“Cuando el apoyo electoral se traduce en perversión e impunidad, aparecen los nuevos psicópatas de nuestro tiempo. Son los políticos que, con crueldad ideológica y sin empatía ni remordimientos, causan el dolor y la miseria en los más débiles e indefensos.” José Luis Rodríguez Jiménez.
La imposición del PRI en la Presidencia de la República, es un hecho consumado y anunciado por doquiera. Los grupos empresariales y políticos dueños absolutos del poder en México optaron por violentar una vez más, la voluntad popular y las condiciones deplorables de vida del pueblo. Qué sigue para el país.
Como era de esperarse, miles de voces inconformes salieron a las calles a protestar por la decisión del fallo emitido por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que sin ir mas allá en las investigaciones, avaló las irregularidades del PRI antes, durante y después de las elecciones, para arrebatar la silla presidencial.
Con el resultado electoral del 1 de julio avalado, sin que se hayan investigado todas las irregularidades denunciadas por Movimiento Progresista, se enardecen otra vez, los ánimos de ciudadanos y estudiantes universitarios que ayer, protestaron en las calles y tomaron de manera simbólica palacios municipales representativos.
Estamos de nuevo, ante el claro abuso de las fuerzas oligárquicas del país que pretenden otra vez, imponer a costa de violencia y mas sangre, pues no les han sido suficientes 115 mil muertos en 6 años, las reformas neoliberales que el imperio ha ordenado para México con determinación desde el año 1988 que también se impuso a Carlos Salinas de Gortari por sobre Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
Se acusa de radicales, revoltosos y violentos a los que han insistido en el respeto y cumplimiento a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, violentada como nunca antes en el proceso electoral de julio, repleto de irregularidades y del uso de millones de pesos de procedencia ilícita para la compra de los sufragios.
Resulta increíble que no se hayan investigado tampoco, las denuncias sobre la entrega de despensas a través de tiendas comerciales, de los programas sociales de los gobiernos de los estados representados por el PRI, y la utilización de 10 tipos distintos de tarjetas de la tienda Soriana como por ejemplo: Soriana a Precio por Ti, en todo el país; Soriana a Precio por Ti CTM, en todo el país; Soriana a Precio por Ti (con diferentes logotipo).
En Nuevo León; Soriana a Precio por Ti (color gris), en el Estado de México; Buen Vecino Soriana, en Sinaloa; Buen Vecino Mercado Soriana, en Nuevo León; Soriana Obsequia a Precio, en Nuevo León; Tamaulipas Siempre Gana, en Tamaulipas; Mi Ahorro Soriana MasterCard Banamex, en Chihuahua; y, Soriana Mi Ahorro Banamex Internacional, en Guerrero y en el Estado de México.
Tampoco se investigó la distribución de 260 mil monederos del Banco Monex, como consta en facturas y en tarjetas de distintas denominaciones que hicieron públicos los inconformes, como: Monex Lealtad, Monex Recompensa, Monex Broxel Lealtad, Monex Lealtad MasterCard $1000 y Monex Lealtad MasterCard $500, que también se entregaron al IFE, a la Fepade de la PGR, al TRIFE y no investigaron.
Lo más increíble fue saber como las autoridades hacendarias del país, avalaron que bancos como Santander, Bancomer, HSBC y Scotiabank hayan entregado tarjetas en beneficio del PRI y hasta se permitió la adulteración de documentos para deslindarles responsabilidades sobre uso millonario de recursos públicos.
En fin, la lista de pruebas presentadas para que mínimo se investigara cómo el PRI “ganó la presidencia”, no fueron suficientes para que las autoridades electorales del país, decidieran por el cumplimiento de las leyes y la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
A partir de esta elección y evidente complicidad de las autoridades correspondientes para validar “triunfos”, ya cualquier organización política podrá en el futuro usar dinero a raudales de procedencia ilícita para comprar sufragios rebasando los topes de campaña permitidos por la ley y violentando con vileza los preceptos constitucionales que ordenan elecciones libres, transparentes y democráticas.
Son justas las protestas de los integrantes del movimiento #Yosoy132 y de todos los integrantes de la sociedad civil que han salido a las calles para protestar de manera pacifica por tanto abuso y arbitrariedad con que se conducen los señores que se supone, están para hacer cumplir las leyes.
Y como dice Elena Poniatowska , “son los jóvenes quienes pueden denunciar a todo un sistema neoliberal que ha llevado al país al desbarrancadero, son los jóvenes organizados quienes lograrán cambiar la forma de hacer política en México y hasta ahora, nos continúan dando ejemplo de valor civil al salir a las calles y protestar”.
En suma, solo con esos elementos de prueba podía demostrarse que Enrique Peña Nieto y el PRI utilizaron dinero a raudales de procedencia ilícita para comprar votos, rebasando por mucho el tope de gasto de campaña permitido por la ley y violando flagrantemente lo que establece la Constitución, acerca de que las elecciones deben de ser libres y auténticas.
Pero no, las autoridades electorales evadieron su responsabilidad de dar certidumbre a los resultados de las elecciones presidenciales. Lástima, lástima, lástima.
No obstante, tras la inconformidad, vendrá nuevamente la aceptación pasiva y derrotista. Para que los señores funcionarios pensaran dos veces antes de actuar con impunidad, tendría que existir un esfuerzo en conjunto de todos los sectores organizados y de la misma población en general que desinformada, pero con mucha necesidad, se ve desinteresada en participar en la lucha por un auténtico cambio en el país.
Al tiempo.
liliabaizabal@hotmail.com