Fragmento de la declaración del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, con motivo de su visita a México, 7 de octubre de 2015.
“Para un país que no se encuentra en medio de un conflicto, las cifras
calculadas son, simplemente, impactantes: 151,233 personas asesinadas entre
diciembre de 2006 y agosto de 2015, incluyendo miles de migrantes en tránsito.
Desde 2007, hay al menos 26,000 personas cuyo paradero se desconoce”. Por su
parte, el INEGI calcula en 102,000 las víctimas de la violencia: asesinados y
desaparecidos en menos de una década, aceptando que la mayoría de los casos no
son denunciados.
Sabemos que no son todos ni todas, la práctica cobarde e infame de la
desaparición forzada es cotidiana al menos desde la década de los setenta en
México y para muestra baste la develación de los Otros Desaparecidos a raíz del
caso Iguala. México es una fosa, esa es la terrible realidad. No podemos
voltear la cara, no podemos permanecer indiferentes si queremos seguir
nombrándonos humanidad.
¿Cómo no reducir a los asesinados y desaparecidos a pura cifra? Ni
siquiera existe un padrón, un banco de datos que de cuenta de todos y cada uno,
que los nombre y de cuenta de su muerte siempre violenta, sea por el Estado o
por el crimen organizado... ¿son distintos? Impartición de justicia, castigo a
los responsables y restitución del daño es la consigna que operaría como máxima
judicial ante cualquier crimen. Nada de esto ocurre en este país.
Poner el cuerpo, sacar la voz es una instalación que pretende
constituirse en acción y grito frente a la indiferencia, la apuesta al olvido y
contra la naturalización de una realidad terrible. ¿Cómo representarlos?
¿cuánto espacio ocupan 100 mil personas? ¿cuánta la superficie de su rastro?
¿cómo dar cuenta de la ausencia, del dolor, de la incertidumbre, de la
impotencia? Proponemos expresar todo esto en una acción colectiva concreta de
indignación, visibilización y denuncia convocando a reunir al menos 100 mil
personas que aporten una prenda de ropa (blusa, camisa o pantalón) que
signifique a uno/a de las víctimas de la violencia de Estado en México. La ropa
se colocará sobre la plancha del Monumento a la Revolución y posteriormente
será entregada a organizaciones que la necesiten y puedan reutilizarla.
Las redes sociales han probado su eficacia en convocatorias urgentes.
Esta es una acción social a más de un año de la desaparición forzada de los 43
y el asesinato brutal de 3 estudiantes más de la Escuela Normal Rural “Raúl
Isidro Burgos” de Ayotzinapa, pero refiere también a todxs nuestrxs muertxs y
desaparecidxs. No los dejemos por su cuenta: levantemos la voz, pongamos el
cuerpo por ell@s y para ell@s.
Extendemos la invitación a Poner el cuerpo, sacar la voz, a
difundir esta acción, a sumar tu firma solidaria y llevar una prenda el día del
evento.
Participan sumando su prenda para esta acción:
·
Panteón Rococó
·
Roco Pachukote (Vocalista Maldita Vecindad)
·
Los de Abajo
·
Lengualerta
·
Olinka
·
Sr. Click
Convocan:
Crew A Piedecalle, Comité Cerezo México y URTARTE
- Nos adherimos al evento: Poner el cuerpo, sacar la voz
- Escribe: Nombre, apellidos o nombre de la organización que firma
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