Lourdes López
16:45:41 - Xalapa.- Integrantes del Frente Popular Revolucionario protestaron este miércoles por la supuesta desaparición de dos de sus dirigentes quienes, acusan, recibieron amenazas de parte de los colaboradores del Ayuntamiento y del regidor primero del ayuntamiento Jaime Cisneros.
Desde anoche, dijeron, el coordinador del FPR, Gustavo Méndez Gallardo y Francisco Rodríguez Pineda, líder de la organización Vendedores Independientes Veracruzanos (VIVE) fueron interceptados por un grupo de sujetos armados y ahora desconocen su paradero.
Magno Méndez, hermano de uno de los desaparecidos, responsabilizó a las autoridades municipales de cualquier daño que pudieran sufrir ambos dirigentes. Junto con un grupo de colonos, miembros del FPR, Gustavo Méndez efectuó un plantón frente a la sede del poder ejecutivo para solicitar la intervención del gobernador Javier Duarte de Ochoa y que localicen a ambos dirigentes.
Explicaron que uno de .los detenidos, Gustavo Méndez, lo interceptaron al salir de su trabajo en la calle Rafael Lucio, alrededor de las 21 horas y otro fue sacado de su domicilio.
Apuntó que desde febrero han recibido amenazas de golpizas, levantones y detenciones por parte de funcionarios municipales y que por ese motivo han realizado una serie de marchas de protesta y plantones frente a palacio municipal; el último fue precisamente la semana pasada cuando montaron un campamento y reiteraron su reclamo por las agresiones y amenazas a las que han sido sometidos. Los inconformes realizaron un recorrido por el corredor de los bajos del palacio de gobierno y también señalaron que el coordinador de Gobernación Mauro Lozano, junto con uno de sus ayudantes que se identificó como Víctor Germán, acudieron a amenazarlos.
No obstante, cabe hacer mención que hace aproximadamente dos meses, los supuestos desaparecidos estuvieron a punto de ser detenidos por elementos de la Agencia Veracruzana de Investigaciones cuando salían de una reunión con autoridades de Política Regional, de la Subsecretaría de Gobierno.
Sin embargo, en aquella ocasión lograron zafarse y se plantaron en la avenida Enríquez para denunciar lo que ellos consideran que fue un atropello, derivado de las inconformidades generadas porque han demandado espacios para vender en la vía pública y no se los han otorgado.
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