Dios bendiga al pueblo de Venezuela, dijo Donald Trump, la bendición que EE.UU. suele usar antes de una invasión militar, se teme y se escucha desde Caracas.
La tensión crece, hay alerta máxima en las fuerzas militares venezolanas. Por un lado, el presidente Nicolás Maduro denuncia los ataques de falsa bandera de una oposición respaldada por Bogotá, Washington y Almagro. Del otro lado de la frontera, Juan Guaidó llama incluso a la opción militar. Desde afuera, EE.UU. amenaza al Gobierno Venezolano, en particular el Consejero Halcón de Seguridad Nacional, John Bolton, y Rusia furiosa denuncia una conspiración de Washington para derrocar al presidente chavista.
Este fin de semana se desencadenaron hechos fuertes y graves, muertos, quema de cargamentos y el rompimiento de relaciones con Colombia, el escenario fue la realización de dos conciertos en las zonas fronterizas y la entrega de cargamentos que los opositores presumían de ayuda humanitaria proveniente de EE.UU. Iván Duque, el presidente colombiano, en un hecho insólito de las relaciones internacionales, le llamó usurpador al presidente de Venezuela, mientras que sigue al pie de la letra los alegatos de Trump.
En Detrás de la Razón, nosotros preguntamos, los analistas contestan y usted en su casa concluye. Y si la realidad hace lo que quiere, entonces nosotros volveremos a preguntar. Lo importante es detectar las aristas que no nos dicen. El análisis, las preguntas y respuestas a las nueve treinta de la noche, desde los estudios de Teherán; Londres, seis y Madrid, siete de la noche; México, doce, y Colombia, una de la tarde.
Por Roberto de la Madrid
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