Por Lilia Baizabal
“La Libertad, pájaro con alas, las personas la buscan pero nunca la encuentran, y yo les digo busca tan alto como tus ojos puedan, porque si la encuentras tu vida será serena”: Anónimo.
Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) en el D.F, afines al movimiento #YoSoy132 denunciaron que desde hace un mes son blanco de autoridades y de personas que no portan ninguna identificación que los hostigan para que den información sobre los líderes del colectivo estudiantil. Esta situación se está repitiendo en estados como Oaxaca, Guanajuato y ahora Veracruz donde autoridades boicotearon un evento.
Será casualidad o coincidencia que las agresiones contra algunos jóvenes integrantes del Movimiento #Yosoy132, se hayan recrudecido tras el resultado de las elecciones presidenciales del mes de julio.
La protesta juvenil crecida a raíz de los desplantes del ex candidato priista presidencial en la Universidad Iberoamericana, se fortaleció a nivel nacional cuando miles de jóvenes universitarios salieron a marchar sin miedo también, en contra de la manipulación de la información por parte de una empresa televisora y la celebración de elecciones transparentes.
A diferencia de otros movimientos que defienden sus intereses particulares, #Yosoy132 ha pugnado desde su creación por la defensa de intereses de la sociedad. Su más alta exigencia han sido la democratización de los medios de comunicación electrónicos y algunos impresos, así como denunciar y frenar lo que llaman “imposición” de Enrique Peña Nieto en la presidencia de la República.
El Movimiento Progresista ha presentado evidencias tan contundentes en la compra masiva de sufragios que creció la inconformidad popular y muchos más, salieron a sumarse a las marchas convocadas por el movimiento #Yosoy132, el 7 de julio en 22 ciudades del país, se marchó masivamente, en contra del regreso del PRI a los Pinos.
Probablemente por acciones como estas, los jóvenes Stephanie Arriaga, Daniela Moreno, Miguel Ángel Barranco y Sonia Vargas ofrecieron rueda de prensa en la capital del país para denunciar que integrantes de este movimiento, han sido víctimas de al menos 12 actos de violencia e intimidación durante su asistencia en las marchas, volanteo o asambleas en las que han sido detenidos de manera arbitraria por individuos no identificados.
Denunciaron que ellos mismos forman parte de un grupo de 11 estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN), que fueron vejados por las autoridades del estado de Oaxaca el pasado 22 de julio, después de participar en una asamblea.
Los denunciantes relataron que en esa ocasión acudieron a las instalaciones de la policía municipal para realizar un mitin, en demanda de la liberación inmediata de su compañero David Venegas.
Tras permanecer un rato en el lugar, relataron, decidieron regresar al zócalo de Oaxaca para sumar más apoyo. “En el transcurso de un minuto comenzaron a llegar las patrullas, cuestión que no nos aturdió pero nos forzó a retirarnos”, comentaron.
De pronto empezaron a escuchar balazos, lo que provocó la dispersión aturdida de los estudiantes. En cuestión de minutos, dijeron, varias patrullas se aproximaban por las diferentes calles que rodeaban el tramo hacia el Zócalo.
Después de eso, afirmaron, fueron golpeados, por lo que responsabilizaron al Gobernador Gabino Cué y al Alcalde de Oaxaca, Luis Ugartechea de los hechos.
Otra de las jóvenes afectadas, cuyo nombre no se reveló por motivos de seguridad, relató que en el DF, después de un volanteo en el metro de esta ciudad, fue retenida en la estación Bellas Artes y llevada con los ojos vendados a un cuarto donde fue torturada. Esto según información difundida por la agencia Apro de Proceso.
Este fin de semana, el boicot en contra de #Yosoy132 llegó al estado de Veracruz, donde integrantes del movimiento, denunciaron que las autoridades del estado, ordenaron la ocupación de última hora de la Macro Plaza del Malecón del puerto de Veracruz donde ellos realizarían un concierto musical.
Ante el imprevisto se vieron en la necesidad de cambiar el concierto a Plaza de la República ubicada frente al registro civil del mismo puerto, según denuncian en un comunicado difundido la noche de ayer.
Intimidaciones y agresiones físicas no han sido denunciadas por jóvenes integrantes de este movimiento en Veracruz, sin embargo, está visto que no tardan en registrarse debido a que da la impresión de que existen órdenes de sembrar el miedo y la preocupación entre los muchachos para que no continúen insistiendo en fraudes, imposiciones, ni en cosas parecidas.
Queda claro que en política las coincidencias no existen. Si giraron ordenes de censura en medios de comunicación contra periodistas críticos e independientes que han dado voz al Movimiento Progresista, no extraña que estas agresiones también se hayan orquestado para denostar, intimidar y boicotear las acciones que integrantes de #YoSoy132, buscan a favor de la democracia en México.
No está por demás que los jóvenes que han participado en marchas y continúan durmiendo en plazas públicas, extremen sus precauciones para protegerse. Esta visto que los demonios andan sueltos con las fuerza que nunca y no cesarán sus acciones hasta lograr la desintegración del movimiento social mas importante de los últimos 20 años en la historia política nacional.
Estos lamentables eventos, ocurren en un contexto de agresiones también a los principales medios impresos del país como el Norte del grupo Reforma, el Mañana de Nuevo Laredo y el distribuidor de la revista Proceso en Monterrey que fue incendiado. Son medios sí, que han relatado acciones de delincuencia organizada, pero también los únicos que han difundido en sus espacios, las denuncias de la oposición sobre el presunto fraude de la elección presidencial.
Los ataques queda claro, no son aislados, mas bien se notan como parte de una estrategia para evitar que se difunda información contraria a los intereses de un grupo político que mantiene al país como rehén de sus intereses desde hace mas 80 años. Cada acción esta friamente planeada, orquestada y lleva claros mensajes.
Los hechos no mienten.
Al tiempo.