DESARMADOR POLÍTICO
El
gobernador Javier Duarte de Ochoa fue recibido por el jefe del Estado Vaticano
y máximo líder católico Jorge Mario Bergoglio, conocido como el papa Francisco, a quien le expresó el afecto y reconocimiento del
pueblo veracruzano. Durante el encuentro, el mandatario veracruzano queriendo
quedar bien con el líder religioso presentó un programa de apoyo especial en
alimentación para los veracruzanos de escasos recursos. Al parecer Javier
Duarte intenta engañar a los extranjeros de un gobierno incapaz de contener no
solo la violencia, también una gran corrupción en las instituciones, como la Procuraduría
General de Justicia, que hasta ahora ha demostrado incapacidad para dar con el
paradero de decenas de desaparecidos en la entidad y detener los asesinatos
diarios perpetuados por la delincuencia organizada.
Para los veracruzanos no es extraño que la miseria existente,
vaya de la mano con la injusticia social y la desidia de un mandatario estatal
que solo se pasea en el extranjero y que según él, es para promover Veracruz.
Mientras tanto ahí siguen los problemas, en un Veracruz olvidado por sus
gobernantes.
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