15 de octubre de 2014

BUGANZA Y AUDIRAC, PROMETEN LOS PEORES JCC 2014



FUERA DE FOCO
Por: SILVIA NÚÑEZ HERNÁNDEZ
Trabajadores del Grupo Corporativo Urbis S.A. de C. V. se mantienen de brazos caídos desde hace una semana, luego que dicha empresa no ha podido pagarle sus salarios por sus servicios desde hace varios meses atrás. Es importante advertir es ésta la encargada de realizar la remodelación en las sedes que se utilizarán para los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2014, qué a escasos 29 días, el gobierno del estado de Veracruz ha incurrido en morosidad y no ha liquidado el monto total de la inversión proyectada en la licitación presentada por la inmobiliaria, que oscila en más de siete millones de pesos.

Por medio de una denuncia anónima, se advirtió sobre cómo el gobierno del estado de Veracruz a cargo de Javier Duarte de Ochoa no le ha querido pagar a Grupo Corporativo Urbis S.A. de C.V., perjudicando a alrededor de 400 trabajadores que dependen de dicha empresa. La falta de pago ha sido pareja a todo el personal y perjudica tanto ingenieros, operadores, contadores, albañiles, secretarias, etc.

El denunciante indica que pese a la morosidad, la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP) a cargo de Gerardo Buganza Salmerón, los presiona para concluir lo más rápido posible, pues aluden tener las fechas ya encima. Claro, pero quieren sorprender a quien es propietario de la inmobiliaria, pues argumentan que si no terminan, no les pagan lo que les deben. Es cínico y deshonesto de parte del gobierno duartista pretender aprovecharse de esa manera.

Con este problema de falta de pago, se ponen en conflicto la conclusión de las rehabilitaciones de las sedes y corre el riesgo que por fin, el gobierno duartista sea sacado del espejismo y mundo de “color de rosa” en el que vive. Mire usted amable lector, eso de decir que todo marcha sobre ruedas para los JCC 2014, cuando somos testigos que dicha justa deportiva va a ser una literal decepción tanto para quienes se atrevan a venir desde muy lejos a “disfrutarlo” como para los deportistas.

La cruda realidad le va golpear la cara tanto al gobernante como a los “chafas” organizadores, quienes han demostrado que los JCC 2014 le quedaron muy grandes y permanecerán como los peores realizados en la historia de deportiva de tan importante encuentro. No dudamos en lo absoluto que Javier Duarte de Ochoa volverá estar a ocho columnas en los rotativos, portales de noticias, noticieros y televisoras del mundo, por su desatinado evento. Sus propios “colaboradores” lo volverán a posicionar a la luz pública su desquebrajada y vapuleada imagen.

La cuestión amable lector es que los trabajadores hartos de la falta de seriedad en el pago de sus sueldos –pues argumentan que ni ellos ni sus familias viven del aire- no moverán ni un músculo de su cuerpo para continuar trabajando.

Advierten sobre las obras que quedarán inclusas son:

- El privado del gobernador ubicado en el Word Trade Center, que está literalmente en obra negra.

- El Racquet Club en el cual se están haciendo las adecuaciones para la gesta deportiva –inversión de un millón 200 mil pesos-

- Bolerama ubicado en el interior de Leyes de Reforma –inversión de 27.6 millones de pesos-

- La Arena Veracruz ubicado dentro de Leyes de Reforma –inversión de 109 millones de pesos-

- El estadio de Beisbol Beto Ávila –inversión de 70 millones de pesos-

- Centro de Alto Rendimiento –inversión de 33.3 millones de pesos


Evidentemente, la Secretaría de Finanzas y Planeación a cargo de Mauricio Audirac se han querido pasar de “vivos” al pretender actuar como siempre lo ha hecho en todas las obras proyectadas por la SIOP. Su mal proceder sólo ha originado una serie de paros de labores de parte de los trabajadores sino también de las propias inmobiliarias quienes no tienen la capacidad financiera de continuar subsidiando al gobierno con los materiales que utilizarán en las obras.

Es imperdonable que el gobierno del estado pretenda perjudicar a la clase trabajadora -principalmente albañiles- que son los laboran de sol a sol, esperanzados en obtener su raya semanal –como ellos le dicen a su salario- como para que un funcionario de pacotilla –como Audirac y Buganza- simplemente porque no le interesa que coman más que sus dientes y la de su “amo y señor” –el gobernador- actúe en detrimento de las ellos y sus familias que dependen de ésta actividad.

Al parecer al señor Audirac no le queda claro que al no pagarle a la empresa –en este caso el Grupo Corporativo Urbis S.A. de C. V.- ésta por inercia no podrá pagarles a sus trabajadores su salario y éstos al no percibirlo, pues simplemente no podrá obligarlos a trabajar. Así de simple es la inercia de una mala acción señores funcionarios enquistados en el virreinato. Dejar el cinismo podría ayudarles mucho y más en estos momentos donde tendrán que pagar a la empresa para que les concluyan las obras o en verdad sus Juegos Centroamericanos y del Caribe harán historia en el mundo, pero por ser los peores que se hayan realizado, con instalaciones de tercermundistas y de a “tres pesos”.

Avances en el proceso de Ayil Gamboa

El día de ayer asistimos a la Agencia Segunda del Ministerio Público Investigador a cargo de Cecilia Vela, para conocer los avances sobre la denuncia penal en contra del supuesto cirujano, Juan Carlos Bravo Soriano quien el pasado 04 de noviembre, intervino de un padecimiento en la vesícula a Luciano Enrique Ayil Gamboa, que al llevar a cabo una mala cirugía –cortando la vena cava y otras arterias- cayó en coma provocando que se debatiera entre la vida y la muerte por 16 días, falleciendo el 20 de noviembre del 2013.

En una semana se logró lo que en 11 meses no pudo exigir ni Emperatriz Carlota López Hernández ni Gustavo Huerta Barcelata al perito médico forense, Francisco Delgado Drualliet, el cual había determinado en su primer reporte entregado a la Agencia Segunda del Ministerio Público Investigador qué efectivamente el hoy finado había padecido cortes graves en vena cava y otros arterias importantes, pero que había perecido de manera natural. Acto que originó que la familia respondiera legalmente no estar conforme en su veredicto y que por la tardanza para rectificar su informe forense, fue denunciado ante la Fiscalía Especializada en contra de los Servidores Públicos en la ciudad de Xalapa.

Lo reprobable del asunto, es que su superior, el médico forense, Hugo Alejandro Carrera Domínguez signe sin leer el informe a Drualliet, pues sólo así se le puede justificar que ponga su firma a tal incongruencia. Qué podemos esperar de Carrera Domínguez si se atreve a firmar a su subordinado, un documento repleto de faltas de ortografía, dignas de un párvulo de primaria.

¿O será que se las pasa por qué él está igual o peor? Al menos observamos que este señor sabe escribir correctamente su nombre.

Cómo puede ser posible que un “profesionista”, un doctor supuestamente con una vasta carrera en medicina forense pueda rendir informes con esos graves problemas de ortografía. Se olvida este sujeto que estos serán leídos por el MP, por la familia y todas aquellas instancias involucradas en el caso.

Qué falta de respeto para quienes pagamos su salario, caray.

Quejas y comentarios


Twitter: AGNVeracruz

Facebook AGNVeracruz

Periodismo puntual y con sentido

No hay comentarios:

Publicar un comentario