La nuevas inversiones millonarias a Veracruz, la
generación de 200 mil empleos y la disminución de la violencia criminal
desatada tras su toma de posesión, serán los principales ejes del segundo
informe de labores del gobernador Javier
Duarte de Ochoa.
No obstante, datos duros revelan que más allá de estos
supuestos logros, algunos ajenos al a la acción gubernamental, persisten
rezagos y problemas profundos, así como “promesas incumplidas”.
El primero de diciembre de 2010, al tomar protesta del
cargo en la sede del Congreso de Veracruz, el mandatario anunció: “quiero
anunciar, que cumpliendo con los compromisos asumidos en campaña, en tan sólo
unas instantes más, daré arranque formal a la construcción de la autopista
Tuxpan-Tampico”. Se trata de una obra pendiente hasta ahora.
También propuso: “entre otras acciones inmediatas,
incorporaremos a 700 escuelas de educación básica al modelo de escuelas de
tiempo completo, y emprenderemos un extenso programa de equipamiento de los
espacios educativos”. Según datos de la propia SEV -con fecha de hoy-, van
apenas 294 escuelas incorporadas a este programa.
En este mismo rubro, anunció: “desarrollaremos un
extenso programa de becas para que ningún estudiante, de ningún nivel, abandone
sus estudios por falta de recursos económicos”. En contraste con el discurso,
datos del propio Pronabes revelan una disminución de los recursos y las becas
en el año 2011 y 2012 para Veracruz. En promedio, cada uno de estos años se han
dado cuatro mil becas menos que en 2009. Y su entrega ha estado envuelta en
problemas de retrasos, lo que ha llevado a la deserción de estudiantes.
Para los egresados, prometió: “crearemos el Programa
‘Primer Empleo’, para que los nuevos egresados de educación superior y otras
carreras puedan contar con un bono mientras se incorporan a su primer trabajo.
¡Los alumnos y maestros veracruzanos tendrán en el Gobernador DE VERACRUZ a su mejor aliado!”.
En materia de salud, el mandatario añadió: “hoy día,
uno de los principales problemas de salud es la de mortalidad materna. Me
comprometo a que en los primeros dos años disminuiremos el número de casos por
abajo de la media Nacional”. Apenas en agosto de este año, el Colectivo de
Investigación, Desarrollo y Educación entre Mujeres (CIDEM), planteó la
posibilidad de solicitar una alerta de género por muerte materna en Veracruz,
por estar encima de la media nacional.
El gobernador abundaría en su discurso: “iniciaremos
de inmediato la construcción del Hospital de atención Materno Infantil en esta
ciudad de Xalapa”. Sigue pendiente el inicio de obras.
“Así mismo, quiero anunciar la creación del Hospital
Regional del Sur de alta especialidad, que brindará atención a nuestra gente de
Coatzacoalcos y de todo el sur de nuestra entidad”, apuntó el mandatario.
Debido a que aún no se construye, dicho proyecto fue retomado por el
entonces candidato presidencial Enrique Peña Nieto como
compromiso de campaña, durante su visita a Veracruz.
Y las promesas son variadas.
Como ejemplo, la promesa de afiliación de todas y
todos los veracruzanos al seguro popular en lo inmediato o la oferta: “daré
todo mi respaldo a las madres solteras, a las viudas y a las esposas de
trabajadores migrantes, otorgando vales canjeables por alimentos para que sus
hijos tengan una mejor nutrición”.
Para los pueblos indígenas, anunció:
“Apoyaremos los proyectos de las comunidades
indígenas, aportando tecnología, capital, asesoría y maquinaria, con pleno
respeto a sus costumbres”.
A los ancianos:
“Impulsaré la creación del Programa ‘Aprovechando tu
Experiencia’ para la contratación en las instituciones públicas de adultos
mayores que no cuentan con trabajo, jubilación o pensión”.
En materia de seguridad, Javier Duarte prometió una profesionalización y certificación
de todos los cuerpos de seguridad e instituciones, incluidas las de
procuración de Justicia.Hoy en día, según los
reportes del Secretariado del Sistema Nacional de Seguridad Pública, aún tiene
rezagos.
Como colofón, entre otras decenas de promesas,
sostuvo:
“Me comprometo a que en un plazo no mayor a 12 meses
se concluyan todas las acciones de reconstrucción en el Estado de Veracruz.
Ningún desastre, por grande que sea, podrá dejar desprotegida a nuestra
población”. Hasta el 2012, las obras de reconstrucción todavía no concluyen.
Por otra parte, lejos de decrecer, la deuda pública de
Veracruz sigue aumentando, por la adquisición de nuevos créditos y
bursatilizaciones para afrontar la crisis heredada por su antecesor en el
cargo, Fidel Herrera Beltrán. En
marzo, la calificadora Fitch Ratings había estimado la deuda veracruzana en 37
mil 172 millones de pesos. Y desde entonces se han hecho ajustes y
restructuraciones.
En materia de pobreza, no existen datos oficiales para
medir el impacto de los programas estatales. La única cifra actualizada oficial
es la del Consejo Nacional de Evaluación que estimó que tan sólo en 2010 se
incorporaron 600 mil veracruzanos más a la lista de pobres.
En materia de seguridad, aún cuando algunos grupos
criminales se desplazaron de los centros urbanos hacia las zonas rurales, la
violencia persiste y es cotidiana. Incluso, otros han tomado posesión de
“plazas” como la de Veracruz puerto, en donde han comenzado su expansión pese
al blindaje de las Fuerzas Armadas. Lo mismo sucede en casos como Xalapa,
cercada por corporaciones de seguridad para evitar la movilidad de los grupos
delictivos que están al acecho, y regiones como la Huasteca, actualmente se
encuentran fuera de control de las autoridades.
En octubre, el comandante de la Tercera Zona Naval, Victor Manuel Gamboa Carvallo, estimó
que tan sólo el saldo del operativo Veracruz Seguro implementado en septiembre
de 2011, dejó mil 351 muertos.
La violencia que agobia a los ciudadanos y en especial
a los periodistas, está lejos de decrecer y a la fecha, varios han dejado el
estado o desertado de la profesión. Otros
realizan sus actividades resguardados por escoltas, en tanto que las amenazas
contra periodistas se han agudizado.
Los datos oficiales
De acuerdo con el INEGI, de 2011 a 2012, se han creado
200 mil nuevos empleos en Veracruz, al pasar de 2.9 millones a 3.1 millones.
Hace unos días el gobernador Javier Duarte de Ochoa declaró triunfal:
“Apenas llevamos dos de estos seis años y ya vamos con
200 mil nuevos empleos”.
También resaltó la instalación de 440 “grandes
empresas que decidieron invertir en Veracruz”, así como de miles de “micro,
pequeñas y medianas empresas”.
Entre las inversiones destacadas, mencionó a la del
consorcio Braskem-Idesa, en el sur de nuestro estado, en la zona de
Coatzacoalcos, “que están invirtiendo tres mil 500 millones de dólares en el
proyecto Etileno XXI o en la ciudad de Veracruz, donde grupo Tenaris-Tamsa está
ampliando su infraestructura con una inversión multimillonaria que ha permitido ampliar
también su base laboral”.
Anunció otras más como la de la Nestlé, que construirá
una nueva planta “y la llegada de armadoras de vehículos” en el puerto de
Veracruz.
También resaltó próximas inversiones para la
construcción de la terminal marítima de Tuxpan, donde participa ICA en la
construcción del puerto profundo con escolleras y dársena, y el Grupo TNM, que
“está haciendo también la parte que corresponde en su otra terminal de
contenedores”.