Escenarios/ Eduardo de la Torre Jaramillo
Victoria pírrica la del PRI-gobierno la del
pasado domingo; ahora pretenden los mismos personajes de ayer hacernos creer
que esta elección fue una repetición de 2007, donde también Acción Nacional
sólo ganó 3 diputaciones locales; empero lo que se les olvida es que en 2010
casi pierden la gubernatura, y escribo casi, porque la sociedad les votó en
contra pero tuvieron al IEV para que les salvará esa elección como en 2004; eso
lo pudieron hacer en 2 ocasiones, -ya no tendrán una tercera-; porque
simplemente desaparecerá el IEV para la elección de 2016, el cual será
sustituido por un nuevo organismo electoral nacional que absorba sus
facultades; y por supuesto que no tendrán la facilidad de manipularlo; además
de enfrentarse a las nuevas reglas del juego político nacional con impacto
local.
Por otra parte, el ganar una elección con una votación del 30%, en donde los candidatos oficiales únicamente ganaron con el 15% de la votación total, esto apunta hacia la baja legitimidad política de los próximos alcaldes y diputados locales; por otra parte, dentro de las diferencias que existieron entre 2007 y 2013 fue la violencia verbal y física de los que practican la paleopolítica, si los porros de la política que pretenden tomar por asalto el gobierno del estado y de allí empezar a tener sus pulsiones aspiracionales de sucesión gubernamental, como afirmaba Don Manuel Gómez Morín “que no haya ilusos para que no haya desilusionados”.
Es pertinente mencionar que el proceso electoral se produjo en tres tiempos: a) la quiebra de la coalición entre el PAN y PRD, que pudo haber costado 800 millones de pesos (bien vale la pena invertir el 10% del presupuesto para defender el botín y seguir endeudando al estado); b) posteriormente crearon a Morris, un candidato que lo extrajeron de la película The Ides of March de George Clooney y Ryan Gosling, la traducción en México fue “Poder y Traición”, esta fue una excelente estrategia gubernamental, ya que al menos los consultores políticos norteamericanos desde la campaña de John Kerry la utilizaron, es decir “las fortalezas se convierten en debilidades”; seré más claro: ¿cuál fue la fortaleza de sociedad xalapeña en 2012?, el antipriismo, por lo tanto resultó clave construir un personaje imaginario para captar ese voto; y c) finalmente el uso de la violencia verbal y física, inclusive llegando hasta la muerte, para inhibir el voto en toda la entidad, por eso el porcentaje de votación tan bajo.
Continuando con la línea de interpretación anterior, primero desalientan a la sociedad veracruzana quebrando una coalición, después se reproduce regionalmente el experimento de la capital y se lleva al sur del estado y se deshace el antipriismo disfrazado de un personaje imaginario y finalmente la violencia. Por lo tanto se pasó del desencanto hacia una mercancía política (Morris) y se terminó con el miedo; todo esto apunta hacia nuevas estrategias ya no de propaganda negra, si no de estudiar el cerebro de los veracruzanos, la neurociencia política, por supuesto que quizá estoy concediendo una racionalidad política de la cual se han esforzado en no mostrarla, porque hay una clara muestra de falta de talento político en quienes están en el gobierno del estado.
Estamos ante una especie de teoría de juegos en Veracruz, en la cual estamos en la parte de “suma cero”, ya que todos perdimos; primero el gobierno del estado y su partido porque en 3 años nuevamente se verán en una situación de pérdida del poder, ninguna sociedad aguanta un partido que estará gobernando 87 años, allí estáel caso de Coahuila, que la podemos tomar de ejemplo, una dinastía familiar que se enfrentó a una elección municipal y salió perdiendo; lo mismo pasará aquí en 2016; pierde la sociedad veracruzana porque una simple minoría decidió quien los va a gobernar de manera mediocre los próximos años; y finalmente, quienes militamos en un partido político, hoy lo sabemos, la única salida es volver a plantear la coalición entre el PAN, PRD (amarillo), PT y MC, ahora con la ventaja de que tenemos 3 largos años para evitar los errores y la compra de voluntades en el interior de los partidos políticos. Será la gran apuesta política en Veracruz.
Finalmente, nuestra apuesta es civilizar la política a través del diálogo, la negociación, los pactos y la ética del perdón para evitar la polarización y las salidas violentas; porque la barbarie ya no tendrá espacio político donde expresarse en el corto plazo, simple y sencillamente porque esa política se agotó en esta elección, ya sólo les queda en su memoria las elecciones pasadas de 2004, 2010 y 2013.
Escenarios/ Eduardo de la Torre Jaramillo enlace:http://periodicoveraz.com/nota.php?id=12423
No hay comentarios:
Publicar un comentario