por Lilia Baizabal
10 noviembre, 2012
“Yo veo un México (…) de gente agraviada, de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían de servirla. De mujeres y hombres afligidos por abuso de las autoridades o por la arrogancia de las oficinas gubernamentales”. Luis Donaldo Colosio Murrieta.
Contrario a lo que difundió con “bombo y platillo” la Presidencia de la República en relación a que se habían creado 865 mil nuevos empleos en los primeros 10 meses de este año, el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI), reveló que unas 783 mil personas se sumaron al sector informal acumulando ya un promedio de 14 millones 200 mil personas que viven del ambulantaje ante la falta de oportunidades dignas de trabajo.
Duras, contundentes, las cifras del INEGI y hasta se quedan cortas. Basta salir a las calles de cualquier lugar del estado de Veracruz, o del país, para ver cómo han incrementado el número de personas que no tienen un empleo y muchísimos se ven en la necesidad de emplearse de lo que sea o hasta piden limosna para poder llevar un pan a su familia.
Gastó miles de millones de pesos la Presidencia de la República, para difundir a través de los principales medios de comunicación, que deja el gobierno, habiendo creado un promedio de 865 mil nuevos empleos en los meses de Enero a Octubre de este año.
Por aquello de que en su campaña rumbo a la presidencia de la República, se promovió como “el presidente del empleo” y más bien, lo que dicen las cifras del INEGI es que se va como uno de los peores presidentes del desempleo que ha tenido México.
Los números y la realidad que se percibe en las calles, revelan lo contrario a las cifras alegres de los funcionarios federales a punto de pasar a administrar las incalculables riquezas de las que ahora son dueños.
Dice el INEGI que de cada diez personas que tienen trabajo, tres lo hacen en el sector informal, (como vendedores ambulantes), es decir, sin prestaciones ni seguridad social. Hay 14 millones 200 mil personas que tuvieron que irse a la informalidad porque las autoridades, no crearon fuentes de empleo dignas.
También citan que actualmente en el país existen unos 2 millones 468 mil desempleados y para abril de este año, las cifras crecieron en 178 mil 513 desocupados mas. Cifras que bien sabemos no son exactas porque los funcionarios de cualquier nivel, siempre tratan de ocultar la realidad. Y nos muestran los números que ellos quieren, no los que en realidad son.
Lo que hemos visto con la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), del gobierno federal, principal dependencia dedicada al combate de la pobreza, es que durante los últimos años, recibió incrementos anuales de presupuesto para ayudar a los que menos tienen, sin embargo, los incrementos en las cifras de pobres, revelan que ese dinero, no fue a parar en su mayoría a los mas necesitados.
La misma dependencia dice que durante los últimos 10 años, el presupuesto de la Sedesol se incrementó de manera sistemática en promedio un 22.6 por ciento anual, el primer año de esta administración calderonista, tuvieron un aumento del 43.5% en el presupuesto para apoyo de los programas sociales.
En el caso de Oportunidades, pasó de 5 mil 105 millones de pesos en 2001 a 35 mil 355 millones en 2011, Estancias Infantiles de 692 mil millones en 2007 a 2 mil 891 millones y el programa 70 y Más, registró 285.2 millones en 2006 y se incrementó a 13 mil 287 millones en 2011, que equivale a un incremento de 7,4 y 30 veces, respectivamente.
Y para este año 2012, el Presupuesto de Egresos que ejerció la Sedesol ascendió a 84 mil 860 millones de pesos en el Ramo 20 de Desarrollo Social, cifra que representa un aumento del 2.2% con 1 mil 800 millones más respecto al de 2011, y que contempló la ampliación en ocho programas sujetos a reglas de operación.
Un 89.4% de las ampliaciones autorizadas por la Cámara de Diputados correspondieron a los programas Rescate de Espacios Públicos, Hábitat, Vivienda Rural, Fonart, Coinversión Social, Empleo Temporal, Paimef y Tu casa.
Se preguntará cómo es posible que si en los últimos 10 años, los gobiernos federales panistas, destinaron mas recursos para apoyar a las familias de escasos recursos y las cifras de pobres de acuerdo al Consejo Nacional de Evaluación de la Pobreza (CONEVAL), andan en 70 millones. Es decir, en 70 años de priismo, se heredaron 40 millones de pobres y los gobiernos del “cambio”, lejos de disminuirlas, crecieron en 30 millones de pobres más.
¿A dónde fueron a parar tantos miles de millones de pesos?.
Lo anterior solo puede entenderse desde la óptica de un manejo irregular de los recursos públicos. Es decir, que el panismo, le aprendió bastante rápido al priismo, cómo diseñar estrategias para que muchos de esos millones, fueran a parar a las organizaciones que muchos funcionarios públicos crearon. Es decir, a sus propias cuentas bancarias.
Y con tal de no ser denunciados, panistas convidaron a priistas, perredistas, naranjas, verdes a presentar a sus propias organizaciones para recibir también sus miles de millones de pesos. El saqueo de los recursos de SEDESOL, fue despiadado, pero en harta complicidad y por ende con impunidad. Si lo han notado, jamás le exigen cuentas al secretario Heriberto Félix Guerra y eso que termina como uno de los nuevos millonarios del sexenio.
Por eso en 12 años de panismo, hay cientos de funcionarios millonarios. Gente que hace apenas una década ingresaron a la política hasta quebrados o con severos problemas económicos, hoy son propietarios de residencias lujosas, ranchos, aviones, jet, grandes negocios en Estados Unidos y otros países del mundo. Disponen de riquezas in-cal-cu-la-bles.
Por eso cuando notamos que dependencias oficiales como el INEGI salen a desmentir las cifras de la Presidencia de la República, al revelar que la tasa de desocupación hasta el mes de Octubre de este año, fue de 5.2% de la población económicamente activa (PEA), contra 5.6% registrado en el tercer trimestre de 2011, nos dan oportunidad de ver hasta dónde son capaces de mentir los funcionarios públicos con tal de “limpiar sus imágenes”. Para intenter decir, “si cumplimos”.
La única realidad es la que viven los ciudadanos que salen a solicitar un empleo y no existe la oportunidad y cuando las encuentran con salarios de miseria y jornadas extenuantes de trabajo. El desempleo va en ascenso o, al menos, de un trimestre a otro creció en igualmente cuatro décimas de punto, de 4.8 a 5.2% de la PEA. Aunque al presidente le pasen otras cifras.
Probablemente por el crecimiento de la pobreza y el desempleo en todo el país, ha crecido también la inseguridad. Pero ese ya es otro tema.
Pero qué tal la Presidencia de la República, avalando que Pemex firmara contrato con empresas españolas para generar empleo en el citado país. Y nuestra Marina Mercante Nacional desaparecida y los señores, apoyando a la industria naval de España. No tienen perdón por donde le busquen. Son unos sinverguenzas.
México hundido en la miseria, la falta de mas oportunidades para nuestros jóvenes y en el abandono total de la gente de la tercera edad que aún es productiva a los 60 años y disponen de una basta experiencia.
En fin, no por nada perdió el PAN la presidencia de la República. Lo preocupante es que no se ven vientos de cambio por los próximos 6 años. Y menos cuando ya fueron a a prometer a Estados Unidos, hasta la privatización de la única empresa paraestatal, que ha sostenido al país desde siempre.
¡Pobre México!. ¿Hacia dónde vamos?.
liliabaizabal@hotmail.com FUENTE: http://plumaslibres.com.mx/articulo/pobreza-y-desempleo-legado-del-calderonismo-piedra-en-el-zapato/