“Aunque sea de vez en cuando, aunque sea de contrabando, pero ámame”: Una frase de la canción de Contrabando de las favoritas de Jenni Rivera. Que Descanse en Paz.
Los tiempos tan difíciles por los que atraviesa México, exigen que no queden dudas sobre las auténticas causas que provocaron la caída del avión donde viajaba Jeni Rivera, “la Diva de la Banda”. Desde hace 2 años, fueron públicas amenazas a la vida de la cantante. Sin que ninguna autoridad se hubiese preocupado por ir más allá en las investigaciones y brindarle protección.
“Eres la siguiente a morir”, fue el mensaje que un usuario le mandó bajo una cuenta a la cantante a mediados de este año. A través del twitter, la amenaza generó alarma por la seguridad de la cantante.
La Diva Rivera lo tomó simplemente como una broma de mal gusto. Y respondió a través de su cuenta….”Esa cuenta de twitter…la de la supuesta amenaza…ya esta siendo investigada. Chistosito”, dijo. “Siempre existe gente que quieren hacer bromas…veremos si se ríe cuando le lleguen”.
Ese mismo día, aprovechó también para mostrar lo importante que en cualquier situación, resultaba para ella el apoyo y el cariño de sus seguidores que han rechazado las amenazas. “Gracias twitteros/fanáticos por estar conmigo”.
A pesar del temor que el mensaje sembró en la web por la difícil situación por la que atraviesan algunos cantantes en México, la intérprete de, ” Se las voy a dar a otro”, volvió a ser enfática y tranquilizó a sus fans.
“No hay nada de que preocuparse de la broma de mal gusto”, agregó. Hoy, lamentablemente, la cantante está muerta. Un fatal accidente aéreo, provoca el trágico suceso que conmovió a todos sus seguidores y a miles de ciudadanos les hace preguntarse qué sucedió.
De acuerdo a las noticias, la cantante había huido recientemente, de una balacera en Tampico. Desde el año 2010 iniciaron las amenazas en su contra y hace apenas cinco meses, uno de sus organizadores fue asesinado en un municipio del norte del país. Sería por esta situación que lejos de pernoctar en Monterrey, decidieron arriesgarse a volar tan de madrugada.
No queda ninguna duda que el vetusto avión se impactó. Lo que hace preguntar a muchos es por qué la cantante y sus acompañantes, decidieron volar tan tarde, y no quedarse a descansar en Monterrey o en otro lugar. ¿Acaso temían algo? No era la ciudad regia segura para ella o sus acompañantes.
Otros más se preguntan cómo fue posible que la cantante viajara en un avión que no solo había reportado accidente, y que era una chatarra, sino que además, era de un mexicano investigado en Estados Unidos por tener otros aviones con sospecha de haber sido utilizados en el transporte de narcóticos.
Datos de la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos, muestran que el 1 de julio de 2005, el avión registrado entonces por la compañía MCOCO Inc, de Houston, Texas, sufrió un accidente al salirse de la pista de aterrizaje en Amarillo, Texas.
Apenas en mayo pasado, el avión fue registrado por la compañía Starwood Management, con la matrícula N345MC, según los archivos de la FAA.
Documentos en una corte federal y la oficina de la secretaria de estado en Nevada revelan que la compañía pertenece al mexicano Christian Eduardo Esquino Núñez, quien utiliza también el nombre de Ed Núñez.
En febrero de 2010, Starwood Management y Wing Financial, otra compañía propiedad de Esquino Núñez, interpusieron una declaración de bancarrota, buscando protección ante sus acreedores, que reclamaban el pago de más de cinco millones de dólares.
O sea que el dueño del avión que transportaba a la Diva de la Banda, es una auténtica ficha pues también se involucraron a sus naves con personas que el año pasado, intentaron trasladar a integrantes de la familia del dictador libio Muammar Gaddafi, según la información periodística.
Existen elementos de sobra para que hayan dudas sobre qué pudo haber originado la caída del avión donde viajaba la mujer que se pintaba sola para cantar de las pasiones, el amor con la conjugación de su música y sentimiento. La mujer que vendió más de 15 millones de discos en todo el mundo, lo que la convirtió en la intérprete de la banda sinaloense más importante y escuchada en Estados Unidos y México.
Las autoridades no pueden dar carpetazo al asunto así como así. Especialmente porque existen evidencias claras de una cacería en contra de intérpretes de música de banda. En los últimos 6 años, ya suman mas de 12 las ejecuciones de cantantes gruperos que han sufrido los estragos de la violencia desatada presuntamente por el crimen organizado.
Entre los casos más sonados de muertes, recordamos a Sergio Vega, cantante de los Hornos Sonora, Fabián Ortega el Halcón de la Sierra, Diego Rivas de Sinaloa, José Valdenegro del grupo Enigma, Jesús Quintero alias “el Travieso”, Carlos Ocaranza “el loco Elizalde de Sinaloa”, todos los integrantes de La Quinta, banda de Chichuahua, cinco jóvenes menores de 25 años, murieron masacrados.
Así también, Sergio Gómez, vocalista del famoso grupo Kapaz de la Sierra. Asesinado en Michoacán. Valentín Elizalde “el Gallo” de Sonora, Zayda Peña Arjona de 25 años, victimada en Tamaulipas, era cantante del grupo “Zayda y los culpables”, así como el de Chalino Peña.
Como puede observarse con la larga lista de muerte de los gruperos, la inseguridad que se vive en todos los rincones del país, no respeta a nadie. Sin importar que vayan por tierra, por mar o por aire. Tengan o no seguridad privada. Sean o no famosos, los hechos de sangre, continúan enlutando al país. Muy tristemente todo mundo se pregunta, ¿hasta cuándo?.
Los ciudadanos ya no quieren que los altos funcionarios continúen dando vueltas a la preocupante situación de México. ¿Que si hay delincuencia?. Instalan una comisión para atender el problema. Que a pesar de eso continúa, organizan su programa de “México Seguro”. ¿Que de todos modos la inseguridad sigue?, se creó el Sistema Nacional de Seguridad. ¡Todo un sistema nacional en el que participan la federación, gobernadores y procuradores!. Y, ¡todo sigue igual!.
Éste es el punto central: En México se supone que todo se resuelve si se crean “instrumentos” o “comisiones”, pero todo sigue igual, todo sigue igual. Se preguntará, ¿Hasta cuándo?…