Este domingo arrancan campaña los cuatro candidatos que
aspiran a suceder a Miguel Ángel Yunes Linares: su hijo, Miguel Yunes Márquez;
su excompañero de partido durante la tres décadas que militó en el PRI, José
Yunes Zorrilla; su excontrincante en la elección de 2016, Cuitláhuac García, de
Morena, y la exlegisladora de este instituto político, Mirian Judith Sheridan
quien contenderá por el Partido Nueva Alianza, que en Veracruz es controlado
por el gobierno.
El
cobijo de Nueva Alianza a González Sheridan se da en la coyuntura de que el
líder moral del Panal es el legislador local Vicente Benítez –extesorero y
exsecretario particular de Javier Duarte–, político camaleónico que ha
transitado del PRI a Nueva Alianza y hoy vota en favor de todas las iniciativas
que envía Yunes Linares al Congreso local.
Benítez es investigado por la
Procuraduría General de la República (PGR) por enriquecimiento ilícito, su
participación en las empresas “fantasma” de Javier Duarte y por tener
multipropiedades en Costa Rica.
Actualmente, se ha dedicado a
visitar a los alcaldes y regidores de Nueva Alianza para acotarlos de que ahora
el proyecto de “subsistencia política” se llama “votar por Meade” en la
presidencial, pero votar “por el hijo del gobernador” en la elección local,
“hacer voto diferenciado”.
Sin duda alguna Mirian Judith Sheridan, una oportunista,
marioneta del gobernador, beneficiada con prebendas, la han utilizado para el golpeteo
político contra MORENA a nivel estatal, en Veracruz también los de la mafia del
poder tienen a sus peleles que se encargaran del trabajo sucio.
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