Develación de monolito en recuerdo de Regina Martínez
MADRID (apro).- Con la inauguración de un monolito en el conocido Paseo Veracruz, la ciudad de Oviedo rindió hoy homenaje a Regina Martínez Pérez, la corresponsal de Proceso en Veracruz asesinada el 28 de abril del año pasado.
Antes de develar la placa del monolito, el alcalde Agustín Iglesias Caunedo expresó el apoyo municipal a toda iniciativa, “como este reconocimiento a Regina Martínez, que ponga de relieve la absoluta necesidad de una verdadera libertad de prensa. Y condeno firmemente, como no puede ser de otro modo, el atentado que terminó con su vida, y me sumo al recuerdo de su obra periodística”.
En la placa del monolito, develado por Iglesias Caunedo y la cónsul honoraria de México en Bilbao, Carmen Vigil, se lee: “El Ayuntamiento de Oviedo a Regina Martínez Pérez periodista asesinada en Veracruz (México) el 28 de abril de 2012. En reconocimiento a los periodistas y a la importancia de su labor profesional para el desarrollo de la democracia”.
El alcalde resaltó que Regina Martínez era “una maestra de la palabra, experta en periodismo de investigación, que trabajó durante décadas en Veracruz, ciudad hermanada con Oviedo. Su compromiso por la libertad la llevó a especializarse en temas de corrupción y narcotráfico, por desgracia habituales en el lugar donde residía, y ello originó que fuese asesinada en su propio domicilio”.
El monolito en homenaje a Regina, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava, está ubicado en un área verde del Paseo Veracruz, muy cerca de la estación de tren Llamaquique y del Palacio de Exposiciones y Congreso de Oviedo, y a unos pasos del Instituto Áramo, un colegio de bachillerato mixto.
Iglesias Caunedo, de las filas del Partido Popular (PP), subrayó que la placa es “un cauce para honrar la memoria de Regina Martínez, para reivindicar su compromiso con la libertad y, también, para tener muy presente la necesidad de defender una prensa libre como paso indispensable para una sociedad democrática, transparente y comprometida la con la justicia”.
La iniciativa de erigir el monumento en homenaje a la corresponsal de Procesoprovino de la concejal del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Laura Díez Prieto, abocada a temas sociales, en particular sobre género, quien lo propuso el 3 de mayo, día de la Libertad de Prensa, luego de darle seguimiento a las informaciones sobre el asesinato de Regina.
El resto de las fuerzas políticas –PP, PSOE, Foro por Asturias e Izquierda Unida-Verdes– se sumaron a la propuesta, que fue impulsada por unanimidad.
Díez Prieto dio lectura en el acto a un texto de la revista Proceso: “Así era Regina…”, escrito por la periodista Verónica Espinosa, en conjunto con otros corresponsales nacionales, donde se describen los rasgos más personales de la reportera veracruzana.
“Yo quise leer ese texto de Proceso, que describe a Regina Martínez como era, una mujer discreta, pero certera en su trabajo profesional. Valiente”, dijo al corresponsal.
Recordó el pasaje como la describe el periodista Luciano Campos: “Detrás de los grandes lentes de intelectual ochentera, sus ojos escrudriñaban todo. Los rasgos indígenas permanecían obstinadamente impasibles. Curveaba la boca un poco en los buenos momentos. Creo que cuando estaba de buen humor sólo sus ojos reían. Quizás las personas más cercanas a ella tengan otra imagen. Yo me quedo con ésta, la de la mujer discreta que arrostraba con determinación y orgullo íntimo la dura carga de informar desde el territorio comanche en que se convirtió Veracruz”.
En su intervención, la periodista del diario La Nueva España, Pilar Rubiera, leyó que, como la describe un compañero de Proceso, Regina era “una periodista promedio, como la mayoría que ejercen este oficio. Una reportera forjada a base de experiencia, de nota diaria, que trabajó durante años para el diario La Jornada y después para la revista Proceso”.
Lamentó que desde su muerte “entró a formar parte de la estadística. En el año anterior a su muerte, cuatro periodistas habían sido asesinados en Veracruz. El ejercicio del periodismo en México se ha convertido, como dicen algunas organizaciones de derechos humanos, en una profesión de ‘alta peligrosidad’. Desde el año 2000 han sido asesinados 82 periodistas y 14 han desaparecido”.
Rubiera resaltó que Oviedo, ciudad hermanada con Veracruz, rinde homenaje a Regina, afortunadamente con la unanimidad de todas las fuerzas políticas representadas en el Ayuntamiento.
“Y aunque lleva su nombre, el de Regina Martínez, rinde tributo también a todos los hombres y mujeres que han perdido la vida tratando de contar lo que pasa. O lo que es lo mismo, lo que unos hacen a los otros”.
FUENTE: PROCESO