¿Se
estrenó el “Escudo” en Chablekal con golpes y gases lacrimógenos contra el
pueblo?
Pedro Echeverría V.
1. Algún amigo me habló por
teléfono hace una hora para anunciarme de la detención por la policía del
gobernador de Yucatán de los luchadores sociales Marta Capetillo y Jorge
Fernández. Dado del enorme prestigio de más de 30 años de esos compañeros que
fundaron el Grupo Indignación, junto con Cristina Menéndez, el cura Raúl Lugo y
una decena de compañeros, al amigo que me habló indignado y con desesperación
le dije que no se preocupara porque Marta y Jorge seguramente le darán una
vapuleada al jefe de la policía y al gobernador del Estado que terminarán
pidiéndoles disculpas.
2. Los compañeros del Grupo
Indignación llevan tres décadas luchando por los derechos humanos y sin
descanso han publicado su periódico, han apoyado todos los movimientos sociales
y gozan de un bien ganado prestigio. Por lo que mucho conozco durante esas
décadas al dueto Marta/Cristina, las he visto elaborar documentos, artículos,
cartas, todo jurídicamente fundamentado en defensa de leyes y de los seres
humanos. Por ello cuando me hablaron estuve seguro que ninguna autoridad podría
resistir los fundamentos legales de Indignación que, por cierto, es el
movimiento más pacifista que conozco.
3. Desde que apareció la
propaganda de Escudo de inmediato fundamente que Yucatán era el estado más
pacífico de México y que la instalación de cámaras y la multiplicación de
fuerzas de vigilancia era una provocación y reto contra el pueblo pacífico
desde hace por lo menos 500 años. Tengo la convicción que “Escudo” servirá para
proteger a los millonarios, a los ricos, a los empresarios contra nuestro
pueblo que sufre miseria, hambre, desempleo, y tiene necesidad de conseguir
algo para llevarle a su familia. Parece que “escudo” es como la Ley Atenco y
las demás leyes que buscan prohibir los movimientos de protesta.
4. Deseo que el gobernadorcito
no se confunda más; es muy joven para desprestigiarse como los demás
gobernadores de Yucatán que sólo han servido a los intereses de los poderosos
del dinero. Espero que los compañeros del Grupo indignación no hayan pisado un
calabozo y les pidan todas las disculpas, así como los jefes policiacos no
enseñen las garras para que un día el pueblo no se las quiera cortar. Mérida
era la población con más haciendas henequeneras del estado y con muchas más
hectáreas de tierra ejidal. Ya los grandes negocios privados han robado o rematado
tierras y muchos gobernantes se han enriquecido en esos negocios. ¡Ya basta!.
¿No será tiempo de reunirnos en defensa de las tierras de los pueblos? (3/V/16)
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