23/06/2021
A 14 años de la desaparición forzada de Edmundo
Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, hay ocho detenidos en diversos
penales federales y dos prófugos, entre ellos el exprocurador Martínez Ramírez
y el entonces subdirector de la Ministerial, Hernández Hernández.
Oaxaca de Juárez.- Edmundo Reyes Amaya y
Gabriel Alberto Cruz Sánchez, activistas y miembros del Ejército Popular
Revolucionario (EPR), fueron desaparecidos y asesinados por agentes de la
entonces Procuraduría General de Justicia de Oaxaca bajo las órdenes del
exprocurador Evencio Nicolás Martínez Ramírez y el excomandante Pedro
Hernández, según una investigación realizada por la entonces Procuraduría
General de la República (PGR).
La investigación, asentada en la averiguación
previa PGR/SEIDO/UEITA/047/2008 (actualmente
AP/PGR/SDHPDSC/FEBPD/M26/210/2016), concluyó que los dos eperristas fueron
objeto de desaparición forzada por parte de agentes del Estado.
Conforme a los indicios que se desprenden de
las pruebas, el 24 de mayo de 2007, aproximadamente a las 11:30 horas, los dos
activistas fueron detenidos en el hotel Del Árbol, ubicado en la calzada
Francisco I. Madero, en la ciudad de Oaxaca, por servidores públicos adscritos
a diversas dependencias públicas.
Edmundo y Gabriel fueron lesionados por agentes
del Estado; luego trasladados a las instalaciones de la Policía Ministerial del
Estado de Oaxaca, en donde trataron de ingresarlos a los separos el 25 de mayo.
El día siguiente, 26 de mayo, ambos
(probablemente ya sin vida), fueron trasladados al anfiteatro adjunto del
hospital de la Cruz Roja de Oaxaca. Y desde entonces se desconoce su paradero.
La indagatoria de la ahora Fiscalía General de
la República (FGR) también confirmó la participación del Ejército Mexicano, a
través de la octava región castrense en Ixcotel, de la Dirección de Seguridad
Pública, Vialidad y Protección Ciudadana (que en aquel tiempo se llamaba
Secretaría de Protección Ciudadana), de la entonces Policía Ministerial
perteneciente a la hoy Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) y de la
Dirección de Seguridad Pública del municipio de Oaxaca de Juárez.
En la versión de Nadín Reyes Maldonado, hija de
Edmundo Reyes, y de Eduwigis Margarita Cruz Sánchez, hermana de Alberto Cruz
Sánchez, sus familiares fueron detenidos por servidores públicos pertenecientes
a dichas dependencias en el operativo del hotel, para después ser conducidos a
las instalaciones de la Procuraduría
General de Justicia de Oaxaca y posteriormente, ser trasladados al Campo
Militar número 1 por miembros del Ejército Mexicano.
A partir de entonces, nada se volvió a saber
sobre el paradero de los activistas Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz
Sánchez, quienes presuntamente eran miembros del Ejército Popular
Revolucionario.
La Subprocuraduría Especializada en
Investigación de Delincuencia Organizada (en esa época, SIEDO), inició la
averiguación previa PGR/SEIDO/UEITA/047/20083, entonces radicada en la Unidad
Especializada en Investigación de Terrorismo, Acopio y Tráfico de Armas.
“Entre el veinticuatro y el veinticinco de mayo
de dos mil siete, los agraviados Edmundo Reyes Amaya o Andrés Reyes Amaya y
Gabriel Alberto Cruz Sánchez o Raymundo Rivera Bravo o Antonio Montaño Torres
fueron trasladados de manera vedada al interior de las instalaciones de la
Procuraduría General de Justicia del Estado de Oaxaca”, se menciona en la
investigación.
Las pruebas recabadas señalan que el
exprocurador de Oaxaca, Evencio Nicolás Martínez Ramírez, dio órdenes directas
al comandante Pedro Hernández Hernández, quien era subdirector operativo de la
Policía Ministerial y encargado del grupo llamado FEPAR (Fuerza de Reacción
Inmediata).
También están implicados en la desaparición
forzada y asesinato, los entonces directores de Averiguaciones Previas, Gustavo
García Bautista, y Servicios Periciales, Romero Ruiz García; los médicos
legistas Guillermo Morales, Javier Alejo Peralta Sánchez, José Alberto Jiménez
López, Luis Alfredo Neyra Skidmore, Rodolfo Mendoza Ramírez y Dunimih Aparicio
Soriano, así como los preceptores Emeterio Tejada Sánchez y Juan García
Martínez, entre otros.
A 14 años de la desaparición forzada de Edmundo
Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, hay ocho detenidos en diversos
penales federales y dos prófugos, entre ellos el exprocurador Martínez Ramírez
y el entonces subdirector de la Ministerial, Hernández Hernández.
No obstante, hasta el momento la Suprema Corte
de Justicia de la Nación (SCJN) no ha emitido ninguna sentencia respecto a este
caso, de acuerdo con datos del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos
Hasta Encontrarlos.
Ni siquiera, señaló mediante un comunicado
emitido en mayo pasado, la SCJN ha agendado en la lista de temas a discutir el
caso de Gabriel y Edmundo, el cual se encuentra en esta institución, en espera,
desde junio del 2020; y sobre todo sin que se conozca el dictamen de sentencia
propuesto por la juez Margarita Ríos Fargat.
“Este gobierno no pretende ser diferente a los
demás y menos en los temas que se supone ha dicho que son prioridad.
“Esta supuesta importancia de resolver todos
los casos de los detenidos desaparecidos y terminar con la impunidad sigue
ausente para la mayoría en nuestro país y es lamentable que sólo se utilicen
las cifras y los informes para aparentar que este tema es importante, cuando es
un hecho que la situación no ha cambiado”.
El caso, según lo señalan los integrantes del
comité, continúa irresuelto.
https://oaxaca.eluniversal.com.mx/sociedad/integrantes-del-epr-desaparecidos-hace-14-anos-en-oaxaca-asesinados-por-agentes-estatales?fbclid=IwAR1DjxbruqWGgAgwKDaP352sffTZYwMs8OXxSIZgC0BtmrHaFcvF9TbPlHw