Ciudad de
México, 23 de junio (SinEmbargo).- Grupos civiles y pobladores de 11
estados de la República hicieron un llamado a los ciudadanos de todo el
país, que se hayan visto afectados por proyecto como la construcción
de hidroeléctricas y gasoductos, y sobre todo por el uso de la
fracturación hidráulica, fracking, en pozos de todo el país a conformar un
frente común en defensa del agua y del territorio.
“Los pueblos de la sierra, valles, costas y llanuras no
permitiremos la entrada a ningún proyecto de muerte (hidroeléctricas, trasvases
de cuencas, gasoductos, minería, deforestación, fracking o transgénicos) a
nuestros territorios”, advirtieron varias organizaciones civiles en un
comunicado. La mayoría de estos grupos, como la Alianza mexicana contra el
Fracking, el Centro Pro Derechos Humanos, tienen presencia nacional.
Aseguraron que este tipo de proyectos “sólo son una parte de un
plan energético orquestado desde las grandes corporaciones nacionales y
extranjeras con la complicidad del Estado mexicano para perpetrar el despojo,
devastación y exterminio de la vida”.
“Levantamos enfáticamente la voz para afirmar que no queremos la
guerra que nos han declarado, ustedes son los verdaderos terroristas,
seguiremos en resistencia y defenderemos la vida de los proyectos de muerte”,
advirtieron.
Organizaciones sociales, movimientos y habitantes se reunieron en
el Encuentro Regional Norte-Golfo en Defensa del Agua y el Territorio,
celebrado en Papantla, Veracruz, para denunciar que los tres niveles de
Gobierno, en complicidad con empresas nacionales y extranjeras, han sido parte del
“genocidio que se está viviendo en varias de la regiones, pueblos, municipios y
estados” de México con proyectos como la explotación de pozos de crudo a través
de la técnica de la fracturación hidraúlica, fracking.
Veracruz, es la entidad con el mayor registro de yacimientos
explotados a través del fracking, según la información de Pemex [de 2013 a la
fecha, unos 349 yacimientos han sido fracturados con esta técnica].
En Papantla, los asistentes al encuentro, alertaron de la “amenaza
que sufren todos los días, las y los compañero por la presencia de varios pozos
de extracción de hidrocarburos y tres turbinas de compresión, con sus
respectivos pozos de venteo, afectan la salud humana y ambiental de esta zona”.
Sin embargo, los activistas y habitantes indicaron que el de esta
comunidad no es el único caso, ni tampoco el fracking, el único proyecto que
pone en riesgo las tierras y la vida de diversas comunidades en todo país, por
lo que hicieron un llamado a otras personas que “están siendo afectados a sumarse
y articularse con luchas de resistencia y en la defensa del territorio
mexicano”.
Señalaron que este encuentro, realizado durante el pasado fin de
semana, y del cual hoy dan cuenta diversas organizaciones, es el primero de
muchos. “Seguiremos fortaleciendo la resistencia, haciéndonos un mismo CORASON
con las mujeres y hombres en lucha, continuaremos sembrando semillas de
dignidad, solidaridad y esperanza colectiva, entre niñas, niños, jóvenes y
adultos”, sostuvieron.
El encuentra estuvo organizado por la Alianza mexicana contra el
Fracking, el Centro Pro Derechos Humanos, la Red Unitaria por los Derechos
A.C., Fundar, Centro de Análisis, Voz Campesina, Barzón, la Coordinadora de
Organizaciones Campesinas e Índigenas de la Huasteca Potosina, entre otras.
“Defenderemos con dignidad y con nuestra vida este territorio,
regalo de la naturaleza y de nuestros ancestros. En él está sembrada nuestra
raíz que seguirá dando fruto para alimentar a nuestros hijos e hijas, nietas y
nietos. Somos el agua que bebemos, el aire que respiramos, la milpa que nos
nutre, la lengua que hablamos, los rostros en que nos reflejamos; somos todos
los elementos desde los cuáles construimos nuestra identidad y transcribimos la
profunda riqueza de nuestra experiencia de lo humano”.
Organizaciones como la Alianza contra el Fracking, han alertado
que en las comunidades donde se ha utilizado el fracking, donde en la mayoría
de los casos Pemex no ha informado a la población de sus actividades, se ha
violentado el derecho a la vida, a un medio ambiente sano, pero sobre todo su
derecho a la información. También alertaron que con la Reforma Energética –con
la Ronda Uno y Cero que ya están en marcha– esta práctica lejos de ser regulada
será cada más utilizada.
LA SITUACIÓN EN PAPANTLA
En el Ejido de Emiliano Zapata, los habitantes han tenido que
convivir con al menos 62 pozos alrededor de la comunidad, así como soportar el
ruido de unas tres turbinas de compresión de gas de Pemex.
“La columna de fuego que asoma de estos pozos alcanza decenas de
metros de altura, anulando con su brillo la noche y ensordeciendo con su ruido
cualquier otro sonido”, detallaron algunos habitantes. Quienes
responsabilizaron a la paraestatal de los daños que sufren sus comunidades
debido a la explotación de pozos a través del fracking.
“Estamos informados que tan solo en Papantla, desde 2003 a la
fecha, han sido perforados 172 de los 349 pozos”, sostuvieron.
Por ello, exigieron “al Estado Mexicano, a PROFEPA [Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente] y a PEMEX la cancelación definitiva de la
turbina y el quemador que se encuentran en el interior del Ejido Emiliano
Zapata”.
Además acusaron al Gobernador de la Veracruz, la entidad Javier
Duarte de Ochoa de mantener una “campaña de terror y persecución” contra
activistas ambientales.
Denunciaron también la persecución y criminalización de las y los
cuidadores de los pueblos y de la madre tierra; en específico la campaña de
persecución y criminalización de los compañeros Gumercindo González, Felipe
Gutiérrez.
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