Por Andrés Gómez Ojeda
En pleno proceso electoral, el show
político en la entidad veracruzana se ve envuelto en un escándalo en donde denuncia
el PAN a una red de funcionarios públicos y lideres priistas evidenciados en el
uso de los programas para fines electorales. Como respuesta el PRI revira con
una denuncia a los Yunes linares por haber utilizado el programa de oportunidades
en el pasado proceso electoral.
Todo este vendaval de acusaciones hace
entrever que la guerra sucia esta a la orden del día. Los veracruzanos tenemos
un gobernador que no ha estado a la altura de las circunstancias y de la
situación prevaleciente, no ha tomado el timón para poner orden, quedando muy
mal ante la opinión pública, tanto nacional como internacional.
Es lamentable que una vez más las
instituciones sean deterioradas por funcionarios irresponsables que se prestan
a manipular los programas federales y peor aún, cuando son protegidos y reciben
el espaldarazo, como es el caso de Rosario Robles, entre otros.
Mientras tanto el PAN y el PRI se dan
con todo el lodazal, se enfrascan en una pelea política, en donde la arena
entretiene a los espectadores ilusionados por un verdadero cambio en la entidad
veracruzana, pero lo único expectante son acciones que no tienen que ver con dar
a conocer su proyecto ideológico. Lo que menos tienen las campañas políticas es
un debate de altura y de carácter ideológico. Lo que menos importa son las
ideas.
Por otro lado, Veracruz es el escenario
de dos personajes de intereses oscuros (Fidel Herrera Beltrán y Miguel Ángel
Yunes Linares), ambos del mismo origen partidista, aunque el segundo ya este
con el PAN, sigue pensando y actuando igual. Los dos son polémicos, han hecho
de la política su gran negocio, enriqueciéndose a costa del erario público,
ejemplos de funcionarios que forman parte de gobiernos neoliberales corruptos.
Por eso considero que este show político
solo adormece las conciencias, es una cortina de humo para que los veracruzanos
no entremos analizar de fondo las verdaderas propuestas de estos partidos
políticos, tanto el PRI, el PAN e incluso el PRD, tienen un proyecto neoliberal
coincidente. Para nadie es extraño que en este juego democrático el jefe del
ejecutivo federal Enrique Peña Nieto haya convocado a las 3 principales fuerzas
políticas para firmar el pacto por México, que es un cheque en blanco para que
el Gobierno Federal lleve a cabo las reformas estructurales (política,
hacendaria, laboral, educativa, etc.)
El PRI ha traicionado sus principios ideológicos,
hoy convertido en el impulsor de las reformas neoliberales y desde 1982 el
artífice del proyecto modernizador, al igual que el PAN en sus dos sexenios.
Los legisladores de estos partidos políticos votaran juntos, al igual que los
perredistas. ¿Entonces que pelean? Al final de cuentas tienen coincidencia
ideológica. El PRD se vuelve cómplice no solo por firmar el pacto de Peña
Nieto, sino por callar lo que significan las reformas estructurales y por no
decir nada sobre la reforma hacendaria que pretenden legislar y después del 7
de julio aplicar el IVA a los alimentos y medicinas.
El Pacto por México es una camisa de
fuerza para que el proyecto privatizador se imponga en todos los rubros, se están dando esas reformas y hoy se
legisla para entregar los litorales a los extranjeros ¿Quién dice algo
sobre este asunto?...
Concluyó diciendo que las campañas
electorales, además de ostentosas, son engañosas, pero además el ultimo
ingrediente en Veracruz, es que son escandalosamente corruptas. Los gobiernos
de los tres niveles deben entender y sacar las manos del proceso electoral o
seguiremos los ciudadanos siendo rehenes de una clase social manipuladora y
mentirosa.
Veracruz se encuentra bajo la mirada
de una opinión pública nacional e internacional y que es conocido por la
violencia, inseguridad de la labor periodística y el menoscabo de las
instituciones….
Andrés Gómez Ojeda
FRENTE POPULAR
REVOLUCIONARIO (CÓRDOBA)
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