23 de mayo de 2012

Indígenas reprochan a Duarte promesas incumplidas y lo tachan de mentiroso

LO TACHAN DE MENTIROSO
Alrededor de 200 indígenas de la congregación de Atzompa, perteneciente a la cabecera municipal de Soledad Atzompa, en la sierra de Zongolica –uno de los tres más pobres del país–, viajaron a esta capital para repudiar al gobernador Javier Duarte de Ochoa y exigirle el cumplimiento de obras prometidas al inicio de su administración.
 
“Da la cara por lo menos, aunque sea asómate por el balcón. Ah mí me da pena, hoy nos arrepentimos de haber votado por ti”, gritaba, megáfono en mano Porfirio de Jesús Candelario, uno de los pocos habitantes de Atzompa que “mastica” bien el español.
 
Con camionetas de redilas sellaron la Plaza Lerdo, ocuparon dos carriles de la avenida Juan de la Luz Enríquez y, frente al Palacio de Gobierno, demandaron al gobernador Javier Duarte y a sus secretarios a cumplir lo que prometieron. “Bola de mentirosos”, le gritaron.
 
Llegaron en bola; en lugar de machetes portaban banderines rojo, azul y amarillo. Cada color significa el partido político en el que militan. “El actual gobierno no nos ha cumplido las obras que nos prometió y que nos firmó en documentos. Son unos mentirosos”.
 
Los inconformes reclaman el incumplimiento de la construcción del camino Circuito y del camino Cruztitla-Tetlazinga, de tres kilómetros, comprometidas por la Secretaría de Comunicaciones; de redes de drenaje de agua potable prometidas en minuta ante la Comisión de Agua del estado con una inversión de ocho millones; y proyectos productivos por la Secretaría de Desarrollo Social del estado.
 
Rogelio Francisco Pérez, líder de comuneros de aquella región, recordó que Javier Duarte les prometió en mayo y en junio de 2010 las obras hoy reclamadas. Sin embargo, dos años después, ni una sola piedra se ha colocado.
 
Un grupo de indígenas se atrincheró en las escalinatas de la catedral metropolitana para ser vistos por los peatones y automovilistas; otros más se apostaron a los costados de sus camionetas de redilas para evitar que fueran movidas por grúas de la Dirección de Tránsito y Vialidad, mientras que otro tanto evadía a los custodios de la Subsecretaría de Gobierno.
 
“Lamentablemente esos compromisos se han quedado en el aire, hoy regresamos para reclamar, ya nos quedó (claro) que el gobernador nos da la espalda y sus secretarios se hacen como que no saben nada, es el eterno atole con el dedo”, lamentó Jesús Candelario.
 
Salieron a las cinco de la mañana de Atzomba; 12 horas después llegaron a Xalapa, con el “aliento seco y la lengua escoreada”.
 
“Venimos en ayunas y con coraje”, afirmó Candelario, mientras que sus correligionarios se quejaban de que en Huatusco fueron interceptados por patrullas de la Delegación de Transito, en la entrada a Xalapa. En el municipio de Coatepec un contingente fue detenido y ya no se le permitió llegar a la protesta. En una de las camionetas de ese convoy viaja el alcalde perredista de Atzomba, Cristóbal Vega Cruz.

En la protesta también asoman la cara varios militantes del PRI que hoy se muestran desilusionados de la manera en que está gobernando su compañero de partido Javier Duarte.

“Si se dan cuenta, venimos de todos los colores; no es una marcha partidista, venimos priistas, perredistas, de los azules del PAN y hasta verde, aquí la manifestación es de todo el pueblo, aunque sí somos más del PRI los que aquí estamos protestando”, reveló Gabriel.
 
A pesar de ser intimidados por custodios de la Subsecretaria de Gobierno, los comuneros de Atzompa advirtieron que no se retirarán hasta que haya una respuesta concreta a las obras prometidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario