Por Dania Díaz Socarrás/Radio Cadena Agramonte.
Hoy se cumplen 12 años del fallecimiento de una de las más grandes mujeres de la Historia de Cuba. Guerrillera en tiempos de luchar, armas en mano, por nuestra libertad; firme y sensible luego para conquistar libertades mayores, para garantizar los derechos de la mujer y la familia: Vilma Espín Guillois.
El 1ro de enero de 1959, tras el triunfo revolucionario, esta mujer inició una nueva etapa de lucha, por la emancipación verdadera y definitiva de las féminas cubanas, por sus derechos y la equiparación de oportunidades.
Llena de amor y valentía, fue siempre la guerrillera, la líder, la mujer querida y admirada por todos, que legó uno de los más grandes ejemplos para sus congéneres de Cuba y el mundo.
La compañera de batallas de Fidel Castro y esposa de Raúl se distinguió por su defensa de los derechos femeninos. No obstante, su preocupación y ocupación no quedó exclusivamente en la mujer, sino que se extendió a la familia entera.
Su conciencia de cuanto inquietaba a una mujer en su hogar, la hizo idear la creación de los círculos infantiles (guarderías) para el cuidado de los hijos pequeños de madres trabajadoras, y contribuir a la armonía en el hogar con la atención a otros temas como la reproducción asistida, que es aún prioritario en nuestra sociedad.
Déborah, como se hacía llamar en tiempos de guerra, aprendió a entregarse en cada tarea, como lo hizo luego hasta su muerte, como lo hace aún desde su ejemplo. Desde su sencillez, fue y es un verdadero paradigma para las cubanas, muestra del valor con que cada una de nosotras ha de ponerse de pie para defender sus criterios y asegurar que esta siga siendo una nación de equidades cada vez mayores.
Por eso, no basta hablar de ella, leer o escuchar sobre su pensamiento y su acción; hay que apropiarse de cuanto nos enseñó a ser en nuestro día a día.
El mejor homenaje a su memoria ha de ser siempre esa actitud humana, sensible, firme, valiente y llena de amor con que ayudó a ser más felices a un país, a un montón de familias, mujeres incluidas, que continúan hoy defendiendo los sueños a los cuales ella siempre se
entregó. (Collage: www.radioprogreso.icrt.cu.)
