PLUMAS LIBRES
Xalapa,Ver. Hace dos años Gaby Benítez Ibarra salió de su casa por la mañana. Nunca regresó con vida. Tres meses después del día en que desapareció, su cuerpo fue hallado en el Santuario de las Garzas, en Xalapa. Su fotografía se convirtió en un emblema de exigencia de justicia y un dolor “parido por el Xalapa violento”. Una ciudad golpeada por la violencia. Gaby se convirtió en el rostro de los desaparecidos, de quienes ni siquiera se tiene una cifra exacta, pero que todo “mundo lo sabe“.
“Desde esta Plaza Lerdo hago un llamado al gobernador Javier Duarte de Ochoa, quien seguramente no recuerda quien soy y que tampoco recuerda el caso de mi hija Gaby, porque para él sólo es una cifra, otra cifra en los índices de violencia del Veracruz Seguro… Sin embargo, mi hija y los otros jóvenes desaparecidos tienen gente que los ama, por eso estamos aquí exigiendo justicia, justicia para mi hija Gaby y para que no haya más desaparecidos… para que no haya ni una desaparecida más”, fueron las palabras de Bárbara Ibarra, la madre de Gaby.
Bárbara Ibarra leyó esa carta dirigida al gobernador en la Plaza Lerdo, porque su hijo menor de edad intentó entregarla en Palacio de Gobierno y “ni siquiera le permitieron el acceso”.
Han pasado dos años, y no hay avance en las investigaciones.
“No hay nada aún, yo quiero que haya justicia para mi hija, que se dé con los responsables, pero no hay nada todavía”.
No obstante, la criminalización de las víctimas es la línea de investigación más recurrente de parte de las autoridades.
“Por su puesto que se criminaliza a las víctimas y a sus familiares, porque nos dicen que quien sabe en qué pasos andaban nuestros hijos… la mayoría de ustedes vivieron todo lo que se dijo del caso cuando en el momento que nos empezamos a manifestar familiares y amigos pidiendo que Gaby apareciera, la Procuraduría emitió un comunicado diciendo que era un problema de violencia familiar, y trataron de minimizar mucho el caso”.
Ante la falta de respuesta por parte de las autoridades, Bárbara se unió a la Caravana por la Paz, con Javier Sicilia. Javier Sicilia estuvo en Xalapa el domingo 18 de septiembre de 2100. El viernes siguiente, 23 de septiembre, el cuerpo de Gaby fue hallado en el Santuario de las Garzas, lugar que fue revisado en varias ocasiones por policìas en busca del cuerpo de Gaby
Vecinos del lugar dijeron sospechar que el cuerpo tenía pocos días en el lugar, “como si lo hubieran ido a dejar ahí”, pues nadie notó su presencia pese a su avanzado estado de descomposición.
Ante los hechos, el discurso de las autoridades fue que los padres debían cuidar dónde andaban sus hijos.
Hace dos semanas en la misma Plaza Lerdo se manifestaron 21 padres de familia que buscan a sus 21 hijos desaparecidos. Las autoridades negaron que sean 21 los desaparecidos en Xalapa.
“Las autoridades minimizan lo que pasa y no admiten que el fenómeno de las desapariciones ha crecido mucho… No toman conciencia de ello ni lo quieren aceptar… Nosotros como ciudadanos no debemos permitir esto más… Y nosotros como padres de familia tenemos todo el derecho a exigir que se nos explique qué está pasando con nuestros hijos, ellos tienen la obligación de buscarlos, tienen la obligación de procurar la justicia”.
El llamado es también para los padres de los jóvenes desaparecidos “para que no se dejen caer, que estemos unidos”.
¿En dónde están los desaparecidos?
“Cada día al levantarme pido al Señor –Dios- que este día no sea igual que los otros, que hoy sí tenga noticias de mi hija… ya nada es igual, desde que mi hija desapareció se nos han ido las ganas de vivir… nuestro cuerpo fueron cercenado interiormente. Es una herida tan profunda que nos está acabando lentamente”, expresó Pedro Mavil, padre de Gemma, una joven xiqueña, de 29 años desaparecida en Xalapa en mayo de 2011.
“Todos los días me pregunto en dónde está mi hija, si tendrá pan que llevarse a la boca, en dónde estará… Sin embargo aún tengo fe en que mi hija aparezca, que va a regresar… mientras no halle el cuerpo de mi hija tengo la esperanza de que regrese a casa… Le hago un llamado al gobierno para redoblar esfuerzos y que nuestros hijos sean buscados, que no investiguen y abran líneas diciendo que con quien andaban, ¡que los busquen!”, pidió Pedro.
La Plaza Lerdo de Jalapa fue testigo nuevamente del dolor de los padres que buscan a sus hijos. Los testimonios de sumaron, las mantas y las fotografías de los desaparecidos; la foto de Gaby -desaparecida en junio de 2011-, de Irene Méndez Hernández –asesinada en 2010-, de Karla Nayeli Saldaña–desaparecida en noviembre de 2011-, Gemma –desaparecida en mayo de 2011- volvieron a ser testimonio y a dar rostros a los desaparecidos de los que sólo se sabe por cifras.
“En el caso de Bárbara y el mío ya no tenemos esperanza de que regresen con vida nuestras hijas, están muertas… pero tengo una esperanza, la esperanza de que un día, aunque yo ya no lo vea, mi país ya no sea el que es hoy: un país de injusticia y de impunidad”, expresó Esther Hernández Palacios.
Esther Hernández Palacios refirió que aunque los discursos de los gobiernos sean alentadores, cifras de Naciones Unidas revelan que en México, el 92 por ciento de los casos de desapariciones quedan impunes.
“No hay respuesta de los gobiernos respecto a los asesinatos y desapariciones… México es un país sin justicia, y si olvidamos y no exigimos, lo seguirá siendo”.
2 respuestas a Pedimos justicia para Gaby y no más desaparecidos: Barbara Ybarra