NORMA TRUJILLO BÁEZ
El sindicalismo magisterial en Veracruz, hoy desconocido por sus bases, pasa por una crisis institucional toda vez que está muy fragmentado y desigual, pues mientras hay 95 mil afiliados en la sección 32 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) –calcula Claudio José San Juan, vicepresidente del Frente Nacional de Sindicatos de Trabajadores de la Educación–, existe el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación en México (Sitem), disidente de la sección 56 del SNTE, que cuenta con sólo 36 afiliados, convirtiéndolos en meros feudos de poder personal, por lo que cualquiera de sus negociaciones con el gobierno del estado carecerán de legitimidad.
Los acuerdos cupulares, en caso de ser reconocidos por la base magisterial, pudieran ser sólo para los 45 mil 150 maestros afiliados en activo al Instituto de Pensiones del Estado (IPE), pero éstos no incluyen a los maestros de la sección 32, que son federales y que están afiliados al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), que se estiman en la entidad en casi 95 mil. Con dichos acuerdos se busca debilitar el espontáneo movimiento y afectará a los más pobres que se encuentran en zonas indígenas.
En Veracruz viven 2 millones 132 mil 581 niños de hasta 14 años, que representan 28% de la población de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en 2010; y casi 23 mil planteles para atenderlos, que suman más de 84 mil profesores que no han dejado de manifestarse desde hace más de una semana. Por ello exigen al gobierno estatal que el diálogo se mantenga con las bases magisteriales, no con los líderes.
En Veracruz hay 14 sindicatos magisteriales: el mayoritario y más importante es la sección 32 del SNTE, encabezado por Juan Nicolás Callejas Roldán, hijo del diputado priísta Callejas Arroyo; le sigue en cantidad de afiliados la sección 56, dirigida por Manuel Arellano Méndez con 19 mil 864 afiliados.
El tercero más importante es el Sindicato Estatal de Trabajadores al Servicio de la Educación (Setse), cuya dirigente es la sempiterna dirigente Acela Servín Murrieta, quien ha sido senadora por el PRI y en su gremio se cuentan 9 mil 389 afiliados; el cuarto es el Sindicato Unificador de Trabajadores al Servicio del Estado y del Magisterio (Sutsem) que tiene 5 mil 503 afiliados y están dirigidos por Ricardo Diz Herlindo, de cuyo hijo se dice, tiene una patente de notario público.
Le sigue el Sindicato Democrático de Trabajadores de la Educación de Veracruz (SDTEV), que suma 5 mil 373 afiliados, su representante es Enrique Cruz Canseco. Después, el Sindicato de Trabajadores de la Educación de Veracruz (Sitev) con 2 mil 592 afiliados; el Sindicato Estatal de Trabajadores del Magisterio de Veracruz (Setmav) de Héctor Ramírez Cahue, sobrino de quien fue Subsecretario de Educación Media Superior y Superior y diputado local y federal por el PRI, Marcelo Ramírez, el cual cuenta con 567 afiliados.
El Sindicato Magisterial Veracruzano (SMV) tiene 525 afiliados y es presidido por Luis Alonso Polo Villalobos; luego está el Sindicato Magisterial del Estado de Veracruz (Simev), dirigido por Víctor Luna Zaleta, quien suma 414 afiliados.
El Sindicato de Trabajadores de la Escuela Normal Veracruzana (STENV) sólo tiene 414 afiliados, su dirigente es Daniel Domínguez Aguilar; el Sindicato Independiente de Trabajadores de Telebachillerato y Servicios Educativos (Sitteba), encabezados por Eliseo Islas Chagoya, que suma 328 afiliados.
Los tres sindicatos que cuando menos “no tendrían razón de ser” por tener menos de 150 afiliados son: el Sindicato Magisterial de Orizaba, Veracruz que cuenta con 134 afiliados; el Sindicato de Trabajadores de la Educación (Setev) que tiene 76 agremiados, y es dirigido por Gabriel Reyes Salazar; “pero el más increíble” es el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación en México (Sitem), cuyo líder es Juan Pérez Hernández, quien es disidente de la sección 56 luego de no ganar la secretaría general y se fue a fundar ese sindicato con sólo 36 afiliados.
Y a ello, hay que agregarle que miembros de esos 14 sindicatos estatales han desconocido a sus líderes públicamente y por ello han tomado algunas oficinas.
LA JORNADA VERACRUZ
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