"Juan Carlos, donde estés quiero que sepas que te quiero. Necesito que aparezcas pronto; no puedo dejar de pensar en ti. Cada día que pasa te lloro y me pregunto por qué eres tú quien está pasando por esto.
Ojalá puedas escucharme y entender la demora en encontrarte. No es porque no te busque ni tampoco porque haya gente a la que no le importes. Todo lo contrario. Es mucha la gente que te quiere sin haberte conocido. Mucha gente que está aquí reclamando por ti.
Siento mucha impotencia porque las autoridades no hacen su trabajo como debieran, para ellos sólo somos un número, una estadística, una pila de oficios y un expediente con miles de hojas. Pero somos personas, somos hijos, somos hermanos, somos amigos. Somos personas con derechos, personas que exigimos justicia.
No sé cuánto tiempo va a llevar encontrarte, mientras buscamos la verdad. Quiero que mi papá, Karlita y toda la familia y amigos, dejen de sufrir y que esta pesadilla termine. Confieso que es la primer vez que agradezco que mi mamá no está para no sufrir este dolor de no saber dónde estás.
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