Entre lo utópico y lo verdadero
Por Claudia Guerrero Martínez
19 de agosto del 2017.
Ridículo, absurdo y excesivo,
son los calificativos que merece la carta emitida por Javier Duarte de Ochoa a
medios de comunicación nacionales, para anunciar una presunta huelga de
hambre, que huele a rompimiento de acuerdos con el Gobierno Federal y son
los ingredientes perfectos para que la opinión pública vuelva a retomar el tema
del caso Veracruz y además, el antes emperador, se convierta en víctima…
Resulta, que Javi Du, hoy preso
en el Reclusorio Norte, siente pasos en su cabecita, pues asegura que el
actual Gobierno del Estado, Miguel Ángel Yunes Linares está realizando
una caza de exfuncionarios duartistas, pero además, revela sin
sustentar su dicho, que Alma Aleida Sosa Jiménez, Juez de Control
en el Penal de Pacho Viejo, en el municipio de Coatepec, “actúa bajo las
órdenes del dictador que actualmente se ostenta como Gobernador de Veracruz”… Y
por supuesto, se refiere a su archienemigo, Miguel Ángel Yunes Linares…
Lo interesante de esto, es que
la presunta huelga de hambre le hará un bien al hoy procesado y culpable de la
quiebra en Veracruz… Muy repuesto, durante su condición de prófugo y
aumentó más de peso, durante su estancia en Guatemala, el ayuno no le
afectará, a un obeso Javier Duarte, quien hoy pretende mostrarse
débil, chillón y hasta víctima…
Si bien, la actual Juez de Control,
Alma Aleida Sosa Jiménez despacha los casos en el Penal de Pacho Viejo,
fue durante la administración de Fidel Herrera y luego de Javier Duarte de
Ochoa, cuando su padre, quien también ha tenido carrera en el Poder Judicial,
el conocido Juez Laurentino Sosa Capistrán, esta familia se ha beneficiado con
cargos durante la docena trágica sexenal… Y ahora, Javier Duarte asegura que
todo es un complot…
El pillo Javier N ahora se
siente agraviado, lastimado en su ego e intervención durante su vinculación a
proceso… Lo que no dijo, porque no le convenía, es que sus excolaboradores
ahora lo están traicionando y lo señalan de saber, conocer, planear y hasta
ordenar los desvíos de recursos para beneficio del gabinete duartista y del
propio Javier Duarte de Ochoa… Por eso, una huelga de hambre
innecesaria, quizá sólo para adelgazar al robusto Javier N, pretende
parar la “masacre” de declaraciones, mismas, hunden cada día más al hoy preso
en el Reclusorio Norte…
Duarte exige que las Judicaturas federal y
estatal se pongan las pilas, ante una “persecución sin fundamentos”, en los que
Miguel Ángel Yunes Linares, Jorge Winckler, los veracruzanos y la autora de
esta columna, según Javier Duarte, todos, todos, todos, mentimos al señalarlo
de ser el culpable de la quiebra de nuestro lastimado, pero bello Veracruz…
Por último, no olvidemos que la
justicia federal no ha otorgado y ha desechado amparos a varios
exfuncionarios de la administración de Javier Duarte de Ochoa, pues se ha
comprobado su responsabilidad por delitos considerados graves y
estos son sustentados en las carpetas de investigación realizadas por la
Fiscalía General del Veracruz y la propia PGR… Así que si quiere llorar,
patalear, lanzar estiércol a todos y contra todos, lo cierto es que Javier
Duarte, por lo menos, dos años estará de huésped en la cárcel…
Twitter: @cguerreromtz