de las reformas prioritarias
para la 4T, la más importante: la reforma judicial.
Su actitud
confrontativa le cerró las puertas de la oficina presidencial durante el
sexenio de López Obrador, incluso expresó su berrinche por no ser invitado a
conocerla. Su relación con el exmandatario la calificó como cordial, dijo que
fueron “compañeros de lucha, no amigos”.
En este
sexenio tampoco se cumplió su deseo de conocer el despacho presidencial, no fue
invitado, ni tampoco asistió a las reuniones que la presidenta Sheinbaum
sostuvo con los coordinadores parlamentarios, como él mismo declaró, y fuentes
legislativas lo confirmaron.
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| El encontronazo de ayer miércoles con Alito Moreno, del PRI. Foto: Mario Jasso / Cuartoscuro |
Criado por su
madre Rosa María Noroña Velázquez y su abuela materna María de la Luz Velázquez
Villalobos –figuras que él mismo describe como pilares de su formación
izquierdista–, Noroña creció en un México marcado por la crisis económica de
los setenta y ochenta. Su bachillerato en el Centro de Estudios Científicos y
Tecnológicos (CECyT) 10 del IPN lo vio como líder estudiantil, un presagio de
su vocación por el activismo.
En 1988
contendió por una diputación por el Partido Mexicano Socialista (PMS), un año
después fue miembro fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y
tras tener diferencias con los líderes perredistas, 19 años después renunció y
se incorporó de manera externa al PT, partido en el que fue diputado federal en
tres ocasiones. El 18 de febrero de 2024 se afilió a Morena.
Su llegada al
Senado fue parte de un acuerdo político, luego de reclamar que no se cumplieron
los pactos establecidos por López Obrador tras la contienda interna para la
candidatura presidencial en la que Fernández Noroña fue el aspirante del PT y
quedó en tercer lugar arriba de Adán Augusto López y Ricardo Monreal.
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| La casa de Noroña en Tepoztlán, Morelos, por al menos 12 mdp. Foto: Especial |
POLÍTICA
PARLAMENTARIA
Doce días
después de su toma de protesta, Fernández Noroña se enfrentó a su primer reto:
la discusión de la reforma al Poder Judicial, la cual fue aprobada en una
compleja y extenuante sesión. El voto del entonces senador panista, Miguel
Ángel Yunes, fue decisivo.
En esa
discusión, por primera vez manifestantes tomaron la nueva sede del Senado,
Fernández Noroña afirmó que su única preocupación fue garantizar la seguridad.
“Llamé a que desalojáramos. Desalojamos la inmensa mayoría, se quedaron algunos
opositores que seguramente consideraban que su integridad no estaba en riesgo”.
Su paso por la
presidencia del Senado fue marcado por su personalidad polémica, acusaciones de
censura de legisladores opositores y un hecho inédito: ser el primer senador en
recibir disculpas públicas de un ciudadano.
Actos que
enfatizaron su estilo político, como en 1996 cuando se tiró al piso en Palacio
Nacional para detener el paso del expresidente Ernesto Zedillo para entregar
una propuesta de la Asamblea Ciudadana en Defensa de los Deudores de la Banca.
Como opositor,
Fernández Noroña era conocido por sus confrontaciones con otros parlamentarios,
como cuando se enfrentó con el entonces presidente de la Mesa Directiva, el
fallecido Porfirio Muñoz Ledo, a quien le exigió la palabra a gritos para pedir
una moción por alusiones personales; el detonante fue porque el líder histórico
del PRD acudió al último informe de gobierno de Enrique Peña Nieto, mientras
que a él, le impidieron la entrada.
Cuando llegó a
la presidencia del Senado esa actitud combativa se transformó y con el
argumento de que los legisladores quieren meter agenda por la “puerta de
atrás”, el morenista llegó a quitar el sonido de los escaños a senadores.
La primera que
vivió eso fue la senadora Lilly Téllez, cuando el 19 de febrero se discutía la
salida de miembros del Ejército para conmemorar el “181 aniversario de la
Independencia de República Dominicana”, la senadora buscaba hacer una pregunta
desde su escaño a la senadora emecista Alejandra Barrales, quien daba su
posición, por lo que Fernández Noroña acusó que la panista quería meter en la
agenda por la “puerta trasera” su propuesta de designar a los cárteles
mexicanos como terroristas y le apagó el micrófono.
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| Con Téllez, pugna crónica. Foto: Montserrat López |
También lo
hizo en la sesión del 7 de mayo de la Comisión Permanente, cuando el
coordinador del PRI en San Lázaro, Rubén Moreira, acusó que se estaban tratando
temas a contentillo para distraer la atención pública de los temas relevantes,
como el caso del Rancho Izaguirre: Fernández Noroña pidió quitarle el sonido de
su escaño. Moreira respondió gritándole: ¡Fascista!
CONTROVERSIA
POR EL RANCHO IZAGUIRRE
El 5 de marzo
el colectivo Madres Buscadoras de Jalisco difundieron imágenes de alrededor de
400 pares de zapatos, ropa, mochilas y una carta de despedida en el Racho
Izagirre en Teuchitlán, Jalisco, y revelaron que en el lugar había tres hornos
crematorios, señalaron que era un campo de exterminio.
EL SENADOR
CUESTIONÓ SI LOS ZAPATOS ENCONTRADOS EN EL LUGAR ERAN DE PERSONAS
DESAPARECIDAS.
“Los medios y
la derecha montados en la tragedia… hay 200 zapatos ahí sí, sí, pero, quién
dice que esos zapatos son de personas desaparecidas este es lo que se viene
contando”, dijo en su videocharla de ese día.
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| Desdén de Noroña para las buscadoras del Rancho Izaguirre. Foto: Fernando Carranza / Cuartoscuro |
DISCULPAS
PÚBLICAS
Otro hecho
histórico fue cuando el abogado Carlos Velázquez de León acudió el 19 de mayo
al Senado para ofrecer disculpas públicas a Noroña por un altercado que
tuvieron en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) el 20 de
septiembre de 2024, por lo que esta cámara presentó una denuncia contra el
defensor.
Posteriormente,
llegaron a un acuerdo en el que se estableció que el abogado le ofrecería la
disculpa, la cual se realizó en la sala de reuniones de la Mesa Directiva y fue
transmitida en las redes sociales institucionales.
Un día
después, el morenista defendió la situación afirmando que fue un mecanismo de
conciliación:
“Pidió que se
utilice el mecanismo de conciliación. Te ofrezco una disculpa pública”, pues,
¿dónde está el abuso de poder? Es una visión insidiosa, hombre, o sea, no hay
nada más que añadir”, dijo.
VIAJE A ITALIA
Fernández
Noroña realizó tres viajes durante su gestión, el primero fue a San Pedro Sula,
Honduras, el segundo viaje lo realizó el 19 de marzo a Estrasburgo, Francia, a
la “Conferencia Europea de Presidentes de Parlamentos” en donde habló de la
Reforma al Poder Judicial y el tercero fue Roma, Italia, el 19 de junio para la
“Segunda Conferencia Parlamentaria sobre Diálogo Interreligioso”.
Sin embargo,
fue su segundo viaje el que fue cuestionado, ya que lo hizo en clase ejecutiva,
el legislador confirmó que sí era cierto y dijo que el resto del viaje lo pagó
de su bolsa.
Incluso
Fernández Noroña mostró en sus redes sociales el baucher que recibió del Senado
para cubrir el gasto del vuelo redondo, que fue de 36 mil 840 pesos. El costo
del viaje, según los registros tuvo un costo total de 91 mil 388 pesos.
“El viaje lo
pagué con mi dinero. Recibí el equivalente al costo de turista y la diferencia
la pagué de mi bolsillo. Para ello, duro trabajo”, afirmó.
AUSTERIDAD
REPUBLICANA
Además de su
sueldo como senador de 131 mil 874 pesos mensuales, las redes sociales le han
generado cuantiosas ganancias, ya que de ellas recibe donaciones de sus
simpatizantes. Cuenta con dos millones 56 mil 510 seguidores en Facebook, 123
mil en Instagram, 839 mil seguidores en YouTube, 307 mil en Tik Tok y 484 mil
336 seguidores en X.
En su
declaración patrimonial que presentó en el ejercicio 2023, dijo que su ingreso
neto durante el año fue de: tres millones 394 mil 622 pesos, de ellos, 674 mil
655 pesos fueron por su cargo público como diputado federal; 764 mil 63 pesos
por derechos de autor y colaboraciones en medios informativos y un millón 955
mil 904 pesos por su canal de YouTube.
También
declaró tener dos vehículos: un Volvo 2018 modelo XC90 con valor de 650 mil
pesos; también otro automóvil Volvo 2021 del mismo modelo con valor de un
millón 500 mil pesos que sacó a crédito y no reportó inmuebles.
Sin embargo,
en su declaración patrimonial que presentó el 24 de octubre 2024, ya como
senador, no declaró los ingresos que obtiene por sus redes sociales, sólo
declaró que su actual sueldo es de 135 mil 334 pesos y dijo que los ingresos
netos que tuvo cuando fue diputado en 2023 fueron de 674 mil 655 pesos. En ella
se mantienen los dos automóviles.
Pero a cinco
días de que dejará el cargo como presidente del Senado se dio a conocer que
Fernández Noroña adquirió una casa a crédito en Tepoztlán, Morelos, con valor
de 12 millones de pesos.
La publicación
enfureció a Fernández Noroña, quien acusó a los medios de hacer una campaña
mediática en su contra y afirmó que los medios han actuado con nula ética en
torno de la información sobre sus bienes e ingresos, pero no han investigado
las declaraciones patrimoniales de legisladores de la oposición. Agregando un
renglón más a su lista de polémicas durante su gestión.
"CUMPLIR"
A MÉXICO
Ningún senador
opositor acudió a su informe de actividades el 14 de agosto en la Antigua
Casona de Xicoténcatl, pese a que el morenista afirmó que se invitó a todos.
Sólo conto con
la presencia de familiares, la cúpula oficialista del Senado, dos funcionarios
del gobierno federal y una gobernadora. Ahí, Fernández Noroña alegre, con
simpatizantes, mariachis y tamales, resaltó que “le cumplió a México”
Al dejar la
presidencia este fin de semana –con la nueva Mesa Directiva perfilando a una
mujer como Laura Itzel Castillo o Guadalupe Chavira–, Noroña regresa a su
escaño como “plebeyo”, pero no inactivo… Tiene aspiraciones políticas para
2030.
Noroña
advierte: "El movimiento va hacía lo que decimos, un país de libertades,
cada vez más conciencia social. Nunca había habido tantas libertades como
ahora, aunque digan lo contrario".