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º Director del IPE cabildea salidas
º Volver a un IPE productivo…
Luis Velázquez
Veracruz, México., 04 de diciembre de 2012.-- PASAMANO: las
pensiones en Veracruz y en el país se han convertido en un asunto de
seguridad nacional… Y en el caso del Instituto de Pensiones en la tierra
jarocha, IPE, cada mes están tocando fondo…
Cierto, con todo y lo que se diga, el góber fogoso, Fidel Herrera
Beltrán, reformó la ley para establecer un tope máximo a las pensiones,
pues ahora, con el sistema convencional, mientras por un lado hay
burócratas jubilados con unos, digamos para ser optimistas, 5 mil pesos
mensuales, otros, en cambio, perciben hasta cien mil pesos mensuales…
Así, el tío de Nopaltepec estableció que las pensiones tendrían un tope
máximo de hasta 40 mil pesos… Pero hasta dentro de 25 años, es decir, en el
año 2035, cuando, de continuarse así quizá el mismo IPE habrá desaparecido…
De ahí el peso descomunal que viene cargando el director del IPE, el
maestro Armando Adriano Fabre, cabildeando como una obsesión tanto con los
dirigentes sindicales integrantes del consejo de administración del IPE
como con el gobernador para encontrar una salida lo más pronto posible...
Un equipo de expertos analiza soluciones al caso Veracruz, y han
planteado, por ahora, el sistema de las cuentas individuales, pero unos
líderes la han rechazado, y ni hablar… De igual manera han puesto en la
mesa una alternativa paramétrica, basados en el siguiente dato: si los
mexicanos han aumentado su calidad de vida y ampliado los años de vida,
entonces, incrementar en automático el número de años para jubilarse, al
mismo tiempo que la cuota mensual para la pensión correspondiente…
BALAUSTRADAS: de norte a sur del país, las entidades federativas tienen
gigantescos hoyos en el sistema de pensiones, y por añadidura, en la deuda
pública que arrastra la toma de decisiones…
En el caso de Veracruz, por ejemplo, el director Armando Adriano sopesa
la posibilidad de, en efecto, seguir cabildeando con un tope a las
pensiones, pero al mismo tiempo, crear un impuesto especial para las
jubilaciones, pues cada mes rezan a un ser superior puedan salir adelante,
como en el caso del mes de diciembre que corre en que deberán pagar 789
millones de pesos en sueldos y aguinaldos, tanto para los trabajadores en
activo como los jubilados… Incluso, plantea la posibilidad de, por ejemplo,
que el IPE vuelva a sus orígenes, en el sexenio de Rafael Hernández Ochoa,
y establezca empresas paraestatales como fuente de ingresos permanente…
Digamos, unas gasolineras como en su tiempo, en el siglo pasado, las
tuviera la Universidad Veracruzana… Incluso, unas franquicias de
restaurantes… Y/o en todo caso, legislar para que algunas carreteras
estatales sean concesionadas en sus casetas al IPE…
Volver, por ejemplo, a la cadena de cines que tuviera el IPE en aquel
sexenio, cuando el maestro, contador y licenciado, José Luis Lobato Campos,
hiciera productivo al instituto… Otra circunstancia, por ejemplo, sería
vender el montón de terrenos y lotes propiedad del IPE (muchos, no
obstante, pedacerías) para capitalizarse, pero con miras a invertir en un
negocio productivo… Y, bueno, tener la confianza del Congreso local para
acortar los años fijados por la ley fidelista de un tope a las pensiones y
aplicarlo lo más pronto posible, a la voz de ya… Y es que, se insiste, hay
políticos que dejaron su vida en la administración pública estatal, y al
mismo tiempo, eran académicos en la UV, y cobran pensiones millonarias,
además de que todavía siguen trabajando…
ESCALERAS: quizá ahora con Enrique Peña Nieto en Los Pinos pudiera
darse la siguiente coyuntura: un gurú del presidente es Pedro Aspe Armela
con su despacho de asesoría tanto en la deuda pública como en el sistema
pensionario del país… En tal despacho laboraba Luis Videgaray Caso,
secretario de Hacienda y Crédito Público, y trabajaba Fernando Aportela,
quien fuera subsecretario de Finanzas y Planeación en el sexenio de Miguel
Alemán Velasco y saliera de la dependencia luego de una intriga del
subsecretario Sergio Maya Alemán. Hoy es subsecretario de la SHCP… Habría
así de recordar que Luis Videgaray llegó al estado de México en el gobierno
de Peña Nieto, enviado por Aspe Armella, para arreglar el problema de la
deuda pública… Y, bueno, la historia es conocida, pues fue contratado como
titular de SEFIPLAN, luego pasó a diputado federal y ahora ocupa la misma
silla de Pedro Aspe en el salinismo… En tales circunstancias, el despacho
de Aspe pudiera de igual manera ser contratado, además de regularizar la
deuda pública del sexenio próspero, para dar una salida al problema de las
pensiones… Incluso, se trata de una inquietud que anda latiendo en el
director del IPE, Armando Adriano, pues de ese tamaño es el atolladero…
POSDATA: Más información en el blog.expediente.mx
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